Realmente le era muy difícil asimilar la noticia de la muerte de su abuela. Él entendía que la condición que tenía era muy complicada y que en cualquier momento podría pasar, pero eso no significaba que fuese fácil. Se tuvo que contener para nos desbordar en llanto, pero esa presión en el pecho no hacía más que aumentar hasta el punto que no podía respirar.

No quería pensar en lo que decía Brion, en verdad eso no le importaba en ese momento porque de ser así sólo arruinaría toda su vida. Se acomodó en el rincón en el que estaba tirado y rogó por fuerzas para mantenerse.

―Ellos te usaron y te desecharon…

―Brion… ―susurró.

―No les importas. ¿Por qué serles fiel?

―Por favor… ―suplicó con voz áspera.

―Después de todo lo que hiciste por ellos y te arrojaron a este agujero sin piedad…

―¡Para ya! ―explotó. Las lágrimas brotaron sin control cuando el dolor fu demasiado para poder ocultarlo―. ¡Sólo detente! ¡¿En verdad piensas que no lo sé?! ¡No merezco nada de esto! ¡Simplemente quería llenar