—Creo que esto está mal. Deberíamos estar huyendo, no… —dejó la ensalada de lado con disgusto—. Preparándole la cena a nuestro primo psicópata.

—Daliah, no sirve de nada que arruines la ensalada. Debemos manejar esto de forma adecuada —musitó Soren—. Debemos realizar un movimiento divino que nos permita tener ventaja sobre el tablero que está armando Macon.

—Lo mejor sería envenenar su bebida y tirar su cadáver al drenaje —se quejó la chica de ojos miel—. Yo me ofrezco si tú no quieres matar a Macon.

—¿Crees que no lo he pensado? —dejó de lado el cuchillo que utilizaba para picar el pan—. Mi gente lo siguió y en él lo sabía, es por eso que dio vueltas por toda la ciudad hasta que logró escapárseles. Buscaron por todas partes, pero no hay indicios para saber donde se está quedando o si acaso puede estar con alguien más. Macon no es estúpido, sabe lo que debe hacer para estar un paso a delante de nosotros y en este momento él ha logrado lo que quería, acercarse a nosotros. Lo importante