Zara

¿Será posible que la vida se esté arreglando para mí?

De pasar a casi abortar a mi hijo a estar comprometida con Damon Blake y con un enorme anillo de diamantes en mi mano… Me echo a reír por lo surrealista que se siente todo esto, pero no me lo cuestiono porque es demasiado perfecto para ser cierto, y, a decir verdad, no quiero despertar de este mágico sueño.

Antes de llegar a mi casa escondo el anillo en el bolsillo de mi ropa, no quisiera que mi madre descubriera el secreto tan pronto.

Sé que Damon tiene los suyos, sin embargo, estoy confiada en que me lo dirá todo a su tiempo. Mis instintos me dicen que puedo creer en su palabra con los ojos cerrados; él cumplirá.

Por suerte para mí, mi madre no ha llegado aún. Recojo a Oli de lo de la vecina y entramos de prisa al tráiler, antes de que ella se aparezca.

—Por poco creí que no llegarías a tiempo —me dice mi hermanito.

Podrá tener cinco años; casi seis, pero es un chico muy listo. Pronuncia con elocuencia todo lo que dice, pare