Capítulo269
—¡Déjanos intentar algo más! No te arriesgues.

Rafael también intentó detener a Faustino.

Mientras Jenny y John permanecían tranquilamente dentro de los vehículos, ignorando los intentos de los policías por hacerlos salir.

Cuanto más tiempo pasara, mejor para ellos.

—¿No van a abrir? ¡Entonces romperemos los cristales a tiros para obligarlos a salir! —exclamó Armando, que ya había perdido la paciencia, sacando su arma y disparando contra la ventanilla.

¡Bang!

Pero después del disparo, el cristal quedó intacto, solo con una pequeña marca blanca.

Y la bala rebotó, ¡impactando en el muslo de Armando!

—¡Ah, es vidrio blindado, las balas no sirven! —gritó Armando sujetándose la pierna con dolor.

—Déjame ver tu herida.

Faustino se acercó rápidamente a examinar. Por suerte, la bala había perdido gran parte de su fuerza al rebotar.

La extrajo sin dificultad y rasgó un trozo de tela para vendar la herida de Armando.

—¡Gracias, doctor! —dijo Armando agradecido.

—¿Vidrio blindado? ¡Intentemos arr
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo