Nos bajamos de la camioneta y me acerqué a ellos. "Sus esposas llegaron antes que ustedes. Claudia fue a ayudar a Mirabel porque estaba muy herida, así que se fueron para la clínica." Explicó mi madre, revisándome de arriba abajo, por lo que me sentí como un niño otra vez. "¿Dónde están todos los miembros de la manada?" Le pregunté a mi padre.Él suspiró. “Les ordené que se escondieran, si nos atacaban, al menos podríamos salvarlos a ellos. Después de todo, un infiltrado en un búnker no puede hacer mucho. No tendrían más información que dar, y sabiendo que Yuri no va tras la gente sino tras los líderes, no los buscará en los búnkeres." Explicó mi padre, estuve de acuerdo. "Y dime, ¿sí les sirvieron nuestras ideas?" Preguntó con ansiedad, así que asentí. Mis padres chocaron los cinco con alegría, fue muy raro ver eso. "Ojalá nos hubiéramos quedado para disfrutar de la acción, pero no quería dejar a la gente desprotegida." Dijo mi padre, así que le agradecí. "Inkabod debe hab
~ Leo ~ Escuché a Amelia entrar a la habitación. Aunque estaba medio dormido, haberme quedado tanto tiempo despierto peleando contra esos mutantes me había dejado exhausto, y necesitaba descansar. No sabía cuánto tiempo había estado acostado, pero la luz que se metía por las cortinas me hizo saber que el sol ya había salido. Amelia fue al baño, y no podía cree que aun tuviera energía como para bañarse después de una noche tan larga. Luego, se acostó desnuda, supuse que estaba demasiado cansada como para ponerse algo. "¿Cómo está Mirabel?" Le pregunté, ella se volteó para mirarme. "Claudia logró estabilizarla. Inhaló un poco de plata y todavía no despierta, pero Claudia dijo que en unos días estará bien. Katya y ella se quedaron cuidándola. El resto tuvimos que regresar a dormir, quedarse despierta toda la noche peleando es agotador, Leo." Se quejó, así que la abracé, riéndome. "Bienvenida a la vida de una líder." Le dije con cariño, pero ella refunfuñó. "Recuerdo lo que dij
Yo aun creía en mi teoría, pero la de las chicas explicaba por qué tendrían más de cien guerreros y no los veinticinco que Andrew nos había indicado que usaban en cada ataque. Si tuvieran un infiltrado, habrían tenido que actuar muy rápido como para conseguir tanta gente, y Alexei se habría dado cuenta. Cuando terminó, no sabía si aceptar la teoría de las mujeres. Si tenían razón, habríamos regresado a los miembros de la manada a sus tierras solo por ser paranoicos. "¿Qué tal si hacemos una competencia de teorías?" Propuso Sylvester. Yo lo miré con cara de, ¿qué carajos estaba hablando? "Torturemos a Inkabod hasta que nos diga qué pasó en realidad, sí nuestra teoría gana, las mujeres se encargarán de cocinar por una semana, pero si ellas ganan, nosotros cocinaremos." Explicó el pequeño juego, pero Dominic no estuvo de acuerdo. "No, no, no! son demasiado listas para arriesgarnos, y yo no sé ni como fritar un huevo. Es más, creo que ninguno de nosotros lo sabe." Se quejó Domini
~ Leo ~ Cuando Casper terminó de preparar al prisionero para el interrogatorio y la tortura, me aviso a través del enlace y nos dirigimos hacia allá.Todos estábamos emocionados por saber qué equipo ganaría la apuesta y me preguntaba cuál teoría resultaría ser la correcta. Esperaba que ganáramos, porque sería un desastre tener que cocinar una semana entera. Así como a Avery, me gustaba la buena comida, y para ser sinceros, no creía que pudiéramos preparar algo decente. Entramos a la bodega donde estaba el cuarto de torturas. Las mujeres y mis padres fueron llevados a una habitación que tenía una pared de vidrio que separaba el cuarto de torturas de la habitación de observación, así las mujeres podían ver lo que pasaba adentro, pero los que estaban en el cuarto no podrían verlas, para ellos, el vidrio era como un espejo. Eso nos ayudaba a observar los interrogatorios en secreto, sin que el prisionero se diera cuenta quién estaba detrás de escena. Inkabod estaba atado a un trozo de
"La única razón por la que la mayoría de nosotros estamos ayudando es porque no encajamos en este mundo y todos queremos llevar una nueva vida. La ley de Dimitri nos persigue, así que queremos nuestra libertad a toda costa. No estoy de acuerdo con sus ideas, pero tengo que sobrevivir y seguirle la corriente, por lo que hice todo lo posible por complacerlo. Yuri no planea conformarse solo con el Este y el Sur, también quiere borrar a Erik y a toda la línea de los Volkov, para convertirse en el único Rey. Ese es su verdadero plan. De hecho, tiene una lista de todos los descendientes de los Volkov. Joan Clayman le ha dado un informe detallado de cada Volkov que existe y dónde vive. Además, ha estado intentando hacer que las familias más importantes del Norte se le unan, pero después de lo que pasó en la última rebelión, todos están asustados. No estoy entre los más cercanos a él, pero sé que la misión en general es tomar el control de las manadas y apoderarse de las tierras. Ahora q
~ Tamia ~Nunca olvidaré la noche en la que mi maravillosa vida se convirtió en un completo desastre. No puedo sacar de mi mente el momento en que todo cambió.Mi esposo y yo fuimos a una fiesta a la que no quería asistir, pero Casper, un beta amigo de Leo, era el anfitrión y él estaba decidido a honrar su invitación a toda costa. Debí haberle suplicado un poco más que nos quedáramos en casa, pero quería ser una esposa comprensiva, así que decidí seguirlo y ese fue mi peor error.Leonardo Albert era mi esposo y el alfa de la Manada de la Montaña, lo que me hacía ser conocida como Tamia Albert, la Luna de la manada. Leonardo me eligió para ser su Luna cuando tenía diecinueve años. En realidad, empezamos a salir cuando yo tenía diecisiete y él veintiuno, aunque no llegamos a la intimidad física, ya que, aún no tenía la edad para eso, nos enamoramos de todos modos y juramos permanecer juntos.Muchas de las mujeres de la manada me odiaban porque él solo tenía ojos para mí y no es que yo
~ Leo ~Tamia era el amor de mi vida y no había nada que no haría por ella. La amaba con toda mi alma y cuando le prometí que siempre estaríamos juntos, lo dije muy en serio. Era perfecta para mí; hermosa tanto por dentro como por fuera y tenía la fuerza que una Luna debía de poseer. Amaba cada una de sus cualidades y sinceramente no podía dejarla ir.Estaba enamorado de ella desde que recuerdo, por eso cuando se presentó la oportunidad de cortejarla, la aproveché de inmediato y como resultado, habíamos estado casados durante cinco años. La amaba inmensamente. Mi amor por ella era tan fuerte que creía que sería fácil rechazar a mi compañera destinada si alguna vez la encontrase y ella prometió hacer lo mismo a cambio. Sin embargo, nunca imaginé que rompería esa promesa de una forma tan cobarde.Tamia no quería ir a la cena de Casper; debí haberla escuchado y decirle a mi amigo que no iríamos, pero ahí inició mi caída. El fresco aroma a menta y manzanas me tomó por sorpresa y me atra
~Tamia~ Por la mañana salí a correr y al regresar, la gente me miraba con curiosidad. No necesitaba tener más de 2 neuronas para saber que ya se había difundido la noticia de que el Alfa había encontrado a su compañera destinada. Leo no intentó ocultar la atracción entre Amanda y él. Internamente me preguntaba si los miembros de la manada estaban contentos de que su Alfa sería más fuerte ahora que había encontrado a su compañera destinada. También me cuestionaba a mí misma, si me apreciaban lo suficiente para que se preocuparan verdaderamente por mí y el dolor que sufriría, el cual hasta podría volverme loca. Honestamente, me preguntaba de qué lado estarían.Pasé corriendo junto a los miembros de la manada y regresé a mi casa. Leo estaba desayunando pero, no le había hablado y no planeaba hacerlo, porque no tenía nada que decir. Fui al dormitorio a ducharme y vestirme para comenzar el día, había una reunión a la que debíamos asistir juntos y por mucho que preferiría quedarme en cas