Después de leer la carta, miré al camarote de arriba, noté que tenía un cajón a un lado, así que bajé la mirada y ahí estaba mi cajón, era igual al ancho de mi cama. Lo jalé y encontré la ropa de la que hablaba la carta.No era ropa de trabajo, sino ropa casual, además de algunas cosas de aseo y una toalla.Saqué lo que necesitaba y decidí revisar lo que había en el cajón del tocador al lado de mi cama.En el primer cajón del tocador había un diario y un lapicero, en el segundo cajón encontré unos delantales. Supuse que debía ponerme un delantal antes de salir.Caminé por el lugar hasta que encontré el baño, no había entrado a uno por casi un mes, así que fue como el cielo. También tenían agua caliente y el gel de baño de limón se sentía fresco, me lavé el cuerpo y el cabello, hasta tenían acondicionador. Fue increíble.No podía creer lo bien que trataban a sus trabajadores, eso era mucho mejor que en Gad.Había visto a los Omegas de Gad un par de veces, cada vez que los veía, parecía
~ Leo ~Sinceramente, Amelia me ponía la piel de gallina con tan solo verla. Se sentó en la mesa, y me miro durante casi toda la mañana, no estaba haciendo nada malo, pero sus ojos grises eran difíciles de ignorar, era como si estuviera esperando algo."Ya es mediodía, Alfa. ¿Qué le gustaría comer?" Me preguntó, parándose de su silla."Cualquier cosa que llené el estómago y alcance para dos." Le dije."Ok, Alfa." Respondió y fue hacia la cocina.En cuanto salió de la sala, me sentí agradecido, por fin podía respirar con normalidad, podría jurar que me estaba mirando con los ojos de su loba.Black sentía como si lo estuvieran asfixiando. La verdad, me sentía un poco débil por el rechazo, pero no me importaba, no podía arruinar mi vida dos veces. El hecho de que estuviéramos destinados lo arruinaba todo, además del hecho de que la había encontrado robando. El destino era como un castigo, algo de lo que nunca quería hablar ni experimentar de nuevo. A partir de ahora, yo decidiría mi prop
"Ahora esas cosas son mías. Mi manada vive en parte de esas tierras y estoy usando el dinero para administrar mi negocio, incluso he producido más dinero. Así que le respondí diciéndole que como ya no vive en el Este, no puede tener tierras aquí." Dijo Kyle, pero no podía creer que fuera tan estúpido, estaba furioso con él."Al final me respondió que llevará el caso ante el consejo." Añadió con un suspiro."¿Así que quieres que descarte su caso?" Le pregunté, a lo que él asintió."¿Eres estúpido o qué? Linda es una Lady, está por encima de mí. Incluso existe la posibilidad de que su esposo supervise el caso." Le dije suspirando."Pero tú conoces a su esposo y cómo es tu amigo, puedes hablar con él sobre esto." Dijo Kyle. Yo no podía creer lo descarado que era."Estás loco. ¿Cómo carajos quieres que hable con Theodore sobre algo así? ¿Ya se te olvido la severa paliza que te dio?" Le pregunté, entonces bajó la cabeza."Ella no necesita nada de eso, solo quiere que sufra. Y créeme, crian
~ Amelia ~Observé la pelea entre el Alfa Leo y su amigo, era muy triste lo que le estaba pasando. Por lo que escuché, su amigo era un desgraciado y se merecía todo lo que le estaba sucediendo, pero también aprendí que Leo era un hombre muy poderoso e influyente.¿Por qué el destino me dio algo tan por encima de mis expectativas?No obstante, sus palabras me hicieron pensar que tal vez nunca podría estar con él. Me pasaron muchas cosas horribles cuando vivía en la calle y estaba en las prisiones, cosas de las que nunca hablo y prefiero ignorar. Pero en el fondo, conozco mi verdad.Cuando encuentro un lugar donde dormir por la noche y puedo pasarla sin que me molesten, lo valoro mucho, porque solo en ese momento, puedo tener algo de paz.Las palabras de Leo me asustaron y me hicieron casi perder la esperanza por completo, me sentí terrible por el plato que rompí mientras escuchaba la conversación con su amigo, pero no fue a propósito. La verdad, fue que su comentario sobre las razas m
La mujer me sonrió y yo también le sonreí, no sabía qué iba a hacer."Hola, Amelia. Mucho gusto, soy Macy, la Omega principal." Dijo con una cálida sonrisa, yo asentí, sin saber qué decir."Es la primera vez que tenemos a una Delta con nosotras, pero quiero que sepas que eres más que bienvenida. Si necesitas algo, no dudes en decírmelo. El Alfa dijo que trabajarás solamente para él, así que a partir de mañana te encargarás por completo de la cocina y la limpieza. Hoy yo me encargue de eso, así que puedes dormir tranquila esta noche." Dijo con una sonrisa."El Kappa Tom me contó todo lo que pasó y quiero que sepas que, con el tiempo, el Alfa será más amable contigo, es solo que ha pasado por muchas cosas." Me dijo por el enlace mental, luego me guiñó un ojo."También te aconsejo que tengas cuidado con algunas mujeres de aquí. Les quitaste el trabajo de sus sueños." Me volvió a hablar mentalmente y me reí, al menos ya sabía la razón de por qué me miraban mal.Supuse que no tendría ningún
"Soy una invitada y vine desde el Norte para visitarte, Leo. Lo mínimo que podría esperar es algo de respeto de parte de tu personal." Se quejó, pero él no dijo nada.Serví el sándwich y le llevé el plato al Alfa. Luego, a propósito, puse la mitad de un sándwich en un plato y lo puse frente a la mujer.Ella miró el plato, incrédula."¿No le pediste que hiciera el desayuno para los dos?" Le preguntó, por lo que él me miró."Bueno, me comí mi parte, señorita, y no comparto mi comida." Le respondí con indiferencia, Leo se rio entre dientes."Es señorita Clayman." Me corrigió, pero no me importó, ya había dejado claro mi punto."Lamento no haberlo explicado mejor, Amelia. Puedes retirarte. Compartiré el mío con ella." Me dijo el Alfa, eso me dio un poco de rabia.Hice ese delicioso sándwich para él, si hubiera sabido que ella estaría en su oficina, habría hecho uno seco para ella."Dudo que a alguien con el cuerpo de la señorita le gusté ese sándwich, Alfa." Dije, recogiendo el recipiente
~ Leo ~Amelia me sorprendió. Aparte del delicioso sándwich, su actitud hacia Leah casi que me hizo orinar de la risa. Sabía que estaba mal ese proceder de su parte, porque Leah era mi invitada, pero no quise regañarla delante de ella. Amelia era una Delta que había tenido mala suerte y no tenía sentido humillarla, especialmente cuando Leah también era una Delta como ella.Las Deltas eran muy rebeldes, lo sabía porque cuando estuve casado con Tamia, ella era igualita. Siempre sentían la necesidad de probarse a sí mismas porque, aunque estaban en la cima, no estaban entre los tres primeros rangos y podían ser fácilmente ignoradas.Aunque dije que compartiría el sándwich con Leah, apenas lo probe me arrepentí, estaba delicioso, como todas las comidas que Amelia había preparado para mí. Pero no podía negarle un pedazo de esa delicia a mi invitada. Me pregunté cómo habría sido la vida de Amelia, ella era todo un misterio para mí, pero la vi como una gran mujer. Normalmente, las Deltas er
"¿Hiciste comida para dos?" Le pregunté, pero no respondió porque había hecho lo mismo que en la mañana."¿Sabes que tengo una invitada y no hiciste comida suficiente?" Pregunté, sonando un poco enojado."Ya empezaba a preguntarme quién es el jefe aquí." Dijo Leah en un tono de broma, pero su comentario me molestó."No hables de asuntos que no te importan. ¿A ti que te importa cómo me relaciono con mi personal? Para empezar ni siquiera deberías estar en mi casa, así que agradece que te traje aquí." Le aclaré, ella se quedó impactada. Sabía que estaba sorprendida de que le hablara así delante de Amelia."Ve a preparar algo para mi invitada y pon la mesa para mí." Le ordené a Amelia con firmeza. Ella no dijo nada y simplemente se fue, tendría que hablar con ella a solas cuando estuviera de mejor humor."Tu comida está lista, Alfa, tu invitada puede acompañarte a cenar." Dijo, me sorprendió que pudiera preparar algo en cinco minutos.Amelia había puesto la mesa para dos y me pregunté de