La casa de Samanta, o el nido de amor de Vinicio y su verdadero esposa, no era tan majestuosa o grande como la de Vicenzo, un enorme jardín a la entrada decorado con rosa y una fachada cuidadosamente bien pintada de blanco, era suficiente para sentirme humillada y miserable, la casa en que me mantuvo cautiva emocionalmente, era más pequeña, mucho más pequeña, y no tenia un jardín, ni cochera.Eso no me imperaba, lo que me lastimaba era el juguete que hizo de mí. Nunca sintió por mí una pizca de amor, me reprochaba a mi misma el no darme cuenta de eso, era claro con toda su actitud de indiferencia.Vicenzo atravesó el césped y con el puño cerrado golpeó la puerta con toda intención de derribarla, gritando con histeria llamando a Samanta. Observe a todos lados comprobando que no alterara la paz de aquella distinguida zona residencial.La puerta se abrió y la mujer vestida de negro y una batita blanca le invito a pasar—Joven Vicenzo, pase por favor—¿Dónde esta Samanta, y mi hermano?—a
Una puerta se abrió por el otro extremo de la sala, Matías entraba hasta acercarse a Drago, le susurro algo en el oído, y de inmediato salieron ambos para conversar fuera, Vicenzo se movió diligente para encontrarlos por el otro pasillo, yo me quede observando a Samanta, su expresión de seguridad se redujo en cuanto se quedo sola, su rostro estaba desencajado y me alegraba saber que no era tan lista como pretendía aparentar. Tenia deseos de entrar y enfrentarla yo misma, pero la curiosidad de saber que era lo que Matías habia sacado al detective del interrogatorio en ese momento tan preciso, me llevo ir a su encuentro.—Investigamos la dirección y el propietario del departamento en donde tenían a su hijo— abrió un folder que le entrego Matías. —Donna Owen, su nombre les parece conocido.Cualquier nombre era extraño para mí, estaba en blanco, Vicenzo negó con la cabeza de inmediato—Investiga todo lo que puedas de esa mujer —Matías asintió—Esta hecho señor, —sonrió pasmado por unos s
Antes de contarle todo esto a la policía, mi padre me pidió un poco de tiempo para hablarlo conmigo, me convención cuando dijo que me lo debía, que su verdad la supiera por su boca solamente por él.Samanta no diría mas de lo que le convenia, me entraba la duda; ¿ella estaba convencida de eso o conocía realmente las verdaderas intenciones de Vinicio?Mi padre sintió seguridad solo en la casa de Vicenzo, tenía una mirada acongojada, pero su cuerpo estaba erguido, estaba consiente de sus errores, y al mismo tiempo reflejaba la decisión de enfrentar su castigo. era un hombre ambicioso, pero bastante receloso, no era de enfrentar riesgos mayores, deseaba un banco como el de los Sanlúcar, grande e imponente, pero nunca encontró un modo de incrementar sus acciones, a penas conseguía mantenerlo a flote. Era listo pero prudente, desconfiado, escrupuloso.No comprendía como se dejó envolver por Vinicio.—La primera vez que conversamos él era muy joven, y vi la ambición en su rostro, me ofreció
Usted se caso con...Me gano un impulsó, me acerque a él y lo abrace por la espalda, de inmediato se dio la vuelta y me apretó contra su pecho, sus enormes brazos me rodearon él estaba buscando un poco de consuelo, esto era todo lo contrario a Vinicio, era vulnerable, sentimental, aprensivo.Escuche sus sollozos y no pude decirle una sola palabra que pudiera darle paz, era difícil cuando yo estaba aún más rota que él, lo único que pude hacer fue cerrar mis brazo en su espalda y apretarlo con la misma fuerza con la que el me aprisionaba.Recordé verlo jugar con Peter en el patio de casa de mi padre, nunca habia visto a alguien ser tan amorosos con un niño que aunque lleva su sangre, lo trataba como su hijo, con una amor indescriptible.Lloro como un niño pequeño sobre mis hombros, esperaba ver a un hombre fuerte, decidido, quizás no podía hacer más de lo que ya había hecho. Se aparto de mí, limpiándose las mejillas, me miro a los ojos unos segundos que parecieron detenerse.—Peter tien
No era perfecta para mí.Valla, hasta el asistente parecía ser más listo. Aunque realmente esto no era difícil de deducir.No era indiferente a la incomodidad de Vicenzo, podría percibir lo que el sentía, después de todo era su hermano, cuanto mal puede hacer una persona y aun así ser ciegos y creer que algún día cambiara, o no ser esa persona que todos nos presentan, pensar o desees que es un buen hombre, maduro y domine su carácterPodría estar equivocada y Vinicio no era el gran monstruo que recordaba, solo estaba enojado por qué las cosas no salieran como esperaba. Este intento de engaño no va conmigo, lamento tanto en la situación en la que está Vicenzo pero estoy lista para hablar, sin importarme las consecuencias. —Interesante deducción mi querido Amery. —recito Drago en tono dramático. Casi aplaudiendo como un profesor a un alumno.—Oh maldición ¿Cómo lo supo jefe?—dijo como si le frustrara no haber conseguido la delantera—No es difícil especular —afirmo Drago —Vicenzo no es
Volví al comedor, Amery estaba de espaldas observando un cuadro de frutas que colgaba de la pared. Aunque intente controlarme fue mucho más fuertes las emociones que estaba comiéndome las entrañas ahora, una mezcla de miedo con felicidad y un poco de coraje, estaban cerca de Peter, intente controlarme pero mi rostro mantenía una expresión de angustia.Mi felicidad no apartaba los pensamientos negativos, de qué manera esto podría salir mal. Volví a sollozar, aunque fue muy quedo fue suficiente para hacer notar mi presencia detrás de Amery.—¡Oh señora! —Dijo Amery cuando me vio aún más acongojadas —, creo que por ahora es suficiente su información debemos compararla con lo que su padre pueda decirnos.Me tranquiliza, no quería ni podía hablar más de esto, lo más importante ya lo había contado, mis ideas estaban revueltas.—No imaginé que remover un poco mi pasado fuera tan incomodo, estaba segura que nada de lo que hizo Vinicio podía afectarme, lo lamento.Limpie mis ojos, mis manos es
CorazonadaSu rostro se desfiguro convirtiendo el dulce rostro de Vicenzo en el de un monstruo. Mientras Archi mostraba unos dientes rojos con una quijada apretada, note una chispa en sus ojos.Los gritos de Vicenzo alertaron a Aurora quien fue a buscar ayuda. Yo me coloque en el suelo junto a ellos, intentaba que Vicenzo me mirara, pero sus ojos estaban enrojecidos sobre el chofer.—¿Dime donde esta?—No se de que estas hablando, yo no haría eso a Helen— aseguró, no le mostraba miedo a Vicenzo aunque era un poco más robusto y fuerte, o por que tuviera el suficiente dinero y las influencias para meterlo a la cárcel. —Yo no le hice nada a Peter, ese niño es como yo, que no lo entiendes, igual que yo, Apuesto a que si Vinicio despierta no le daría su apellido, Helen solo fue un poco de diversión para él, Peter merece todo esto así como yo lo merezco. Ella es una victima como lo fue mi madre.Su buena voluntad era solo una trampa que fue tejiendo para ganar mi confianza, Archi solo querí
No estará soloApenas colocaba sus brazos alrededor de mi espalda dando una pequeñas palmadas, me tomo unos minutos en silencio asimilarlo, mi hijo muerto, necesitaba gritar pero la voz ni las fuerzas se liberaba, mi alma se desprendía de mi cuerpo y me dejaba como un bulto en la habitación un saco de carne y huesos sin vida, estaba muerta en vida, mi futuro sé ponía frente a mi como un túnel oscuro, lleno de soledad y frío.Aún no tenía las respuestas que necesitaba ¿por qué lo hizo? ¿De verdad tenía la sangre fría de arrebatarle la vida a un pequeño indefenso? ¿De verdad era mi hijo?—Helen —la ronca voz de Vicenzo resonó cerca de nosotros con una suave condolencia, Amery se apartó de inmediato, Vicenzo sé apresuró a tomarme de las manos al verme trastabillar y sostenerme de la pared. Me aferró a él con una necesidad de sostenerse el mismoAlce la vista su rostro se oscureció, lleno de rabia, de odio, de una tristeza inmensa. Acaricié su mejilla con la palma de mi mano, el tomo mi m