Bueno estamos llegando a los últimos capítulos, estoy intentando darlo todo para poder terminarlo para este mes, nuevamente me disculpo por la tardanza en que publico los capítulos y espero su apoyo. saludos Danna.
Pasaron unos minutos en lo que Daemon no veía a Dalma en ningún lado, ya comenzó preocuparse su inesperada ausencia y si alguien le hizo algo y la molesta insistencia de Yamiil ya comenzó a incomodarle , se levantó en plena subasta aunque su madre lo miro mal, salió pidiendo disculpas, pero ahora necesita buscarla, salia del salón cuando minutos después lo siguió Nicolás.—¿Tío… pasa algo?—No encuentro a Dalma y salí a buscarla.—Quieres que te ayude, mi padre tampoco está.—Está bien, si la encuentras primero, me avisas. tengo un mal presentimiento.—Todo Estara bien.Ambos se separaron y tomaron caminos diferentes mientras uno iba al pasillo el otro se dirigía afuera.Daemon Llegó a un cuarto que olía horrible, era como alcohol, pero mucho más fuerte, se tapó un poco un poco la nariz y siguió fisgoneando un poco había un poco de desorden y salió porque ya sentía que se mareaba.Cuando entraría a otro cuarto, un mensaje llegó a su celular, en cuanto vio de que se trataba corrió haci
Dalma se encontraba semiinconsciente cuando fue metida al coche por la fuerza, podía sentir los movimientos a su alrededor, pero le era imposible entender o ponerse derecha por lo mareada que se encontraba, a lo lejos comenzó a escuchar gritos, la persona que estaba a su lado la había abandonado y minutos después alguien comenzó a hablarle tratando de que cobre la conciencia, lentamente comenzó a mantener la vista en la otra persona, poco a poco pudo mantener abiertos los ojos y la imagen a su alrededor comenzó a verse más nítido, pero fue entonces que todo lo sucedido la abrumo de golpe, a su lado se encontraba Nicolás que le preguntaba si estaba bien, pero ella todo lo que quería hacer era irse de ese lugar.—Déjame ir, te lo suplicó —Dalma, no puedes mira tu estado, ¿no podrás dar dos pasos, además a donde iras?—Por favor, déjame ir.—No puedo, mi tío me pidió que te cuidara, no puedo dejar que vayas sola.—Por favor, por los viejos tiempos, necesito irme ahora.Nicolás dudaba si
Dalma Han transcurrido cuatro meses, y parecía que fueron cuatro años, muchas cosas cambiaron y aún faltan a cambiar. Primero y reversible, mi madre se fue y con ese hecho me acerque más a mi padre aunque no pueda cambiar el pasado, podemos construir un nuevo futuro sin ataduras del pasado, eso no significa que todo quedo olvidado, pero es mejor perdonar que acarrear malos pensamientos y malos recuerdos del pasado, debo de pensar en mí y mi hijo que viene en camino, ya no soy solo yo, tengo a alguien más importante en quien pensar. Daemon ha respetado cada decisión que he tomado, siempre ha estado a mi lado, pudimos hablar de todo lo que nos molestaba, de secreto y cosas que en el futuro serían un problema, estamos bien y mejorando aunque este último mes la convivencia no ha sido como lo pensábamos, las náuseas matutinas iban en aumento cada día, luego está el problema de que tengamos mucha gente en la casa, para él es lo esencial por mi estado, pero para mí es estresante, siento qu
Dalma había despertado con un mal presentimiento martilleando su corazón, a decir verdad hace unos días que ha tenido este sentimiento de angustia oprimiendo su corazón, aún así se obligó a seguir su rutina diaria, decidió no darle importancia y fue a sus clases como todos los dias, cuando en medio de una de ellas recibió una llamada que hizo que su corazón se detuviera por un segundo y volviera a latir en el próximo con una mala noticia, una enfermera del hospital le había llamado para informarle que su madre está hospitalizada en estado grave, no dudo un segundo en salir corriendo dejando atrás la universidad, rumbo a su apartamento, no sabia que hacer, ¿a quien debería llamar?, se detuvo un segundo respiro profundo y busco un poco de sus ahorros esos que casi no tocaba y salió directo a tomar el primer autobús que la llevaría directo al hospital donde se encuentra su madre. Ella había sacrificado mucho para que su hija pueda tener una mejor educación y no podría solo quedarse ahí
Había pasado dos días desde que Dalma estaba en el hospital cuidando de su madre, lo bueno es que lentamente ya se esta recuperando de esa anemia que cogio por los medicamentos que le quitaba de apoco el apetito, ya tiene más color sus mejillas y va recuperando de apoco su apetito y con respecto al dinero aún no sabía que hacer ni de donde sacarlo, su madre también estaba preocupada por su hija, por situaciones como esta, era que queria evitarle que supiera lo de su enfermedad.Dalma pensando en una solución, le vino a la mente fue pedirle ayuda a la única persona que una vez prometió nunca buscar, su padre. Aquel hombre que un día se fue y solo se acordaba de ella en fechas importantes.Su padre es conocido en la Alta sociedad por ser un político de renombre y estar casado con una de las modelos más bellas y famosa del país y diez años menor que él.—¡Jamás! —grito su madre al oír lo que su hija le propuso —Prefiero morirme a pedirle ayuda al desvergonzado de tu padre, si es para ti
Dalma volvio al hospital con las pertenencias en mano, charlo un rato con su madre hasta que quedo dormida, llamó a su madrina y dejo encargada la salud de su madre, para que estuviera al pendiente por cualquier imprevisto que se presente, mientras ella volvía a la Universidad, habia discutido con su madre minutos antes, pues ella no estaba en contra de que dejara de estudiar incluso le pidió que la deje morir y así sería una carga menos, después de decir aquello ambas lloraron y su hija le hizo prometer nunca más decir algo parecido. Ya no le dijo nada más, pero la decisión ya estaba tomada, aprovecharía los días que estaría allá para darse de baja, aunque eso signifique una discusión con su mamá después. Pero sabía que debía de hacerlo y personalmente sería mucho mejor.Unas horas después de un cansado viaje, llegó al apartamento donde compartía piso con una compañera, pero se encontraba en silencio y casi vacio diria, el silencio reinaba ese lugar, no le dio mucha importancia y fu
Ambas amigas comían papas con refrescos mientras insultaban al mundo entero por ser tan injusto con algunas personas. —Es que de verdad no comprendo, por qué Nicolás tuvo que actuar así, no voy a negar que cuando comenzó a coquetearme me pareció insólito y más sabiendo su fama de mujeriego, pero aun así caí en su encanto y en su labia, pero que lo haya hecho por mi virginidad, me parece asqueroso.—No era insólito, tú eres una chica muy bonita, amable, adorable y bella por donde te vean, cualquier chico estaría más que feliz por tenerte a su lado, no te descalifiques.—No lo hago, Pero no entro en la categoría de su tipo ideal, chicas que entraban de noche y salían al otro día con los tacones en mano.—Tú eres el tipo de cualquiera amiga, eres de las pocas personas con las que me llevo bien, sabes ¿por qué? —niega —no eres falsa y puede que hasta de verdad ese imbécil sienta algo por ti, digo quién dice y toda esa actitud de ganador solo sea una máscara, una fachada para aparentar lo
Luego de todo eso pasaron unos días lleno de suspenso y de no saber qué hacer, si era buena idea esperar o ir por el plan original, le llego un mensaje a su correo donde le enviaban una dirección más una fecha y hora donde asistir. Al llegar, se encontró con un recinto cerrado, de solo imaginarse el tipo de lugar, las piernas le temblaban y solo quería salir huyendo de ahí, pero no podía la imagen de su madre, estaba presente en cada pensamiento y sabía que cada día se ponía peor, así que se armó de valor e ingreso con la cabeza en alto, ahí la recibió una chica amable y risueña que la llevó hacia una oficina donde olía un fuerte olor a perfume. En el trayecto no pudo observar mucho porque solo fue un pasillo a otro, allí adentro se encontraba una señora bastante guapa de unos cincuenta y a un costado en una fila como esperando orden unas cuatro chicas que parecían tener entre dieciocho y veinte años.—Pasa, escuchen bien aquí están por una razón y solo ustedes la saben, a mí no me i