Dalma volvio al hospital con las pertenencias en mano, charlo un rato con su madre hasta que quedo dormida, llamó a su madrina y dejo encargada la salud de su madre, para que estuviera al pendiente por cualquier imprevisto que se presente, mientras ella volvía a la Universidad, habia discutido con su madre minutos antes, pues ella no estaba en contra de que dejara de estudiar incluso le pidió que la deje morir y así sería una carga menos, después de decir aquello ambas lloraron y su hija le hizo prometer nunca más decir algo parecido.
Ya no le dijo nada más, pero la decisión ya estaba tomada, aprovecharía los días que estaría allá para darse de baja, aunque eso signifique una discusión con su mamá después. Pero sabía que debía de hacerlo y personalmente sería mucho mejor.Unas horas después de un cansado viaje, llegó al apartamento donde compartía piso con una compañera, pero se encontraba en silencio y casi vacio diria, el silencio reinaba ese lugar, no le dio mucha importancia y fue a su cuarto a cambiarse de ropa y volvió a salir, Ahora con dirección al departamento de su novio.El susodicho no sabía que había regresado, así que sería una sorpresa, una agradable sorpresa.Cuando llego a la entrada del edificio saludo al conserje, quien de forma amistosa le devolvió el saludo, su Novio es Nicolás y gracias a su padre puede costear un lujoso departamento en una de las mejores zonas, no como ella que su zona de residencia es peligroso incluso de día.Subió hasta el tercer piso, y cuando iba a tomar sus propias llaves, que él le había regalado, se encontró que estaba abierto, entró y caminado por el pasillo en silencio, escuchó que hablaba con alguien alegremente, por un momento se asustó y se tocó el corazón pensando que talvez esté con otra mujer, pero volvió a respirar cuando escucho la voz de su mejor amigo, Luis.—Sabes amigo— dice luis después de dejar de reir —ya es momento que te dé de baja con la apuesta, ya casi tres meses y aún no has conseguido nada.¿Apuesta? ¿Tres meses? ¿De que estarán hablando estos dos?—Yo no me doy por vencido, me conoces mejor que nadie —responde mi Nicolás —aunque me lleve un año, yo le quito la virginidad a Dalma porque se la quito.«¿Que? Mi virginidad»Eso iso que el rostro de Dalma cambiará de expresión, de feliz a decepción.«¿cómo que está conmigo por una apuesta? Qué asqueroso»—Aún no puedo creer que no hayas conseguido nada y tú que te dabas de buen conquistador y que en menos de una semana estaría a tus pies.—Y lo está, que no te quede la menor duda —afirma —solo que es tímida, siempre que quiero ir a tercera base algo sucede, pero eso no pasa de este mes.«Esa soy yo, una universitaria de veintiuno, que aún es virgen»No había terminado de escuchar cuando salió llorando, con una inmensas ganas de vomitar por lo asqueroso que le resultó aquella conversación, no puede creer que aquel chico lindo y amable que la ayudo en un principio, no la quisiera y solo estuviera con ella por esa estúpida apuesta.Llego en tiempo récord a su departamento y tan pronto puso un pie dentro, la abordo la encargada del edificio y le reclamo porque no ha pagado los últimos tres meses y que si antes de que acabe este mes, no le paga todo lo adeudado, no solo tendrá que dejar el lugar sino que también la denunciara a la policía.—Pero señora Claudia, yo había dejado mi parte a mi compañera para que le pasara a usted, he pagado mes con mes, aquí debe de haber un error, espere a que llegue ella y aclaremos este malentendido.—No te creas más lista que yo niña, ella hace cuatro días que no viene por aquí y la última vez, la vi irse con una maleta y tú no harás lo mismo, antes que acabe el mes me pagas por que me pagas.—Esto no es justo —refuta.—La vida no es justa niña, la próxima elige bien con quien compartes los gastos.Y se fue.«¿Y ahora qué haré? Solo me queda una semana para que acabe el mes» otra deuda más.—¿Por qué me tiene que pasar todo junto? La enfermedad de mi madre, la deuda del hospital, lo que sale el nuevo tratamiento y ahora está deuda que ni siquiera es mia, juro que si atrapo a Samantha la mato, parecía buena chica, me deje embaucar por su buena labia y su cara bonita, y ahora aquí me encuentro con una frondosa deuda.Llamo a su amiga Mora y al contarle todo sobre su compañera, la recriminó el no haberle hecho caso cuando le dijo que era una estafadora.—Ya está bien, ya te he dado la razón que más quieres, que te haga un altar y te adore el resto de mi vida.—¡No exageres! —grita del otro lado de la línea —aunque, pensándolo no es mala idea, pero bueno dejemos eso para después, que harás tienes plata para pagar la deuda, porque si te llevan presa yo abandono cualquier tipo de relación contigo. —Ahora la exagerada eres tú —me tomo un minuto para responderle —haré lo que no pensaba hacer, tomaré de mis ahorros, servirá para pagar las deudas y poder alquilar algo tranquilo.—¿Ese dinero que te manda tu padre en fechas especiales? —Ese mismo, ahora no me puedo dar el lujo de ser orgullosa y ese dinero me servirá para salir de este problema. —Y yo te saco de otro.—¿A qué te refieres?—Recuerdas que una vez te propuse venir a vivir conmigo y me rechazaste, bueno ahora no te dejo la opción de negarte.Después de un rato discutir, Dalma accedió ir a vivir con su amiga, bueno el tiempo que se quede en la ciudad, porque su idea principal es ir y cuidar a su madre y mientras se quede ahí pagara los gastos que le toca, las dos son obstinadas pero esta vez era Mora quien debería ceder y lo sabía.Ya al otro día, comenzó con su mudanza, aunque no era muchas cosas, pagó a la casera quien le deseo buena suerte y luego fue rumbo con su amiga.—¿Tenía que pasar esto para que decidieras venir a vivir conmigo? Ahora ve a aquella habitación, es para ti.Después de terminar de desempacar y sentadas en el piso de ahora su habitación termino contándole todo lo que sucedió los últimos días.—Maldito gusano —maldijo en voz alta después de enterase de lo de Nicolás —¿y que hiciste?Ambas amigas comían papas con refrescos mientras insultaban al mundo entero por ser tan injusto con algunas personas. —Es que de verdad no comprendo, por qué Nicolás tuvo que actuar así, no voy a negar que cuando comenzó a coquetearme me pareció insólito y más sabiendo su fama de mujeriego, pero aun así caí en su encanto y en su labia, pero que lo haya hecho por mi virginidad, me parece asqueroso.—No era insólito, tú eres una chica muy bonita, amable, adorable y bella por donde te vean, cualquier chico estaría más que feliz por tenerte a su lado, no te descalifiques.—No lo hago, Pero no entro en la categoría de su tipo ideal, chicas que entraban de noche y salían al otro día con los tacones en mano.—Tú eres el tipo de cualquiera amiga, eres de las pocas personas con las que me llevo bien, sabes ¿por qué? —niega —no eres falsa y puede que hasta de verdad ese imbécil sienta algo por ti, digo quién dice y toda esa actitud de ganador solo sea una máscara, una fachada para aparentar lo
Luego de todo eso pasaron unos días lleno de suspenso y de no saber qué hacer, si era buena idea esperar o ir por el plan original, le llego un mensaje a su correo donde le enviaban una dirección más una fecha y hora donde asistir. Al llegar, se encontró con un recinto cerrado, de solo imaginarse el tipo de lugar, las piernas le temblaban y solo quería salir huyendo de ahí, pero no podía la imagen de su madre, estaba presente en cada pensamiento y sabía que cada día se ponía peor, así que se armó de valor e ingreso con la cabeza en alto, ahí la recibió una chica amable y risueña que la llevó hacia una oficina donde olía un fuerte olor a perfume. En el trayecto no pudo observar mucho porque solo fue un pasillo a otro, allí adentro se encontraba una señora bastante guapa de unos cincuenta y a un costado en una fila como esperando orden unas cuatro chicas que parecían tener entre dieciocho y veinte años.—Pasa, escuchen bien aquí están por una razón y solo ustedes la saben, a mí no me i
En unos de los tantos y más exclusivos edificios que se encuentran alineados en la sexta avenida, Daemon quien es director y creador de una marca con fama internacional, se encuentra apreciando la ciudad entera desde la ventana del último piso, el sol ya comenzaba a ponerse y el tono anaranjado se colaba entre los rascacielos haciendo el momento aún más mágico, aunque en su mayor tiempo muestra un rostro con expresión indiferente, este es el único momento donde se permite relajarse dejando de lado su máscara de hombre sin sentimientos.Por un segundo perdió su concentración cuando oyó la puerta, ser abierta, giro para ver como su mano derecha y amigo entraba, con su tableta en mano seguramente ya con la información.—Averiguaste lo que te pedí —pregunto sin preámbulo —Sí, me confirmaron que hoy habrá una subasta y es muy probable que el señor Daniel asista, al ser una subasta de vírgenes las posibilidades son mayores. —Mmm ¿lo confirmaste?—Ya lo he hecho y efectivamente cancelo tod
Daemon Había llegado un poco tarde, pero no tanto como para que me nieguen la entrada al dichoso lugar, al ingresar me dieron un antifaz, cosa que agradecí porque me evitaría que me reconozcan, aunque ese no sería el problema, sino como haría yo para reconocer a Daniel entre la multitud, cuando llegue al salón me costó acostumbrarme a la luz brillante, a la música alta y a los gritos incesantes llena de morbosidad, pues había una chica bailando, entreteniendo al público y otra con un micrófono que decía que pronto comenzaría con la subasta, había llegado con Federico, pero creí más prudente que se quedara en el coche y me avisará cualquier inconveniente.Pase cerca de dos hombres cuando iba a una mesa libre y escuche hablar a uno y en mi mente grite eureka, lo había encontrado, Daniel y su peculiar risa hizo que lo reconociera.Entre sin mirar mucho, tampoco era mi intención llamar la atención, solo quiero ser como una sombra con un solo objetivo, solo vine con una misión y no la arr
Dalma, quería librarse de aquel sujeto que le hacía saltar la térmica cada segundo con solo respirar, apenas le fue posible salió corriendo de inmediato al camarín, busco su teléfono y llamó casi enseguida a su madrina quien era quien cuidaba a su madre y quien le envió aquel mensaje momentos antes, al segundo que contesto le abordo con incesantes preguntas, todo sobre la salud de su madre, por suerte ya está estable y no en estado crítico como le había dicho antes, había sido que se asustó y exagero un poco la situación, pero igual ya le dijo que a más tardar en dos días tendría el dinero, todo esto le pareció sospechoso a la madrina que le preguntó como consiguió tanto dinero en tan poco tiempo y solo pudo decirle que fue un préstamo y que lo irá pagando poco a poco.Llegó a la casa pasadas de la media noche asustada y aliviada al mismo tiempo, al abrir la puerta se encontró a Mora esperándola como si se tratara de su madre, hasta tenia la misma mirada que asusta.—¡Donde estabas! A
Fede a primeras horas de la mañana a punto de ingresar al trabajo recibió la ansiada llamada que su amigo le había comentado la noche anterior, por alguna razón se encontraba emocionado y pronto quiere conocer a la chica que hace que su amigo hable solo de ella, en todo su año de amistad nadie lo ha hecho relinchar como un caballo arisco, ni siquiera Isabela aquella primera desilusión que tuvo y que por la misma se niega a tener una relación estable.Cuando escucho una voz educada y dulce pensó que quizás no era la misma chica, que quizás se hubiera equivocado, según la palabra Daemon, tenía en mente a alguien completamente diferente así como con una voz firme y un poco altanera, pero era todo lo contrario, ahora siente más curiosidad, debería de verla personalmente, tal vez su apariencia si concuerde con lo relatado de su amigo.Dalma había despertado con el primer sonido del despertador y con la luz del sol entrando por las delgadas cortinas de su ventana, se encontraba ansiosa y po
Daemon llegó al edificio más ofuscado que de costumbre y nadie se atrevía ni siquiera a saludarlo, con decir que ni el elevador quisieron compartir con él, temían recibir un insulto con solo respirar el mismo aire. Desde muy temprano había recibido un mensaje con un número de cuenta, al parecer él no esperaba que jovencita no estuviera ansiosa por meter mano al dinero y desde luego se puso a pensar que lo del trabajo era un pretexto, solo era una fachada, lo utilizo para no quedar tan abiertamente expuesta, la escusa de ser honrada talvez ya le haya funcionado antes, ya la imaginaba saltando en una pata cuando le había dicho que no se acostaría con ella, quizás luego vuelva a intentar vender su virginidad si es que aún la tiene o si no ya buscará otra alternativa de conseguir dinero fácil—Por un momento me dejé engañar —pensó en voz alta, cuando llego a su piso.Eunice, que estaba buscando un lápiz que de le había caído, recibió un regaño mañanero.Al entrar a su oficina, enseguida ll
Dalma luego de haber confirmado que seguía teniendo el empleo, pidió permiso para comenzar el lunes y teniendo el visto bueno de Federico se dirigió al departamento. Cuando llego tomo su bolso ya preparado con anterioridad, le dejo una nota a su amiga pegada al refrigerador explicando que no disponía del tiempo para esperarla, ya había enviado la solicitud de que empezará con el tratamiento de su madre, pero sí o si necesitaban su firma, como ella se haría cargo de todos los gastos necesitaban tener constancia.Llego al hospital ya cuando el sol se puso, saludo a su madrina y la dejo que vaya a descansar, fue al cuarto de su madre y la encontró dormida, la admiro unos minutos y luego fue a dejar en orden todo lo referido al tratamiento. Luego volvió con su madre que la encontró despierta, después de calurosa bienvenida, le interrogó el origen del dinero, casi se enfadó pensando que le había pedido a su padre y la había desobedecido, luego de jurarle que no lo busco y que aquel diner