Vincet se sintió realmente estúpido o ese fue el sentimiento que tuvo al ser visto tanto por su secretario como por el custodio al simplemente haber olvidado que la chica vivía ahora con él. Tampoco era que fuera fácil acostumbrarse, incluso el mismo Lukas estaba sorprendido que su amigo dejara a una mujer vivir con él cuando apenas las dejaba quedarse cuando tenían sexo y a la mañana siguiente ya las estaba botando de su propiedad.
El Ceo terminó los trámites, le pidió el celular a Alicia y después de verificar que ella pudiera acceder desde el lobby del hotel, que su huella estuviera registrada en la cerradura del apartamento y que tuviera su número para localizarlo y viceversa, se sintió un poco… menos imbécil.
Había dejado a la chica todas esas horas, literal, botada en la calle. No sabía por qué, pero tenía su pecho apretado, lo peor es que no había recibido algún reclamo como tal, que él usaría de excusa replicarle, pero no, ella estaba simplemente parada en la sala como si no supiera que hacer.
Acaso eso se debía a su retraso mental. Aunque tenía sus sospechas… ella no actuaba como si realmente tuviera eso. Era bastante receptiva, entendía bien, mantenía una conversación, incluso hablaba otro idioma. Se tocó la barbilla, pensativo y se giró hacia su secretario.
-Lukas, llévatela a comprar cosas para llenar la despensa- y le hizo señas con la cabeza- de paso dale indicciones. No quiero que interfiera en mi vida si sabes a lo que me refiero.
-Mira que eres cruel- Lukas se rio, pero se giró hacia Alicia que parecía esperar por lo que le dirían aquellos dos hombres.
La joven realmente estaba tensa. Tragaba en seco preguntándose qué pasaría ahora. El Ceo parecía molesto y el que estaba con él… la ponía nerviosa. No había pasado por alto como la había mirado de arriba abajo cuando se encontraron afuera.
-Bueno paloma, nos vamos- le dijo Lukas parándose delante de ella y sonriendo dejando a la vista una hilera perfecta de dientes.
Alicia alzó una ceja y se inclinó para mirar por el costado de este en dirección a Vincet que se servía un vaso de wisky.
-Ya me oiste- este sintió el peso de la mirada de ella sobre él- Ve con él y compra toda la comida que haga falta para llenar la despensa. Si estarás aquí lo menos que puedes hacer es cocinar, y no tengo mucho para ello. Lukas tiene una de mis tarjetas negras así que no hay necesidad de limitarse con eso.
Alicia se quedó tiesa unos segundos y enfocó de nuevo a Lukas… ese tipo realmente no le gustaba, pero solo pudo asentir y seguirlo cuando este salió por la puerta.
Vincet se dejó caer sobre el sofá abriéndose la camisa y dándole un sorbo a su bebida. Vaya día estaba teniendo, le dejaría el resto a Lukas para que analizara a la mujer. Nadie mejor que él para saber si había que tener cuidado con ella, no podía guiarse porque fuera mucho más joven que él, si ella era como su madre, de seguro estaba tramando algo.
***
-No tienes que estar tan tensa paloma, no te voy a dar un mordisco- Lukas se burlaba al lado de la chica que apretaba el cinturón fuerte entre sus manos.
-No me llamo paloma- esta le respondió con la voz tensa. La atmósfera dentro del auto era realmente cargada. Ese hombre parecía que quería intimidarla. Era incluso peor que cuando conoció a Vincet y este estaba molesto.
-Verdad, te llamas Alicia, pero quiero llamarte paloma. Acaso no puedo- no era una opción. Él haría lo que le daba la gana.
Alicia ni siquiera insistió más y soltó un suspiro mirando a la ventana, mas tenía que decirlo.
-No me tienes que seguir intimidando. No voy a salir corriendo pues no puedo ir a más ningún lado.
Eso hizo que Lukas se quedara desconcertado para después soltar una enorme carcajada que hizo que el auto se tambaleara en la carretera y Alicia apretara aún más el cinturón contra ella. Ese tipo realmente era peligroso.
-Eres bastante divertida. A esa altura la mayoría de las personas han saltado por la ventana y confesado sus crímenes más ocultos.
-Quienes lo hayan confesado es porque tenían que ocultar- ella le respondió rápido y bajó la cabeza para que él no le viera la expresión.
La sonrisa en el rostro de Lukas se congeló y después relajó su expresión.
-Una chica bastante interesante- bufó internamente- Será divertido jugar contigo.
Y siguió manejando hasta que se detuvieron en un semáforo que marcaba en rojo un minuto y medio.
-De paso hay cosas que necesito que sepas sobre Vincet- su voz ya no tenía un tono divertido, sino uno serio que hizo que Alicia lo mirara- Hay tres reglas fundamentales que nunca debes romper. Primero, nunca entres a su cuarto a menos que él te lo permita, segundo, nunca repliques sus decisiones, si él dice no, es no, y tercero, si está con visitas o teniendo sexo en la casa no lo interrumpas, si puedes ni aparecerte, mejor no lo hagas, se vuelve una fiera cuando le cortan el orgasmo y al otro día está todo irritable, y todos sufrimos en la empresa.
Los ojos de Lukas se entrecerraron en torno a ella.
-¿Entendiste?
-hablamos el mismo idioma, claro que lo entendí- respondió ella con calma tomando nota mental para no cometer errores.
Lukas sonrió de forma extraña y encendió el auto al ponerse verse el semáforo. Una vez aparcaron al costado del centro comercial ambos se bajaron y ella lo siguió al interior, aunque ese centro era de mucho más nivel que en los que ella estaba acostumbrada a comprar.
-¿Qué? Tienes rostro de que entraste a un zoológico o un museo de reliquias. Acaso crees que la despensa de Vincet son alimento de bajo nivel- Lukas caminó delante de ella de forma prepotente- Él tiene gustos más refinados de lo que parece, porqué crees que usa tarjeta negra.
Alicia apretó los labios. Realmente no entendía a los ricos. Y a pesar de que tenían un monto ilimitado para gastar le costó mucho trabajo no ir a las ofertas de productos.
***
Vincet abrió los ojos al escuchar la puerta del apartamento abrirse. Se había quedado dormido sobre el sofá después de bajar el segundo vaso de wisky. Miró la hora y habían trascurrido cerca de tres horas.
-Vincet ya regresamos- la voz de Luka se escuchó chillona en el interior del apartamento. Venía cargando varias bolsas y detrás de él doblada Alicia con tres bolsas más que parecían pesaban más que ella.
Él alzó una ceja y se levantó.
-Por la forma en que vienes parece que disfrutaste bastante el viaje- por alguna razón le incomodaba la forma en que su amigo se estaba comportando. Lukas… no era tan sociable, a menos que quisiera lograr algo.
-Más de lo que te puedes imaginar. Esta chica es bastante interesante- hablaba abiertamente como si la que era el centro de la conversación no estuviese detrás.
-¿En serio?- Vincet preguntó con ironía y agarró fácilmente las bolsas que traía Alicia con una mano y fue en dirección a la cocina hablando con Lukas que parecía muy interesado en contarle la travesía.
Alicia se secó el sudor de la frente. Se encontraba agotada. Lukas le había hecho durante todo el viaje de vueltas diversas preguntas, de varios temas, algunas estúpidas, otras en las que debía pensar, otras sobre ella misma, lo que sí al menos no había tocado el tema de su familia, quizás porque cuando lo intentó ella casi palideció en el asiento.
-Oye ¿qué haces parada ahí? Estas cosas no van a tomar su lugar solas- Vincet hacía vuelto con las manos en los bolsillos- Y Lukas se quedará a comer.
Le dijo antes de dar la vuelta y perderse de nuevo al interior de la cocina. Alicia respiró profundo y aunque le dolían los brazos y solo deseaba dormir un poco lo siguió. Mientras antes terminara mejor, porque aún tenía trabajo de traducción pendiente y a diferencia del Ceo, ella no tenía tarjeta de crédito con monto ilimitado.
-¿Y bien? ¿Qué opinión tienes?- Vincet dejó que la brisa de la noche echara su cabello hacia atrás. Ambos se habían desplazado al balcón mientras Alicia cocinaba la cena. El ceo recostaba su cuerpo contra el barandal de espaldas mientras Lukas se había parado a su lado, al contrario. -Cuando mencioné que esa chica era interesante no fue en vano- este sonrió- Le hice muchas preguntas para intentar analizarla, mis estudios en psicología la menos me sirven para esto. -¿Y a qué conclusión llegaste? ¿Es una amenaza? ¿Tengo que sacarla de la casa? El rostro de Lukas era todo un dilema. -La verdad es que… lo primero que me dijiste de ella es que tenía retraso mental, pero me gustaría saber un poco más de ello, porque no encontré ningún síntoma de ello- vio como el ceño de Vincet se frunció. -¿A qué te refieres? Lukas apretó la boca y bajó el tono de voz. -Creo que ella es muy introvertida, pero por la forma en que reaccionaba a ciertas preguntas, es como si… algo dentro de su cabeza l
Aquella imagen… fue impactante para Vincet. Aun cuando las cicatrices se perdían bastante claras en la piel de la joven no quitaba el hecho de que estaban allí, que habían sido hechas una y otra vez cerrándose de forma dispares, como si no hubieran sido curadas correctamente. Sintió que perdió el aliento.¿Qué tipo de persona le haría eso a alguien una y otra vez?Un gemido por parte de Alicia lo hizo reaccionar, y aunque las marcas en su espalda si despertaba tanto su asombro como su curiosidad ahora había otras cosas que necesitaban su atención. Se acercó a ella agarrando una de las batas de baño felpudas de la repisa y la puso sobre ella para cubrir su desnudes. No sin darle un vistazo sin querer al cuerpo entero de ella.Al parecer Alicia no se había dado cuenta que él había entrado por el aturdimiento de la caída que se sobresaltó y quiso escapar de él, pero el dolor en su rodilla le impidió moverse mucho.-Quédate quieta- Vincet no estaba para tratar temas como la vergüenza de e
Vincet no podía creer que realmente estuviera haciendo eso, sobre todo por la razón que lo había llevado a terminar así… con los pantalones a mitad de los muslos, su boca semi abierta mientras los gemidos salían de esta y su mano alrededor de su miembro se movía de arriba abajo que se encontraba resbaladizo de su propia liquido preseminal.¿Él, teniendo que masturbarse para tener que aplacar su deseo sexual?Realmente no sabía si estaba molesto o excitado en exceso pues los pensamientos no se acomodaban en su cabeza. Había intentado obviar la erección, pero había sido inútil. No había disminuido y solo le dolía más y más cada vez que pensaba en la chica y en sus pequeños pechos.-Ah- otro gemido salió de su boca y apretó su glande impidiendo correrse del todo y se lamentó después. Debía llegar al orgasmo rápido para quitarse ese picor del cuerpo, pero a la vez quería extender aquello un poco más, pues al dejarse llevar por su imaginación algo lo recorría y le daba un estremecimiento q
Alicia se mantenía quieta dentro del lujoso auto. Por fuera se veía elegante, pero por dentro se notaba que se le había invertido unos buenos dólares para adaptarlo. Los asientos forrados en suave piel eran realmente cómodos, el asiento de adelante incluso tenía una pantalla. los cristales no dejaban ver nada de afuera para adentro al contrato que viceversa. la temperatura y el olor también era agradable.Su madre tenía algo de dinero, del cual ella nunca había visto mucho, pero nunca había tenido un auto de ese estilo... y dudaba que si lo tuviera la dejara montarse.-¿Estás incómoda?- la voz de Vincet llegó a ella y se dio cuenta que estaba frunciendo el ceño.Alicia reaccionó y sonrió ligeramente.-No, es un auto realmente cómodo. solo... recordé algo.Vincet no dijo nada y volvió a su atención a su Tablet donde parecía que trabajaba.-Oye paloma, tú universidad es la que queda doblado dentro de cinco cuadras ¿verdad?-Si, la de idiomas- respondió ella relajando el semblante.-Debe
Alicia estaba terminando su clase y recogiendo sus cosas cuando su celular comenzó a sonar en el bolsillo. Lo sacó y el número que estaba no lo reconoció. No era de responder números desconocidos ni tampoco tenía por qué dado que no daba su número así que no respondió cautelosa de quien pudiera ser. Sobre todo… porque no quería que se volviera a repetir cierta historia de su pasado, sin embargo, el número siguió insistiendo y simplemente lo bloqueó.Acto seguido volvieron a llamar solo que esta vez no era un número lo que aparecía en la pantalla sino el nombre de Ceo Vincet. Se quedó mirándolo preguntándose de por qué la llamaba y respondió.-¿Estás en la universidad?- fue la pregunta directa de él.-Si.-¿Ya terminaste?-Si, iba camino de vuelta a su casa- ella pestañeó aún con la duda del pequeño interrogatorio.-Perfecto, ve al mismo punto donde te…-¿Por qué me bloqueasteeee?- de buena a primeras la voz del otro lado del celular cambió y esta vez era Lukas- Desbloqueameeeeee--Quí
Lukas se quedó con la boca abierta al ver la joven hermosa que caminaba al lado de Vincet en su dirección. No podía creer que aquella chica sencilla que parecía intentar pasar desapercibida ahora destacara incluso al lado de su jefe. Una sonrisa adornó su rostro, al estos detenerse delante de él.-¿En serio es la paloma?-Acaso entré con alguien más- le dijo Vincet con el ceño ligeramente fruncido al no gustarle la forma en que su amigo miraba a la chica.Alicia había terminado con el vestido dorado puesto, unos zapatos de tacón no tan altos para no forzar sus rodillas, su cabello peinado elegante y semi suelto detrás en ondas dejando algunos mechones que enmarcaban un rostro maquillado delicadamente.-Oye paloma, me tienes que dejar invitarte a comer más adelante. No puedes dejar que este tipo te monopolice.Alicia hizo una expresión incómoda e inconscientemente Vincet se interpuso entre ellos dos.-Acaso no vamos tarde al encuentro- alzó una ceja con cierto tono recordándole a Lukas
Vincet entró a su casa cargando a Alicia aun en sus brazos y con la vena de su sien palpitando y no precisamente por tener que encargarse de la mujer, sino por la sonrisa burlona de Lukas que lo seguía detrás y que él se imaginaba todo lo que estaba pensando.Lo ignoró por el momento pensando en cómo podría desquitarse de él con trabajo al día siguiente, ah no, no podía, era fin de semana. Chasqueó la lengua y se encaminó hacia la escalera. Lukas lo siguió y se detuvo asombrado.-¿la vas a llevar a tu habitación? No sabía que tenías el fetiche de follar con personas borrachas e inconscientes.Vincet lo miró por encima del hombro.-No voy a follar a nadie, ella se emborrachó con un solo trago. Capaz que despierte y comience a vomitar o que se maree y se vuelva a caer. No quiero tener que salir corriendo a mitad de la madrugada para el hospital, así que de esa forma la mantendré vigilada- su tono era osco.Lukas alzó las manos en son de paz y no dijo más nada. Todo aquello solo sonaban
El dolor de cabeza era terrible. Por eso odiaba el alcohol. Alicia había tenido cuidado toda su vida de mantenerse alejada de él sabiendo las consecuencias para su cuerpo, pero esta vez no había podido escapar. Incluso tenía nauseas.Lentamente abrió los ojos con los párpados pesados. Frunció el ceño mientras su vista se demoraba en adaptarse a la tenue luz de la habitación que provenía principalmente de los rayos del sol mañanero que se filtraba por las cortinas.Entonces reaccionó. Ese no era el techo de su habitación. No estaba tan familiarizada debido al poco tiempo que había estado en él, pero definitivamente no era el mismo. Ni tampoco el juego de cama eran de color negro.Se sentó de golpe un poco asustada. No tenía memoria después de ser cargada por Vincet en el restaurante. Después… solo era una laguna hasta ese momento. Se alarmó al darse cuenta que no llevaba el vestido sino una camisa de seda que cubría su cuerpo. Al menos sintió alivio al revisar que aún tenía la ropa int