CapÍtulo LXXII- Morir o vivir (Hope habla con un nuevo lobo)

Todos ellos cubrieron a Yin, a William y a Mary respectivamente apartándolos totalmente de mi vista ante mis ojos habían desaparecido por completo bajo las columnas de hombres que se habían colocado sobre ellos, mientras que las bestias permanecían atentas a un lado disfrutando amenamente de aquella imagen, los hombres reían a más no poder al imaginar que ya finalmente nos habían capturado pues matar, dañar y destruir es el único placer que mueve sus sentidos.Jacob durante todo aquel momento no se inmuto simplemente observaba desde lejos como cual fiel espectador de algún show de magia o cual juego de béisbol, Claus se encontraba aun lado de él acariciando su mentón atentó a lo que sucedía.Yo por otro lado intentaba soltarme de aquel agarre que me impedía ir hasta donde se encontraban mis compañeros y exclamé.— Déjanos en paz, no te debemos nada más tu nos debes todo.Sus expresiones sarcásticas no tardaron en aparecer y dijo.—Lo siento pequeña eso

Capítulo LXXIII - Oculto en la oscuridad se esconde un secreto

Todo volvió a comportarse de la misma manera, aquel hombre que yacía a mi espalda aun sujetaba mis brazos mientras que Claus continuaba su recorrido hasta donde yo me encontraba en compañía de aquella espeluznante canción. Haber visto aquel lobo me había dejado petrificada no por miedo sino más bien pensando respecto a quien era, Claus por otro lado se seguía acercando, era evidente que le encantaba la tensión que se estaba desatando en ese momento, pero mi atención había cambiado completamente de dirección, noencontradoseél en primer lugar y dijo. —Así me gusta tranquila y cooperando.

Capítulo LXXIV - ´´ Oona ´´

Aquel lobo insistia en que proclamase su nombre, pero para ser sincera en ese momento le desconocía por completo no sabía quien era y mucho menos porque me quiere. Permanezco completamente en silencio y al ver aquello, aquel lobo se acerca más a mí y volviendo a proclamarse una vez más, aquella frase se escuchó. —Di mi nombre, Hope. —No sé qué es lo que quieres, mucho menos lo que esperas de mí, pero soy sincera cuando te digo que no sé cuál es tu nombre. —Si lo sabes y estoy totalmente segura de que ahora mismo tienes grandes reflejos de él, lo conoces y de eso estoy segura. —Claro, lo dices como si estuvieras en mi mente. —No tengo que estarlo tu propio ser está reaccionando a la magia de este bosque tu cuerpo incluso intenta liberarse de todo aquello que no le pertenece y hablo del aconito; por cierto, no te trae nostalgia este lugar, digo soy una tonta ya que no tuviste la oportunidad de poder vivir inmersa aquí en la naturaleza mi

Capítulo LXXV - El despertar de Oona

Capítulo LXXVI - Sentimientos que surgen

Capítulo LXXVII - Buscando a Ronan

Me encuentro embobada ante aquello y mirando hacia el camino que anteriormente iba a tomar veo como las luciérnagas en él también se hacen notar sin perder tiempo inicio mi marcha, camino y admiro a la vez aquel techo pues a cada paso que doy las luciérnagas parecen avanzar podría incluso decir que parecería que me guiaran.Llevaba un tiempo ya andando a paso lento pero firme y sin descansar, aquel lugar era enorme parecía no acabar paso a paso hacia el camino y no parecía tener fin, pasado algunos minutos una leve luz empezó a hacerse distinguir junto con algunas leves voces en la distancia, seguí caminando acercándome cada vez más al lugar de donde provenía aquello

Capítulo LXXVIII - Ronan y Hope

Yo quien en ese momento experimentaba un poco de agobio replique. —Si, pero me hostiga, resuena muy fuerte en mi cabeza, pero por más que hemos caminado no eh logrado verle. —¡Resuena! Cierto lo había olvidado aun no puedes controlar tus habilidades. —Habilidades.

Capítulo LXXIX - La confesión de Ronan

Él solo me admiraba, sus ojos no se apartaban, solo sonreía bobamente, sin yo esperarlo llevo su mano hasta mi cuello y sujetándome firmemente me acerco hasta él unió su frente con la mía y cerro sus ojos, yo de nuevo me encontraba pasmada esta vez no por miedo sino por nerviosismo no entendía que era lo que cruzaba por su cabeza y mucho menos lo que pretendía hacer, aun con sus ojos cerrados exclamó. —Porque tiemblas. Abrió sus ojos y miró directamente a los míos a la vez que separaba un poco su rostroen busca de una respuesta a la que s