Narrador omniscienteCreo que en el momento en el que regresaron a su casa es cuando Karen se dio cuenta de cuánto Carlos había arruinado su vida. Durante tantos años normalizó tantas actitudes y creo que hasta podría decirse que lo ignoro completamente pero pensar que Cristian había sido su amigo desde que era muy pequeña y se separaron por algo tan simple la hacía sentir un poco mal y realmente desearía en algún momento poder arreglar las cosas.Después de ese momento no hubo algún otro incómodo, creo que las familias eran demasiado simples y no tan rencorosas como para tratarse mal frente a las chicas a pesar de todo.Y por qué mentir, a Cristian también le afectaba todo lo que había pasado el había querido como una hermana pero en ese momento sabía que era una estupidez intentar que razonar. Es una lástima que se haya dado cuenta tantos años después pero todavía habido oportunidades siempre hay oportunidades.Pov SeleneDespués de haber pasado los mejores días de mi vida ahora me
—Ella no, pero si la directora. Esa mujer si que es hermosa.—¿Sabias que ella es lesbiana?—¿Es real? —pregunto divertida y ella asiente—¡No puedo creerlo!—No te ilusiones, está casada —se burla—¡Maldición! —fingí decepción y ella me empujó suavemente con su hombro mientras me reía—Te ves hermosa- —imité la voz de Lucrecia—No lo dijo así —rió divertida— ¿Te has puesto celosa?—No tengo porqué ¿O si? —le doy una pequeña mirada antes de mirar esquivar el árbol del frente—¿Eres mi novia ahora, no? —sonrío cuando escucho eso.—¿Si? Creí que eras mi novia solo en Santa Verónica — ella comenzó a reír.—Cállate, idiota —murmura antes de comenzar a correr a toda velocidad.Correr mientras no paras de reír no es una buena idea, pero de todas formas la alcancé, dejando un beso en su mejilla antes de seguir con el ejercicio.Después de dar las tres vueltas tuvimos que dividirnos en grupos por las que jugábamos para el equipo y las que solo hacían gimnasia normal. Me dediqué a mirar a mi he
—¿Quieres ir a mi casa? —me mira—. Karla está horneado algunas galletas y estoy seguro de que a Milena le encantará que nos acompañes—Tengo que llamar a mi mamá —le digo moviendo mi pierna nerviosa.—Si, no te preocupes. En cuanto llegamos te presto mi celular y la llamas.—Gracias, por todo —le digo avergonzada—No te preocupes —sonríe— ¿Te duele?—Si, un poco —murmuro—Te daré hielo. Si querés te acompaño a hacer la denuncia, no debes permitir que pueda acercarse a ustedes—Si, eso estaría bien.Fue bastante vergonzoso tener que explicarle al comisario lo que había pasado, pero tenía que hacerlo, sino él no se cansaría hasta hacernos un daño mayor. No me quitó tanto tiempo como creía, en cuanto menos me lo esperé, ya estacionamos fuera de la casa de Milena.—¿Qué te pasó? —ella corrió hacia mí en cuanto me vio abrir la puerta principal.—No es nada —murmuro—Selene ¿Quién te hizo? —acarició mi mejilla sana dulcemente y noté como sus ojos se cristalizaron—Mi padre —susurré—. Pero n
Sus labios dejaron los míos y entonces comenzó a repartir besos a lo largo de mi mandíbula mientras mantenía los ojos cerrados.La temperatura de mi cuerpo estaba subiendo cada vez más, todas estas sensaciones eran tan nuevas para mí, jamás había llegado a este límite.No había tenido más que algunos besos, pero sin dudas nada se compara a con estos.En el momento en el que sus labios chuparon la piel expuesta de mi cuello, mi cuerpo reaccionó por si mismo y mis caderas se levantaron para chocar contra su muslo.Un escalofrío recorrió toda mi espina dorsal y comencé a sentir como mi intimidad palpitaba. Sus besos me estaban matando y ¡Dios! Se sentía tan bien. Su mano fue hacia el costado de mi cintura, acariciando y sosteniendo para que siguiera con mis movimientos, la fricción me estaba matando. Alcancé su mano y la bajé para que pudiera tocarme el trasero sientiendo como ella sonreía contra mi piel y comenzaba a acariciarme por arriba de short. Jadeé en sus labios cuando me dio un
Previamente...Narrador omnisciente.El cuerpo de Abi chocó contra la vieja puerta de madera mientras que Alison la arrinconaba contra su cuerpo con besos desesperados. Sus lenguas se entrelazaban entre sí, sus manos recorrían el cuerpo de la otra mientras que los botones del pantalón de la morena eran desabrochados.—¿Crees que sea una buena idea? —pregunta Abi con una pequeña risa mientras permite que Alison le baje el cierre.—Este aula está abandonada desde hace tiempo, nadie viene por acá —murmura contra sus labios.Su relación no había ido más allá de salir un par de veces, sino que era la primera vez que tenían un acercamiento más íntimo por así decirlo. Alison la invitó a su casa durante las vacaciones, pero nada más que eso, solo besos. Sinceramente Abi a veces se sentía un poco culpable por estar jugando a un juego muy peligroso con Lucrecia. Porque aunque no se habían vuelto a ver desde ese día del beso en el pasillo, tampoco le había dado un alto para que dejara de seguirl
—Bueno, tampoco soy un fantasma para que me mires así —una pequeña sonrisa salió de sus labios.—Creo que es hora de irme —murmura Damián—. Compraré unas pizzas para más tarde ¿Te quedas? —pregunta mirando a Milena.—Si, acabo de decirle a mis padres —sonríe—Perfecto. Ahora me voy a ver a Chris un rato—¿Vas ahora porque mi tío comienza su turno? —ella levanta una ceja divertida.—Exacto, eres inteligente —responde con una carcajada—. Primita, nos vemos luego —me mira guiñando un ojo y sale por la puerta.Sentía un frío en toda la espalda, de repente había sudado todo lo que no sudé ayer en el entrenamiento, tenía la piel de gallina y mi pierna derecha no dejaba de rebotar contra el suelo. Sabía que este momento llegaría, de todas maneras debía hacerlo, pero no estaba segura de que si estaría preparada alguna vez.Bajo la mirada y entrelazo mis manos, apretando el agarre para poder tranquilizar mi corazón, este sería un momento determinante para todo.—¿Sel? ¿Qué es lo que pasa? —mis
—¿Como que?—Como la seguridad en ti misma, bebé. Eres hermosa, tienes unos ojos bellísimos, tu cabello es increíblemente lacio, tu boca hermosa me encanta, tu cuerpo es perfecto. Debes confiar más en lo que eres, porque Sel, pocas personas son como tú eres. Así de buenas, de comprensivas y nadie puede quitarte eso, por más de que se burlen de tu o no te entiendan.En un rápido movimiento se sentó sobre mis muslos y atrajo mi cuerpo contra el suyo, apoyando mi cabeza en su pecho para poder abrazarme. Sentí tanto alivio interno cuando ella hizo eso, cuando pienso en sus palabras y en sus ojos atentos a lo que le estaba contando.¿Como es que esta mujer es real?Levanté mi cabeza para mirarla luego de unos largos segundos, ella sonrió de lado y atrajo mi rostro contra el suyo, tomando mis labios en un beso dulce y lento. Esto era todo lo que necesitaba, Milena había demostrado que realmente me quería a pesar de todo. Durante días y días me torturé con la idea de que ella no lo entienda
Milena comenzó a reír y besó sus labios, pensando en lo tierna que se veía con las mejillas sonrojadas. Ambas se separaron algunos minutos después, cuando se hizo la hora de irse del colegio, el otro turno tendría que comenzar.—¿Vienes a casa en la noche? —pregunta Selene mientras caminan por el pasto.—No lo sé. Quizás mañana, mamá no me deja quedarme a dormir tanto en otras casas.—Si no nos podemos ver un rato antes de la escuela —Milena sonríe y levanta las cejas.—Podemos vernos más tarde.—Tengo que ir al taller —tuerce la boca—Pero te mando un mensaje.—¿Ya tienes el celular nuevo?—No, pero Damián dijo que iría por él a la ciudad así que supongo que lo traerá en unas horas.—Uhhh eso es bueno —sonrió—. Bueno, tengo que ir a casa y vos a darte una ducha —dice mirándola con una sonrisa.—Te quiero y nos vemos después —dice antes de besarla.—¡Me bañas de sudor! —dice con una carcajada mientras que Selena la abrazaba—. Cuídate y también te quiero ¡Ponte el casco! —grita antes de