Previamente...Narrador omnisciente.El cuerpo de Abi chocó contra la vieja puerta de madera mientras que Alison la arrinconaba contra su cuerpo con besos desesperados. Sus lenguas se entrelazaban entre sí, sus manos recorrían el cuerpo de la otra mientras que los botones del pantalón de la morena eran desabrochados.—¿Crees que sea una buena idea? —pregunta Abi con una pequeña risa mientras permite que Alison le baje el cierre.—Este aula está abandonada desde hace tiempo, nadie viene por acá —murmura contra sus labios.Su relación no había ido más allá de salir un par de veces, sino que era la primera vez que tenían un acercamiento más íntimo por así decirlo. Alison la invitó a su casa durante las vacaciones, pero nada más que eso, solo besos. Sinceramente Abi a veces se sentía un poco culpable por estar jugando a un juego muy peligroso con Lucrecia. Porque aunque no se habían vuelto a ver desde ese día del beso en el pasillo, tampoco le había dado un alto para que dejara de seguirl
—Bueno, tampoco soy un fantasma para que me mires así —una pequeña sonrisa salió de sus labios.—Creo que es hora de irme —murmura Damián—. Compraré unas pizzas para más tarde ¿Te quedas? —pregunta mirando a Milena.—Si, acabo de decirle a mis padres —sonríe—Perfecto. Ahora me voy a ver a Chris un rato—¿Vas ahora porque mi tío comienza su turno? —ella levanta una ceja divertida.—Exacto, eres inteligente —responde con una carcajada—. Primita, nos vemos luego —me mira guiñando un ojo y sale por la puerta.Sentía un frío en toda la espalda, de repente había sudado todo lo que no sudé ayer en el entrenamiento, tenía la piel de gallina y mi pierna derecha no dejaba de rebotar contra el suelo. Sabía que este momento llegaría, de todas maneras debía hacerlo, pero no estaba segura de que si estaría preparada alguna vez.Bajo la mirada y entrelazo mis manos, apretando el agarre para poder tranquilizar mi corazón, este sería un momento determinante para todo.—¿Sel? ¿Qué es lo que pasa? —mis
—¿Como que?—Como la seguridad en ti misma, bebé. Eres hermosa, tienes unos ojos bellísimos, tu cabello es increíblemente lacio, tu boca hermosa me encanta, tu cuerpo es perfecto. Debes confiar más en lo que eres, porque Sel, pocas personas son como tú eres. Así de buenas, de comprensivas y nadie puede quitarte eso, por más de que se burlen de tu o no te entiendan.En un rápido movimiento se sentó sobre mis muslos y atrajo mi cuerpo contra el suyo, apoyando mi cabeza en su pecho para poder abrazarme. Sentí tanto alivio interno cuando ella hizo eso, cuando pienso en sus palabras y en sus ojos atentos a lo que le estaba contando.¿Como es que esta mujer es real?Levanté mi cabeza para mirarla luego de unos largos segundos, ella sonrió de lado y atrajo mi rostro contra el suyo, tomando mis labios en un beso dulce y lento. Esto era todo lo que necesitaba, Milena había demostrado que realmente me quería a pesar de todo. Durante días y días me torturé con la idea de que ella no lo entienda
Milena comenzó a reír y besó sus labios, pensando en lo tierna que se veía con las mejillas sonrojadas. Ambas se separaron algunos minutos después, cuando se hizo la hora de irse del colegio, el otro turno tendría que comenzar.—¿Vienes a casa en la noche? —pregunta Selene mientras caminan por el pasto.—No lo sé. Quizás mañana, mamá no me deja quedarme a dormir tanto en otras casas.—Si no nos podemos ver un rato antes de la escuela —Milena sonríe y levanta las cejas.—Podemos vernos más tarde.—Tengo que ir al taller —tuerce la boca—Pero te mando un mensaje.—¿Ya tienes el celular nuevo?—No, pero Damián dijo que iría por él a la ciudad así que supongo que lo traerá en unas horas.—Uhhh eso es bueno —sonrió—. Bueno, tengo que ir a casa y vos a darte una ducha —dice mirándola con una sonrisa.—Te quiero y nos vemos después —dice antes de besarla.—¡Me bañas de sudor! —dice con una carcajada mientras que Selena la abrazaba—. Cuídate y también te quiero ¡Ponte el casco! —grita antes de
—¿A donde vas? —le pregunta Selene cuando va llegando hacia él.—Tengo que algo importante ¿Te quedas? —pregunta mientras la mira brevemente.—Uhm, si. Claro —ella lo mira extrañaba mientras su tío se va sin decir más.Javier se subió a la camioneta deseando que su hermano no haga ninguna estupidez. Porque aunque Sebastian sea su amigo y lo suficientemente paciente como para esperar por él, sabía que si Carlos se pasaba de rosca con él iba a golpearlo. Pensó que después de todo había sido una buena idea decirle que Sebastian lo estaba buscando porque con lo cagón que era Carlos era obvio que correría hacia él para suplicarle que lo esperara un poco más con la deuda. Simplemente porque no sabía que su hermano se había encargado de saldarla, en parte para no quedar mal con su amigo y también para salvarle el culo una vez más.Miró la casa de Sebastian un poco sorprendido, había crecido lo suficiente en el último año. Ellos generalmente se veían en el pueblo o en el taller, pero no iba m
Cuando escuché el sonido del auto de mi mamá estacionarse, me levanté de la silla para ir a preparar el desayuno y de paso hablar un poco con ella antes de que se vaya a dormir.—Buenos días, bebé ¿Que haces despierta tan temprano? —preguntó dejando su mochila en el sofá—No dormí, me quedé haciendo un trabajo práctico.—Creí que irías a dormir a la casa de tu novia. No tenés que hacer eso Selene ahora estarás en la clase más muerta que viva.—De hecho, ella está aquí —dije prendiendo la cafetera —. Y no, puedo prestar atención perfectamente.—¿Ella aún duerme?—Si, todavía es temprano.—¿Puedo hablar contigo? —me preguntó al sentarse en la mesa—¿Pasó algo? —frunzo el ceño mientras la acompaño en la isla de la cocina.—No, no. Solo quería recordarte que ahora que Mariana sabe y todo eso, deberás... cuidarte.—¡Mamá!—Te hablé toda la vida sobre métodos antconceptivos y ahora que tienes una novia, sería bueno que lo recuerdes —ella saca algo de su mochila y abro los ojos al notar que
Pov Selene.Desperté en una camilla de la guardia del hospital, lo conocía muy bien por las veces que había visitado a mi madre. Me dolía la cabeza, mis ojos me pesaban como la mierda y ni hablar del dolor de espalda que tenía.¿Que mierda me había pasado?Recuerdo haber estado hablando con Abi, después intenté levantarme y... todo se puso negro.Me quejé por el dolor de cabeza mientras intento enfocar mi vista en alguna parte de ahí, hasta que veo a mi madre. Ella me estaba revisando mientras que Milena estaba a un lado, mirando le celular.—¿Como te sientes? —siento la voz suave de mi madre y luego como Milena se acerca rápidamente.—Bien, solo me duele la cabeza y un poco la espalda —suspiré. Cerré los ojos al sentir a Milena acariciando mi rostro.—¿Puedes explicarme porque te has tomado tantas pastillas? —preguntó ésta vez en un tono más duro—Lo siento mamá, solo necesitaba mantenerme despierta.—Encima tomaste mucho alcohol Selene ¿Que creías que iba a pasar? ¿Hace cuanto que n
Jadeo sobre su boca, ayudando a ir más rápido mientra siento más presión sobre mi entrada, cerrándose contra nada. Selene dejó escapar un gemido alto mientras que apretaba la sábana entre mis manos, mientras liberaba todo el placer acumulado en mi vientre. Ella me sostuvo, haciendo movimientos suaves mientras que sentía el extasis. Me derrumbé contra se cuerpo, sintiendo el calor en mi sexo, ella había mojado su boxer y también mi pantalón.Y mierda, se sentía tan bien.Ambas nos abrazamos, intentando que nuestra respiración se regule. Hundo mi nariz en su cuello, cerrando los ojos mientras pienso en lo que acabamos de hacer.—Me encantas —susurró contra mi oído mientras acariciaba mi cabello.—Dios mio, Selene —suspiro y beso su cabello—. Me encantó lo que hiciste.—Creo que te arruiné el short, lo siento —dice avergonzada.—No me importa, fue lo más caliente que tuve en mi vida —reí contra su piel—. Y por cierto, te sientes tan bien.Ella gimió por lo bajo y nos quedamos en la misma