Capítulo 24.

La pantera que acampaba en mi jardín se llamaba Colin.

Se presentó con cierto recelo porque tenía órdenes de no hablar conmigo o molestarme.

De hecho, sentí un pinchazo de calidez al saber que solo me había enviado a sus Betas más fuertes a vigilarme porque estaba preocupado.

- Nos ordenó que te diéramos tu espacio y que solo nos entrometiéramos si tratabas de usar tu auto. - Dijo mientras conducía a su manada. Seguía sin dejarme tocar el volante de MI auto, lo que era irónico. - Fuera de eso, a menos de que algo, alguien o tú misma amenazara tu seguridad, debíamos solo de ser espectadores.

-¿Es por eso que dejaste que se llevaran a tu Alfa o que se acercaran los pumas a mi casa sin siquiera una advertencia? - Pregunté matándolo con la mirada.

-No es así. - Dijo a la defensiva. - Me envió a que alertara a la manada, regresé y mi siguiente misión fue la de localizar a la señorita Ema. Después de eso fuí enviado a oler todo el pueblo para ver si había algún otro cambiaformas cerca. Est
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