Me divertí como cada segundo se ponía más nervioso y temblaba como un dulce conejito asustado. No solo sus ojos son muy atractivos, también tiene un rostro bello y unos labios muy apetecibles, rosados y muy carnosos. E incluso su cuerpo a pesar de ser un poco delgado. Es alto, tanto como Ambrose y mi padre, pero no necesita contar con músculos en extravagancia para llamar la atención si sus ojos por sí solos la roban por completo. Su cabello oscuro cae en su frente y acentúa sus ojos de una manera que no logro explicarme. Es muy joven, demasiado, pero me incita a permanecer cerca y aspirar todo su aroma.
Me relamí los labios, un poco ansiosa de enterrar mis colmillos en ese cuello que se aprecia tan tentador y esa vena que palpita sin cesar. Su piel se ve muy suave y su aroma me está provocando en demasía. Por esta razón es que mi padre no permite que nos relacionemos con los humanos, pues nuestro instinto siempre estaría en la cuerda floja.
―No tenía ni la menor idea de que el postulante se trataba de un humano, de ser así, yo...
—Eso ya no tiene importancia. Demetrius, ve a ayudar a mis padres, seguramente te necesitan.
―Pero ¿piensa quedarse a solas con él? ― lo miró como si fuera una amenaza inminente.
―Dudo mucho que este tierno ratoncito sea capaz de morderme, ¿o sí? ― lo miré directamente a los ojos y un escalofrío me volvió a recorrer de pies a cabeza―. Ve con papá a ayudarlo, eso te dará puntos. Además, no querrás que esto se llene de los más jóvenes, ¿o sí?
―No, no señora ― sacudió la cabeza varias veces seguidas―. Eso sería como echar a perder todo el esfuerzo que ponemos para controlarlos.
Este humano me despierta gran curiosidad. Aunque está nervioso y su corazón puedo escucharlo latir muy fuerte y rápido, no siente tanto miedo a como llegué a creer. ¿Acaso entró adrede a nuestro territorio o lo hizo sin saber qué suelo estaba pisando?
Demetrius nos dejó a solas y el humano retrocedió un paso, pero no lo dejé que se moviera más, pues lo acorralé contra la pared en cuestión de un segundo. Quedó tan sorprendido que su ritmo cardiaco aumentó a grandes decibeles, delatando el pánico que empezaba a ser más palpable en el aire.
―¿A dónde planeabas ir, ratoncito? ― acerqué mi rostro al suyo y estiró el cuello hacia un lado, dándome un ángulo perfecto para encajarle mis colmillos allí y beberme todo de él―. ¿Sabes lo peligrosa que es esa pose tan sensual que estás haciendo justo ahora?
«¿Acaso me está invitando a probar de su dulce néctar? ¿No le han dicho que exponerse de esa manera tan atrevida y llamativa puede resultar fatal?».
―Y-yo solo vine a la oferta de empleo ― incluso su voz temblorosa es toda una dulzura―. Por favor, no me haga daño...
―Pero si jamás te tocaré un solo pelo para hacerte daño, delicia. Todo lo contrario ―acerqué mi nariz a su cuello, deleitándome con su dulce aroma―, te aseguro que será excitante.
―No me haga nada ― suplicó y me quedé mirando esa expresión tan tierna y curiosa―. No le diré a nadie sobre ustedes, ¡se lo juro!
―No puedo arriesgar mi clan por la palabra insignificante de un humano.
―Créame, no voy a abrir la boca.
―Por supuesto que no ― sonreí ladeado, dando un paso atrás―. ¿Cómo llegaste a nosotros? ¿Cómo entraste en nuestro territorio? Además, ¿cómo es posible que te hayas postulado a una oferta de empleo que solo va dirigida a nuestro clan?
―Estaba navegando en la internet, ya sabe, buscando ofertas de empleo y encontré la suya de casualidad. Me llamó la atención de inmediato, además de que se ajustaba perfectamente a lo que estaba buscando. Curso finanzas, estoy a poco de finalizar mis estudios. Vi una buena oportunidad para tomar experiencia, pero no contaba con todo esto...
Sus palabras sonaban muy sinceras, pero ¿por qué no me terminan de convencer?
«Porque eres igual de desconfiada que tu padre y toda tu raza, más cuando se trata de un humano».
Jamás había tenido a un humano frente a mí, así que no podía saber si estaba mintiendo o decía la verdad, pero una parte de mí le creía y no lograba comprender por qué.
—Espero que estés diciendo la verdad, delicia.
—Lo juro por mi madre.
Antes de que mi padre decida tomar medidas más drásticas debido al enojo que debe sentir al saber que su guardia ha sido burlada por un simple humano escurridizo, lo mejor será llevarlo al calabozo y esperar a que los tres lideres más importantes del mundo tomen una decisión, aunque sería un completo desperdicio no poder probarlo primero, si es que se ve a simple vista lo dulce y empalagoso que es.
Wyatt ¿Por qué todo me tiene que salir mal? ¿Por qué tengo que tener tan mala suerte en mi vida? ¿Acaso fui cagado por un mono o qué?Cuando me postulé a esa oferta de empleo lo hice con la esperanza de al fin tener una oportunidad de demostrar todo lo que he aprendido a lo largo de mi carrera, pero no tenía ni la menor idea de que este mundo estaba plagado de locos. Bueno, al menos esa fue la primera impresión que me dio aquel hombre extraño, de gafas grandes, piel tan pálida como la leche y vestimenta de entierro. ¿Acaso iba a algún funeral o qué? Pero eso no fue lo más extraño, sino todo lo siguiente que sucedió. Ese hombre no tuvo ningún problema en levantarme por los aires y cargarme como si me tratara de un saco de papas. De por más extraño, me asusté mucho y creí que me iba a hacer algo malo. Pero hubiera preferido que ese hombre extraño me hiciera algo malo en lugar de dejarme a solas con esa mujer que todavía es más rara que él. Creí que me estaban gastando una broma, per
No podía mover un solo musculo de mi cuerpo para alejarla de mí, era como si su mirada carmesí y brillante me tuviera paralizado. Por más que me dijera a mí mismo que debía apartarla, mi cuerpo no respondía a mis mandatos. Sentía que mis brazos, mis piernas y en sí todo mi cuerpo estuviera sujeto por alguna fuerza sobrehumana. Sus largas y puntiagudas uñas sujetando mi cuello con tanta firmeza me tenía preso. No tenía escapatoria alguna. ¿Qué es lo que está pasando? Dios mío, esto no creo que se trate de trucos baratos sacados de la manga. Aquí hay algo más, algo oscuro y de por sí terrorífico. Su rostro cada vez se aproximaba más al mío y tenía la impresión de que sus colmillos crecían más y más. No podía moverme ni hablar, era como si me hubiera congelado y todo pasara a mi alrededor en cámara lenta. Sentí sus fríos colmillos en mi piel, rozando y pinchando breve la altura de mi clavícula y los latidos de mi corazón se dispararon a una velocidad inaudita. El miedo me tenía en un e
Justo como la noche anterior, ella intentó acercarse a mí para atacarme, pero una fuerza sobrenatural la detuvo en seco en el aire. Es que, si no lo estuviera viendo con mis propios ojos, ni yo mismo lo creería. Esa loca había quedado congelada, totalmente rígida mientras sus ojos pasaban de ser rojos a unos negros. Parecía una marioneta que colgaba de alguna cuerda y que era manipulada por alguien. De repente, cayó al suelo con mucha fuerza y se hizo un ovillo en el suelo, sujetándose la cabeza mientras gruñía. —Lo siento, mi señora, pero estas fueron las ordenes que dejó mi Lord. —¡Maldita sea, acaba con esto! —Pasará en un momento, en cuanto se tranquilice. Me quedé en completo silencio, tratando de asimilar lo que acababa de pasar. No sé qué sean estas personas, pero normales, está muy en claro que no lo son.La hada que, en efecto terminó siendo bruja, se acercó a ella y le lanzó varias palabras en un idioma que desconocía por completo, mientras ella se retorcía y su cuerpo s
BlakeHan pasado varios días luego de haber perdido todo control de mí y mi padre parece ya no tenerme la misma confianza. Pero ¿qué puedo esperar a cambio, si no solo ha sido una vez, sino dos veces las que no pude controlarme? Aunque la segunda todo fue gracias a Lirio que no terminé probando esa sangre tan dulce y adictiva de nuevo.—No estoy seguro de irme y dejarte a ti a cargo del clan mientras esté ausente. Rompiste la regla más importante, Blake. Te dejaste llevar por el deseo y ahora tenemos que lidiar con ese humano. Además de que, muy seguramente, los otros lideres ya deben estar enterados y es cuestión de tiempo para que soliciten una reunión para darte el castigo que mereces — suspiró—. Entre todos los vampiros, ¿por qué tuvo que ser mi hija la que se descontroló?—Lo lamento mucho, padre — bajé la cabeza, avergonzada de mis actos—. Sé que fallé. Recibiré mi castigo sin oponerme.—Eres la siguiente líder. ¿Crees que esto no va a perjudicar tu posesión? Nadie va a tomar en
Aunque quise acercarme muchas veces a ese humano y deleitarme con su exquisito olor y sabor, no podía hacerlo por su propio bien. El dulce sabor de su sangre me llamaba cada día con mayor intensidad a que bebiera con gusto de ella. Su olor permanecía oculto para todos, menos para mí, que podía sentirlo como si fuera parte de mí, atravesando cada partícula de mi ser de manera violenta y extraña.Mi padre se había marchado y con ello el trabajo me había envuelto por completo, pero siempre escapaba a verlo así fueran por unos cuantos instantes. Su mirada decaída, triste y esos bonitos ojos sin esperanza alguna era lo que veía cada que bajaba al calabozo y me mantenía a una distancia considerable de él. Me gusta observarlo de lejos, escucharlo hablar solo, reír por lo irónica que es su vida y llorar por su mala suerte.No podía soportar verlo allí y no lograba entender por qué un dolor agudo se instalaba en mi pecho. Me dolía ver su soledad y su tristeza. Me dolía más que nada poder acerc
WyattMi vida cambió sin que yo me diera cuenta. Pasé de tener una vida normal a estar encerrado en un calabozo, siendo custodiado por una bruja y una vampiresa extraña. Cada día pido para poder salir de este lugar e ir a casa con mi madre, pero parece que Dios se ha olvidado de mí.Mi madre debe estar muy preocupada por mí y no es para menos, pues han sido largos días en los que no he regresado a casa. No sé cuántos días han pasado con exactitud, ya que el día y la noche estando en completa oscuridad es irrelevante, pero han de haber pasado muchísimos. Por lo menos para mí se me ha hecho toda una eternidad.No pierdo la esperanza de salir de aquí, que me digan que solo se trató de una mala broma y que me he ganado un premio millonario por mi resistencia, pero estos trucos de magia son demasiado realistas y es casi imposible que la más alta tecnología sea capaz de simular estando en vivo.No sé en qué realidad paralela estoy viviendo. A veces pienso que todo esto se trata de un sueño,
—Eres tan dulce y exquisito, ratoncito —se relamió los labios, esbozando por último una sonrisa muy bonita.Desvié la mirada, avergonzado por todo lo que hizo el otro Wyatt, porque ese que se acercó a ella y se ofreció en bandeja de plata, claramente no era yo.«¿Cómo demonios fue que tuve un orgasmo con una mordida? ¿Qué hay de mal conmigo? ¿Desde cuándo una mordida es tan estimulante hasta el punto de hacerme venir en cuestión de segundos? Necesito irme de aquí antes de que la locura me consuma de lleno».No quería soltarla y, a decir verdad, ella tampoco pretendía alejarse de mí. Me miraba con un brillo descomunal y una sonrisa muy bonita mientras se acurrucaba cada vez más en mis brazos. Ahora sí puedo asegurar y dar fe de que la vampiresa es realmente preciosa. El mismo miedo que le tenía me hizo pasar por alto su gran belleza. Esos ojos rojos acentúan su piel blanca y toda su aura oscura y tenebrosa la hacen una criatura magnífica y exótica ante mis ojos. Sus labios, un poco man
Blake—No saliste a cazar —Ambrose no me preguntó, lo aseguró, más bien, me tiró una indirecta.—Si sabes que no lo hice, ¿por qué me tiras la indirecta?—Papá se pondrá furioso. Te lo advirtió, Blake —resopló—. No quiero intervenir. Eres mi hermana y lo menos que quiero es pelear contigo.—Esta vez no fui yo la que perdió el control, fue ese dulce ratoncito el que me brindó su sangre. Y es que es tan rica que no pude negarme.—No quiero pelear, Blake, por lo que te pido que no te acerques más a ese humano.—Lo he intentado, pero no puedo, Ambrose. Él tiene algo que me llama, que me incita a permanecer cerca, a inhalar su aroma y protegerlo —sacudí la cabeza con fuerza—. Siempre está en mis pensamientos.—Lirio me lo advirtió y por eso me insistió tanto de no dejarte sola.—¿Qué te advirtió esa bruja?—¿Acaso no lo sientes? No puedo corroborar nada porque aún no encuentro a mi otra mitad, pero Lirio cree que ese humano es la tuya. ¿No te das cuenta la magnitud de ese problema? Es huma