Capítulo 37DragónDeseaba poder decirle tantas cosas ahora mismo, deseaba poder explicarle que fue lo que sucedió en todo este tiempo, pero las palabras no lograban salir de mi boca. Mina, seguía estando tan hermosa como siempre, ahora su cabello yacía sobre sus hombros, dejándome ver su estilizado cuello, ese mismo, que anhelaba besar con antojo.Todo mi cuerpo se sentía atraído para ella, y no era para menos, estuve fantaseando por tanto tiempo volverla a ver, que ahora que la tengo tan cerca las palabras no quieren salir de mi boca. Mis piernas me acercan a la mujer de mi vida, entre tanto sus preguntas llegan una, tras de otra, no puedo evitar sonreír, sigue estando tan curiosa como siempre.Sus labios comienzan a humedecerse por la humedad de su lengua, sus manos acomodan su cabello detrás de su oreja, como solía hacerlo cada vez que algo la tomaba por sorpresa, ¡Mierda! Estoy realmente enamorado de esta mujer, estoy perdidamente enamorado de ella, que fui capaz de negarme a mí
Final✿ ----- ✿ ----- ✿✿ ----- ✿ ----- ✿Todo lo que estoy sintiendo, y viendo se siente realmente irreal para mí. Saco mi mano del coche de Dragón, una vez este baja la ventanilla del mismo. Son casi las siete de la noche, así que la brisa fresca arropa mis dedos con tanta devoción que siento que somos uno mismo. Mi respiración se siente un tanto pesada, al imaginar dentro de mi cabeza todo lo que ocurriría a partir de hoy.Deseo estar con Aric, luego de todo el sufrimiento por el cual pasamos para poder llegar hasta aquí. Mi secuestro, los días agonizantes sin saber que iba a ser de mi vida, aquella noche de vino que me permitió acercarme más al hombre que casi me mata, pero que también me devolvió las ganas de vivir.Antes de Dragón, solo era un cuerpo que se movía por mandato de mis padres, si bien, con esto no estoy diciendo que Ernesto y mamá hayan hecho mal su trabajo, al contrario, crecí llena de amor y devoción, sin embargo, todo cambió cuando la codicia se apoderó del cuerpo
Epilogo.Aun no puedo creer que estoy haciendo esto.Aun no puedo comprender como al final terminé renunciando a todo para quedarme con el amor de mi vida. Mi madre, termina de atarme el vestido de novia que elegí con ella para mi matrimonio con Dragón. Papá se ve en el fondo completamente conmovido, observando cada movimiento que hacemos. Se siente tan irreal, que suelo detenerme para pellizcarme, y así comprender si este es un sueño o no lo es.Mi estomago ruge, una vez una de las asistentes de mi boda anuncia que es el momento. El ligero aroma de las flores a un costado de mí, me hacen sentir viva y espacial. Ernesto, tensa la mandíbula, quizás intentando controlar las ganas enormes de llorar, aunque sus ojos cristalinos lo delatan. Al principio, pensé que mis padres se opondrían a mi matrimonio con Aric.Es que si bien, ¿Qué padre en su sano juicio dejaría a su hija casarse con el hombre que intentó matarla? Sin embargo, ellos creyeron que mi felicidad era más importante que cualq
PrefacioMi cuerpo se movía encima del Dragón, mientras él mantenía los ojos fijos sobre los míos. Sus manos se enterraron en la carne suave de mis caderas, sacudiendo así con mayor brusquedad sus movimientos. Un ligero hilo de sudor se deslizó por mis pechos al no poder recordar por cuanto tiempo hemos estado en la misma situación.¿Lo amaba?Aún seguía sin tener respuesta para esta pregunta que me formulaba día tras día, llevaba demasiados meses dentro de este lugar que algunas ocasiones sentía mi prisión, y que presentía moriría en cualquier momento sin ver una vez más el rostro de mi padre.Mis gemidos se intensificaron en el justo instante en que el asesino succionó con fuerza uno de mis pechos, si bien, aunque en el principio las cosas eran diferentes, Dragón jamás me ha obligado a hacer algo que no quisiese, y en parte le agradecía que me protegiera de los depredadores que me buscaban para hacerme daño.De un instante a otro y con un movimiento brusco, el pelinegro cambió nuest
Capítulo 1Mina SimonEl sonido ligero del piano que suena con algo de insistencia dentro de este restaurante, mientras que un grupo de adinerados y poderosos hombres se encuentran sentados en la misma mesa que yo, me hacen asfixiarme un poco. Los pasos fuertes de los meseros que caminan de un lado hacia otro, logran taladrar con demasiada fuerza dentro de mi cabeza. Mis manos aprietan con violencia el borde del cuchillo con el cual estoy rebanando la carne del platillo que me acaban de poner en la mesa, cuando las náuseas, y unas ganas enormes de vomitar se apoderan de mi garganta.Las risas falsas de papá junto al presidente de la República, me impulsan a mirar hacia otro lado para no estallar. Bastián, el hijo del mandatario de este país, toma mi mano sorpresivamente haciendo que brinque un poco por su toque repentino. Una ligera capa de sudor adorna mi rostro y no aguanto más.Bebo de golpe la copa de vino que tenía a unos cuantos centímetros de mi puesto, ganándome la mirada llen
Capítulo 2Mina Simon—¿Quieres que mi papá nos mate? —Abrí los ojos al verle deslizar la puerta de cristal de la división de la ducha en donde yo me encontraba. Rápidamente mis manos cubrieron mi desnudez, pero él solo se inmutó a barrerme con sus ojos cristalinos y llenos de maldad.—Nos encontramos allí, ¿Qué problema hay con eso? —Escupí, estiré mi mano para jalar la toalla y así cubrir mi desnudez—Ya tienes todo de mí; ¿Qué deseas más?Bastián tocó el puente de su nariz mientras sonreía, —Mi prometida dará un discurso hoy en la ONU, siendo está la voz de todas las mujeres de nuestro país, ¿Cómo no puedo estar allí, si será el mejor show de mi vida?Un escalofrió recorrió todo mi cuerpo al escucharle hablar, mi cuerpo pasó velozmente por encima del suyo, buscando así el traje de tres piezas que mamá había elegido para mí en este día tan especial. Una de las maquilladoras de las mujeres más poderosas de Francia, viajó desde otra ciudad para atenderme, mis padres insistían que nada
Capítulo 3Mina SimonEn ese justo momento mi asistente apareció obligando al rubio a desaparecer delante de nosotras.—Ya todo se solucionó, señorita, el presidente obligó a todos a firmar un acuerdo de no publicación de lo sucedido en los medios de comunicación, ¿Está usted bien?Miré la silueta de aquel enorme hombre a lo lejos, sus ojos y los míos se encontraron por un momento, y tuve que apartar la mirada cuando una sensación extraña se apoderó de mi estómago.—Sí, pásame otro vestido, y hagamos esto lo más rápido posible.Bajé la cabeza apenas las puertas del auditorio de la ONU se abrieron dejándome ver a los altos mandos de este gobierno, los periodistas empezaron a sacarme fotografías a medida que iba caminando hacia el podio.Bastián, se encontraba sentado junto a nuestros padres y algunos ministros de Francia, mis pies me pesaban y quería salir corriendo, pero debía ser valiente porque sabía que esta no sería la primera ni la última vez que tendría que enfrentarme a Ramiro
Capítulo 4Mina SimonDe manera inesperada el vehículo se detuvo en un lugar incierto para mí, mis brazos fueron tomados por alguien, el cual me arrastró con tan poco cuidado, que terminé cayendo de rodillas sobre algunos granitos de tierra. Mis dientes apretaron con fuerza mi labio inferior para no pronunciar palabra alguna.En el mejor de los casos, lo mejor para mí sería guardar silencio y colaborar lo más que pueda para no ser agredida por ninguno de ellos y solo seguir la corriente hasta saber a ciencia cierta qué es lo que está sucediendo, y quien es esa persona que contrató a este grupo de mercenarios para matarme.Mis pies caminaron un par de pasos hasta que unos brazos fuertes y toscos me levantaron del suelo para así cargarme como si todo mi cuerpo fuese un costal de papas. Mi cabello rizado cubrió en su totalidad mi rostro; ni si quiera habían pasado algunos segundos cuando la calidez y el olor a madera seca dentro de un desconocido lugar llamaron mi atención.—Llévala al s