Alex—Señor. Esperamos la orden para entrar — Escucho por la radio y me encuentro con la mirada de mi hermano.—Quédate acá hasta que te diga— Saco el arma y reviso las municiones.—No esperarás que me quede en el auto— dice Jeremy.—Me prometiste que cumplirías mis órdenes si te traía— Pongo el seguro del arma y me la meto en la parte de atrás —Cuando yo te diga, entras—.—No me quedaré mucho tiempo—Mi hermano cruza sus manos molesto.—Vigílalo—Le digo a uno de mis hombres.—Sí, señor— asiente y entra ocupando el puesto donde estaba sentado en la camioneta.—Ten cuidado— Dice Jeremy y puedo ver el miedo en sus ojos.—Tú también— Mi hermano Asiente.Salgo detrás de uno de mis hombres que están reunidos a una distancia prudente donde se encuentra una bodega y estamos seguros de que en ese lugar tienen a Lesly y Laura.No fue tan complicado encontrar su ubicación.Sospeché que Bianca tenía algo que ver en esto, ya que fue la última persona que estuvo con Laura, reconocí su voz antes de
Mi madre y yo nos quedamos solas en la oscuridad de esa habitación. Abrazadas, llorando hasta que el cansancio nos venció y nos quedamos dormidas una pegada de la otra.No sé si tener a mi madre a mi lado me ayudó poder descansar como no lo hacía hace días. Hasta puedo decir que soñé.Soñé con mi novio. Su sonrisa, sus besos, sus abrazos. Sobre todo cuando dormíamos acurrucados uno con el otro. Sentí paz. En ese momento pude sentirme segura en sus brazos, pero después la realidad me golpeó haciéndome despertar al sentir mi madre removerse a mi lado.En esta habitación vacía, oscura y fría. Sin ninguna cobija hacía difícil poder conciliar el sueño. El cuerpo de mi madre tembló, pasé mis piernas por encima de las suyas para trasmitirle calor. Aunque mi cuerpo estaba igual de frío que el suyo.—Lo siento mucho— Susurro abrazándola más fuerte.—No tienes nada que sentirlo cariño, nada de esto es tu culpa——Lo es, si yo no hubiera insistido en que volvieras a esta ciudad, nada de esto hubi
Mi hija y yo estamos ocultas, desde acá podemos escuchar cómo nos buscan. Tomo su mano y le hago señas que haga silencio, ella asiente y juntas bajamos despacio por las escaleras y nos ocultamos detrás de la barra de la cocina.—Yo los distraeré y necesito que salgas por esa puerta— Digo señalando la puerta que da hacia la parte trasera.—No, mami, no me iré sin ti— Dice mi hija, Tomó su rostro para que me mires.—No te preocupes, yo estaré bien—Mi hija asiente.Le digo que esperé y yo me voy gateando por el corredor hasta que doy un grito. De inmediato se escucha un alboroto y cómo vienen a buscarme. Le hago señas a mi hija y ella asiente y sale corriendo hacia la parte de atrás. Aprovecho para esconderme, pero soy atrapada.—Quieta o lo vas a lamentar—Dice una vocecita. No me muevo, me toman de ambos brazos y camino junto con las personas que me retienen.Al salir, sonrió con victoria al ver a mi hija saltar de un lado a otro con la bandera del otro equipo. De inmediato nuestro equi
Salgo del departamento y camino despacio hacia la escuela, hoy es mi primer día en ese instituto y no puedo negar que me siento un poco nerviosa.Caminé despacio, tomándome mi tiempo, salí con una hora de anticipación y poder caminar tranquilamente sin tener que correr por llegar tarde.Miro a mi alrededor y trato de imaginarme como fue la vida de mi madre en este lugar, se ve tranquilo y aunque llevo pocos días de haber llegado a esta ciudad las personas son amables.Mi madre nació en esta ciudad, en Sacramento, California. Dice que acá pasó los mejores años de su vida, pero al final el peor de su vida.Ella y yo no tenemos secretos, somos las mejores amigas. Mi madre es divertida, loca y extrovertida. Las personas siempre la confunden con mi hermana mayor, ella tiene treinta y dos años y yo diecisiete.¿Cómo es posible que sea tan joven? Preguntan siempre a las personas ¿A qué edad te tuvo? Dicen otras.Mi madre es una mujer hermosa, de cabello oscuro como la noche, de ojos azules c
Camino por el largo pasillo buscando dónde se encuentra la coordinación y me puedan dar mis horarios y el número de mi casillero. Me concentro en los detalles del instituto, todo muy bien arreglado y decorado. Los estudiantes empiezan a ingresar, cada quien pasa por su lado metido en su mundo.Un fuerte golpe me hace desestabilizar, haciéndome caer hacia atrás, golpeándome con los otros casilleros. Furiosa, busqué al causante y observé a un chico rubio caminar como si nada.—¡Idiota!— Grito y los estudiantes se detienen y me miran con horror. El chico rubio me mira sobre su hombro y me da una media sonrisa y sigue por su camino.Resoplo y sigo con mi camino.Después de dar con la coordinación y mi casillero, llegué tarde a la primera clase. Genial, después de todo, no importó que llegara temprano, terminé llegando tarde a clases.Sentía la mirada de todos mis compañeros al ingresar al salón, en especial de aquel rubio con el que había tropezado. Le doy una mala mirada y solo me sonríe
Estaba en enfermería junto con mis nuevos amigos, ellos lucían preocupados por las represalias de Jeremy, por mi parte estaba dispuesta a defenderme.De un momento a otro escuchamos un escándalo al otro lado de la puerta y esta es abierta siendo azotada. Mi madre entra agitada y cuando me ve sus ojos se humedecen tirándose encima de mi cuerpo.—Dime quién es y lo mataré despacio y dolorosamente — susurró en mi oído para que yo solo la escuché.— Estoy bien, Ma, además él tuvo su merecido — Susurro.— Esa es mi chica — Mi madre se separa de mi cuerpo y empieza a inspeccionar detenidamente. Observa mi cuello y hace una mueca, me hace abrir la boca y saca una pequeña linterna del bolsillo y mira por dentro de mi garganta.— No se preocupe, su hermana se encuentra bien — Dice alguien a espaldas de mi madre, ella levanta una ceja y sonríe. Sé que le encanta que le digan que somos hermanas.— ¿Qué fue lo que sucedió?— Pregunta mi madre cambiando su máscara a enojada.— Un chico la atacó — s
Estaba en enfermería junto con mis nuevos amigos, ellos lucían preocupados por las represalias de Jeremy, por mi parte estaba dispuesta a defenderme.De un momento a otro escuchamos un escándalo al otro lado de la puerta y esta es abierta siendo azotada. Mi madre entra agitada y cuando me ve sus ojos se humedecen tirándose encima de mi cuerpo.—Dime quién es y lo mataré despacio y dolorosamente — susurró en mi oído para que yo solo la escuché.— Estoy bien, Ma, además él tuvo su merecido — Susurro.— Esa es mi chica — Mi madre se separa de mi cuerpo y empieza a inspeccionar detenidamente. Observa mi cuello y hace una mueca, me hace abrir la boca y saca una pequeña linterna del bolsillo y mira por dentro de mi garganta.— No se preocupe, su hermana se encuentra bien — Dice alguien a espaldas de mi madre, ella levanta una ceja y sonríe. Sé que le encanta que le digan que somos hermanas.— ¿Qué fue lo que sucedió?— Pregunta mi madre cambiando su máscara a enojada.— Un chico la atacó — s
—¿Acaso no tienes casa?— Digo molesta, Jeremy se ha instalado en mi habitación como si fuera suya. Lo peor es que mi madre ha salido y me salí con él.— No tengo casa — Encoge sus hombros —Tu madre dijo que podía quedarme todo lo que quisiera, así que...— Se estira y toma mi almohada para inhalar mi aroma — Umm fresas—— ¡Oye!— Le grito y trató de quitárselo, pero se aferra a ella con fuerza. — ¡Eres un degenerado!— El timbre suena y yo lo ignoro, trato de quitarle mi almohada sin lastimarlo.— Ve abrir — Su voz sonó más como una orden y no me aguanto más y presiono mi rodilla hacia el costado que tiene la herida. De inmediato maldice soltando mi almohada y antes de abandonar mi habitación le golpeo con ella y salgo con una sonrisa de victoria.Abro la puerta y me encuentro con un hombre vestido de traje.—¿Qué desea?— Pregunto y, antes que pueda el hombre contestar, Jeremy pasa por mi lado y su semblante luce furioso.— No le digas a nadie donde estoy — Dice de mala gana y el hombre