Eran las 6 de la mañana, el sol alumbraba la habitación de lujo del Hotel BlackFish, el sonido de las olas rompiendo en la orilla del mar.La luz que entraba por la ventana daba directo en el bello rostro de la joven Alicia, la cual estaba dormida plácidamente en la cómoda cama del hotel. Al sentir el rayo de sol en su rostro, Alicia se levanta, estirando las manos por la pereza.Giro su mirada al lado derecho donde había un mueble y vio una nota encima de ella. Aún estaba con bastante pereza como para levantarse, así que estiro su brazo para alcanzar la nota. Después de tomarla en sus manos, la abrió y comenzó a leer.- ¨Alicia, yo me voy primero, tengo muchas cosas que hacer con mi familia y lamento no poder estar todo el día a tu lado. La noche que pasamos juntos fue increíble, espero que se vuelva a repetir pronto, (Te amo muchísimo). Por cierto, ya pagué el hotel, así que no te preocupes por eso¨Después de leer la carta, los ojos de Alicia comenzaron a brillar, parecía como si f
Cuando Alicia abrió los ojos, se encontró con un techo que no reconocía. Se sentó de inmediato y estaba en un lugar que no recordaba. Al girar a la derecha, pudo ver por fin algunas caras familiares, se trataba de su familia. Estaban ahí su padre, madre, durmiendo al borde de su cama donde estaba acostada. En ese momento, gracias al movimiento que estaba haciendo Alicia para ponerse cómoda, la camilla también se estaba moviendo, haciendo que las personas que estaban durmiendo en el borde, también despertaran. La primera que se despertó fue su madre, la cual al instante en que vio a Alicia despierta, sin previo aviso se lanzó encima de ella para abrazarla. El resto de la familia también se lanzaron encima de Alicia al verla con los ojos abiertos. Alicia estaba completamente perdida, no podía entender que había pasado, ni porque está ahora en esa habitación que parece de un hospital y, además, tampoco entendía porque su familia la estaba abrazando como si no la hubieran visto desde h
Mientras iba caminando junto a Cesar de camino a la universidad, Alicia se encontró a su mejor amigo Oscar que también iba a la universidad. - ¡Oscar ¡-Alicia levanto la mano, mientras lo llamaba. Oscar escucho que alguien lo llamaba, así que al ver en la dirección de donde venía la voz, vio a Alicia y se acercó caminando para saludarla. Mientras más se acercaba, vio atrás de Alicia a una persona que no conocía de nada. Así que, al llegar, le pregunto a Alicia, sobre quien era esa persona. - Oscar, este de aquí es Cesar, se acaba de inscribir a nuestra universidad, y me pidió que le diera un recorrido por ella para conocerla. –Alicia miro a Cesar y dijo. – Cesar, este es mi mejor amigo, Oscar, nos conocemos desde que éramos niños. –Alicia los presento a los dos. Apenas termino de presentarlos, Oscar estiro su mano para saludar a Cesar y él le devolvió el saludo. Mientras caminaban hacia la universidad juntos, se sentía un ambiente extraño, y además había un silencio terrible. Ces
Al día siguiente, Alicia se levantó un poco más tarde, ya que era sábado y no tenía clases, así que había decidido dormir un poco más. Después de levantarse y darse un baño, salió de su cuarto para ir a desayunar. Pero antes de siquiera llegar al comedor, escucho el timbre de la puerta, por curiosidad fue abrir la puerta, pero para su sorpresa, se encontró con alguien que no quería ver. - ¿eh? Cesar, te puedo preguntar ¿Qué haces en mi casa a esta hora? ¿o es acaso que me estas espiando? –Alicia esta desconcertada al ver a Cesar en su casa tan de mañana. - Buenos días también, Alicia, y no, no estoy aquí por ti, estoy aquí es porque tu papá me invito a desayunar en su casa, ya que tenemos algunos asuntos que atender, pero de igual manera, me da mucho gusto saludarte, estas hermosa. –Cesar sonrió de forma coqueta. Alicia lo miro con desdén. – Esta bien, pasa, siéntate en el mueble que ahora llamo a mi papá para que te atienda. –Alicia estaba disgustada. Cesar hizo caso a lo que Ali
- Señor bienvenido, ¿Cómo le fue? –Pregunto Mauricio.- Por el momento, todo va saliendo bien, ¿hay algún problema en la hacienda? –Pregunto Cesar mientras salía de la camioneta.- No señor, ningún problema. –Respondió educadamente.Cesar solo asintió con la cabeza y entro adentro de la hacienda.- ¡Niño Cesar! Qué bueno es ver que ya volvió. –Una dulce voz que provenía de la cocina.Cesar miro en la dirección de la cocina y pudo ver a Susana. Una señora de tercera edad, la cual trabaja como cocinera en esta hacienda desde hace 50 años, también fue la nana de Cesar y Mario cuando estos eran niños, prácticamente era como su segunda madre.Sin decir ni una sola palabra, Cesar comenzó a caminar en dirección de Susana para darle un muy fuerte y caluroso abrazo.- Si nana, ya volví. Mmm ¿Estas cocinando ese tallarín que tanto me gusta? –Pregunto Cesar mientras se relamía los labios.- Si, como Mauricio me dijo que hoy volvías a la hacienda, me dedique toda la mañana para prepararte ese tal
Cesar asintió con un poco de miedo, ya que no tenía ni idea de que Mónica tuviera una actitud de celopata, eso lo estaba poniendo bastante nervioso. Después de pasar algunos minutos más hablando, Mónica ya se estaba preparando para irse, al igual que Cesar, pero antes de subirse a su camioneta para irse, miro a Cesar y le dijo. - En unos días voy a estar por la ciudad, por si te interesa alcanzarme para poder estar solos. –Mónica le guiño un ojo. Estando nervioso y un poco incómodo, Cesar asintió con la cabeza y Mónica se fue de su hacienda. Cesar no sabía cómo librarse de ese compromiso, ya que, si decía que no quería casarse con Mónica, su padre podría vengarse de una manera muy asquerosa de él, además de que se regaría el chisme de que la familia Herrera no cumple su palabra y ya nadie confiaría en ellos, estaba completamente atrapado. - Señor, y ¿Qué tal si su hermano se casa con la señorita Mónica? –De repente hablo Mauricio, el cual estaba a un lado de Cesar. ¨Mario¨ Con es
Al ver a Alicia ya en la mesa, Cesar se puso de pie y tratando de ser un caballero, hizo la silla un poco para atrás para que Alicia se pueda sentar. - ¡Gracias! –Dio Alicia en respuesta a la acción de Cesar. - Por cierto, hoy te vez especialmente más hermosa de lo habitual, prácticamente me quede en shock al verte y estoy seguro que muchos otros se quedaron como yo. –Cesar trataba de alabar a Alicia. - Gracias, tú también estas bien. –La respuesta de Alicia fue fría como el hielo. Al ver la actitud que estaba teniendo Alicia, Cesar decidió cambiar de tema de inmediato. - Puedes elegir lo que tu desees, sin importar el precio. –Hablo Cesar mientras le entregaba la cartilla con los diferentes platos a Alicia. Alicia la tomo en sus manos y comenzó a leerla. Hubo un silencio incomodo mientras Alicia veía que pedir, para tratar de aliviar el ambiente, Cesar hablo. - Yo pedí unos camarones asados. Unos amigos me contaron que aquí tienen los mejores camarones de la ciudad, así que qu
Alicia hizo una mueca de disgusto al escuchar la opción que su madre le había dado. - No, no, eso es imposible que suceda, ese tipo me cae muy mal, no lo soporto, además lo que me estas pidiendo es que ¡me venda! Esto es algo que mi papá nunca aceptaría, nunca dejaría que yo me sacrifique solo para salvarlo de la ruina y la cárcel. –Alicia estaba muy disgustada con esa decisión. - Alicia, por favor piensa, piensa en el bien de tu papá, o acaso ¿quieres que el pase los últimos años de su vida encerrado tras una reja? ¡Eso quieres! –María le reclamo. - ¡No! ¡por supuesto que no quiero eso! –Alicia estaba sollozando. - Entonces por favor piensa hija, piensa en lo que más le conviene a esta familia y sobre todo a tu padre. Por cierto, antes de irme, déjame decirte que invite al señor Cesar a tomar un café este fin de semana, espero que, para entonces, ya hayas tomado una decisión. –Después de decir eso, María salió del cuarto de Alicia. Alicia se quedó pensando en lo que su madre le