Capítulo cinco.

Grace se había puesto pálida y sintió un inmenso escalofrío recorrer todo su cuerpo. No estaba nerviosa por el hecho de que la mujer haya hecho esa exclamación, sino el hecho de que Alonso estaba en Chicago y la estaba buscando.

—¿Espera Grace?— Jhonathan se acerco a ella confundido, —¿Cómo que te estás buscando tu marido? ¿Eres casada?

—¡No! Por supuesto que no.— Contestó Grace.

—Yo lo ví en un bar y me mostró una fotografía tuya. Te estaba buscando y parece estar angustiado.— Leticia Jones se volvió a meter la chupeta en la boca, —Alonso al parecer está enamorado de tí.

—Déjame aclarar una cosa.— Grace miro a Hawkins, —Alonso García es mi ex novio y recientemente nos separamos por motivos personales. Él de seguro me siguió desde Detroit hasta aquí y... ¡Alonso es parte de mi pasado!

—Pero por lo que veo, Alonso te sigue queriendo en su presente.— Dijo Leticia.

—Eso no va a pasar. Alonso ya es parte de mi pasado.— Dijo Grace con firmeza, —Señor Hawkins si quiere podemos cancelar todo y buscas una nueva candidata para el vientre en alquiler.

—Si dices que Alonso es parte de tu pasado, te creo.— Dijo Jhonathan con una sonrisa, —Leticia, ¿Te puedes retirar?

Leticia frunció el ceño y se levanto de la silla de mecanismo basculante. El cabello de color pelirrojo estaba en el lado derecho por detrás de su hombro y una sonrisa maliciosa se firmó en sus labios.

—Y que no se te olvide que por nada del mundo voy a permitir que alquiles un vientre.— Ella dejo la chupeta sobre el escritorio de él y lo señaló, —No dejare que ninguna mujer lleve en su vientre un primogénito tuyo.

—Eso sonó como una amenaza.— Dijo Grace después de ver a Leticia salir de la oficina, —¿Por qué está actuando así?

Jhonathan tomo una respiración breve y se sentó en su silla de mecanismo basculante y le indicó a ella para que sentada.

—Ella es Leticia y es mi ex esposa.— Dijo él, tomando la chupeta que Leticia dejó sobre el escritorio y lanzándola a la papelera, —Pero no te preocupes que esto no va a afectar nuestro acuerdo, ¿Todavía estás abierta para hablar de nuestro contrato?

—Me parece una buena idea.— Ella se sentó en la silla de mecanismo basculante que él le indico, —Lo escucho...

(⁠◔⁠‿⁠◔⁠)

Después de salir de Suministros de Brillo Hawkins, Leticia estaba totalmente enojada y ahora más al tener conocimiento de que en la oficina de su exmarido, ahora estaba una mujer que pronto haría un acuerdo con él para alquilar su vientre.

«Si esa mujer llega a un acuerdo con Jhonathan, eso quiere decir que nacería un bebé que en un futuro será el dueño de todo» Pensó ella, caminando por las transitadas calles de Chicago.

Saco su teléfono y busco entre sus contactos el número telefónico de Alonso García. El hombre que había conocido en un bar y que la había invitado a tomarse un trago en esa ocasión.

—Leticia.— Saludo Alonso, —¿Alguna novedad con respecto al paradero de mi novia?

—Alonso, ¿Nos podemos reunir en el mismo bar?— Preguntó ella.

—Estoy disponible para una conversación.— Dijo Alonso, —¿Me vas a decir algún dato para encontrar a Grace?

—Sí.— Dijo ella, —Te espero en el bar. ¡Ahora mismo!

Leticia finalizo la llamada. Ahora tendría que ir hasta ese bar para reunirse con Alonso y darle un dato para poder ubicar a la tal Grace. Pero por supuesto que le pediría algo a cambio.

—No me gusto el tono que usaste al final de la llamada.— Dijo Alonso al verla acercándose a él. Ella se sentó en una silla al lado de él y cercana a la barra, —¿Qué vas a tomar?

—Un tequila. Ahora estoy es ardiendo de la rabia.— Leticia tenía la frente arrugada y comenzó a abrir una chupeta de fresa.

Alonso pidió dos tequilas al bantender y la miro con curiosidad mientras se comía la chupeta.

—He notado que tienes una profunda obsesión con las chupetas.

—Me gustan. Pero en un par de ocasiones me ayudan en mis momentos de alteración.— Dijo ella.

El bartender dejo los dos tequila en la barra y Alonso los agarró.

—¿Y ahora estás alterada?— Preguntó él, dándole el tequila de ella y quedándose con el suyo.

—Sí.— Dijo ella, —Ya sé dónde puedes encontrar a Grace.

—¿Dónde?— Preguntó Alonso.

—En la empresa de mi ex marido.— Ella se tomó el tequila de un sorbo, —Suministros de Brillo Hawkins. El presidente es mi ex marido Jhonathan Hawkins.

—¿Dónde queda ese lugar?— Alonso se tomó todo su tequila. Ella le dictó la dirección y él la memorizo, —Gracias. Te ganaste el cielo conmigo.

—Y tienes que darte prisa. Grace ahora mismo está llegando a un acuerdo con Jhonathan para ser su vientre en alquiler.

—¿Qué?— Alonso ahora estaba enojado.

—La condición es que te lleves a Grace fuera de Chicago y que me deje el camino libre con Jhonathan.

Alonso se levantó y salió del bar. Ahora mismo tomaría camino para llegar a Suministros de Brillo Hawkins, esperaba poder encontrar a Grace Clark en ese lugar.

(⁠◔⁠‿⁠◔⁠)

—Entonces Grace Clark, ¿Estás dispuesta a aceptar mi contrato para que me alquiles tu vientre?

Grace estaba analizando el documento que había sobre el escritorio. En el estaba plasmado con total claridad cada detalle del contrato y ella solamente tenía que firmar.

—Me da un tiempo para leerlo.— Ella lo miro, —Unos dos minutos más.

Jhonathan sonrió y asintió.

Grace comenzó a leer en voz baja lo escrito. Si ella aceptaba se tendría que mudar a la casa de él y por supuesto él se encargaría de todos los gastos médicos y lo necesario para el día del parto. El ingreso que obtendría de manera semanal era jugoso y bueno. Todo el contrato en sí, era justo.

—Me parece una buena oferta.— Grace tomo el bolígrafo y firmo el documento y finalmente lo rodo por el escritorio.

—Ya que has aceptado mi propuesta quiere decir que tendrías que vivir conmigo, ¿Estás dispuesta a mudarte conmigo?— Él la miró, guardando el documento dentro de una carpeta.

—Sí. Pero necesito tiempo para ir a la casa de mi hermana Paula y buscar mis cosas.— Grace sonrió.

Ambos se levantaron y comenzaron a salir de la oficina y unos segundos después estaban saliendo de la empresa. Ella se despidió de él y prometió regresar con todas sus pertenencias.

—¡Grace! ¡Así que aquí estás!— Alonso apareció en el frente de la empresa Suministros de Brillo Hawkins. Estaba con las manos en los bolsillos y una expresión de frialdad en su rostro.

—¡Alonso! ¿Cómo supiste que estaba aquí?— Ella sintió su corazón latir rápidamente dentro de su pecho.

Él camino hasta ella y la tomo con brusquedad por el brazo.

—Vamonos a Detroit.— Dijo Alonso en voz alta.

—No.— Ella intento soltarse. Pero Alonso la estaba jalando.

Jhonathan que había entrado unos segundos para buscar algo, salió rápidamente para controlar la situación.

—¿Qué estás pasando?— Preguntó, —Te ordeno que sueltes a Grace.

—Grace es mi novia y ahora mismo me la llevare para Detroit.— Dijo él, aterrando su mano al brazo de ella que no paraba de moverse adolorida.

—No seas idiota. Tienes que soltarla.— Grito Alonso, —No seas cobarde y poco hombre.

En el momento en que Alonso escucho «Poco hombre» sintió la ira recorrer por su interior y corrió hasta él para poder golpearlo. Sin embargo, Jhonathan fue más hábil y le propino un golpe que lo mando al suelo de rodillas.

—Ya lárgate y deja en paz a Grace.

—Te prometo que te llevare a Detroit a la fuerza.— Grito Alonso y se fue caminando.

—Muchas gracias.— Dijo Grace, —Ahora voy por mis cosas.

—Déjame y busco mi auto. Ese hombre es peligroso y de seguro va a tratar de seguirte. No puedo permitir que te haga nada.

Leia este capítulo gratuitamente no aplicativo >

Capítulos relacionados

Último capítulo