Capítulo 365
No hay nada entre Sergio y yo, solo me molesta su engaño, pero no puedo contarle esto a Mariana.

Su corazón estaba delicado y muy sensible, tendía a preocuparse demasiado.

—No pasa nada —sonreí—. ¿No ves lo bien que estamos Sergio y yo?

Mariana me miró fijamente con sus ojos brillantes, tanto que casi no pude sostenerle la mirada. Eran tan puros que sentí que mi mirada directa podría contaminarlos.

Levanté instintiva la mano para bloquear su mirada —De verdad que no pasa nada, si no me crees, pregúntale a Sergio cuando vuelva.

—Sara —Mariana me abrazó del brazo y apoyó con dulzura su cabeza en mi hombro—, si Sergio hace algo mal, golpéalo, grítale, pero por favor no lo dejes.

Su tono débil sonaba como una fuerte súplica. Froté mi cabeza contra la suya —Está bien, te dejaré que tú lo regañes.

Mariana le contestó —Sara, yo siempre estaré de tu lado.

Tenía tanto miedo de que me fuera.

Era la primera vez que me daba cuenta de lo importante que me había vuelto para alguien.

—Sara, si yo no
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP
capítulo anteriorcapítulo siguiente

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP