|El bravo mar del océano pacifico chocaba en las costas de la ciudad, gente descalza paseaba por las calles vendiendo, gallinas, tortillas o flores; niños mocosos pedían limosna a los pocos autos y carruajes que circulan por las calles.Luz María Subercaseux cubrió su nariz con un pañuelo al pasar por una calle cerca de uno de los tantos callejones de la ciudad que albergan a las familias más desposeídas, sin sistema de alcantarillado; las aguas con restos de orines y fecas circulaba libre por las calles aledañas a estos pasajes, con cada vez más familias que llegaban a instalar sus precarias viviendas en el lugar._Que asco esta gente, ¿por qué no se organizan con un lugar para botar sus cochinadas? Pasemos rápido por aquí Don Juan que quiero ir a mi casa a descansar.Luz María estaba a pocos días de dar a luz a su segunda hija; que nacería en un palacete de la exclusiva calle Traslaviña en la ciudad de Viña del Mar, su marido, Don Gustavo Montt es un acaudalado financista que además
Pasó el tiempo y Dafne se había convertido en una hermosa joven de quince años, Camille, su hermana mayor ya se había prometido en matrimonio con un acaudalado dueño de una empresa mercantil del norte del país, el próximo mes seria la boda y todos en su casa estaban como locos con los preparativos. Dafne aprovecha las circunstancias para salir y pasar desapercibida. Empieza a frecuentar cafés literarios, el Ramis Clair era uno de los favoritos, ubicado en Valparaíso, que es la ciudad de al lado de Viña del Mar. Ella bordeaba la avenida marítima y llegaba en carruaje hasta aquellos cerros intrincados que la maravillaban. Para ella, alejarse de su casa era un respiro de libertad, salir de la vista de su madre y sus constantes recriminaciones, era un alivio para su espíritu, nunca entendió bien por qué su madre tenía tanta preferencia por su hermana mayor, mientras que a las pequeñas; Elisa y María Belén, las tenía completamente a cargo de la institutriz, no eran sus favoritas, pero tampo
Al día siguiente se celebraría una tertulia en casa de los Montt Subercaseaux y Luz María disponía de todos y de todo para que estuviera perfecto. No solo se trataba de recibir amigos, como lo hacen en las casas de las personas comunes, si no que se trataba de concretar negocios familiares, y buscar pretendientes para los hijos e hijas. Si Camille ya estaba prácticamente casada, ahora tocaba la tarea con Dafne; sus padres imaginaban que sería más complicado, por su carácter rebelde y pasión por la escritura y por leer; cosas que no eran bien vistas en una señorita que quiere ser una buena esposa. Ella, a diferencia de su hermana, nunca se interesó por aprender a bordar, disponer de una mesa, saber qué cocinar y para qué ocasiones. Ella siempre escaba de esas enseñanzas aludiendo a que ya se encargarían otras personas, o diciendo que en realidad para qué aprender eso si ella no se casaría jamás; esto último lo decía especialmente para molestar a su madre. María Luz no estaba dispuesta
Al día siguiente del matrimonio de Camille, las cosas habían vuelto a la normalidad, la hija mayor se fue de casa a Rancagua, mientras que Dafne ansiaba para ella también la libertad que había obtenido su hermana yéndose de casa, y más urgente aun, porque se sentía profundamente incomprendida por sus padres; ella deseaba alejarse lo antes posible de su casa, ahora desde el pasillo que daba al salón, escuchaba que sus padres comentaban lo ocurrido con el carrero._Esa niña hace lo que quiere con los empleados de esta casa, hasta parece que trabajaran para ella y no para ti que eres el dueño de casa Gustavo, ahora resulta que manda misivas a ese joven que ambos, usted y yo, le advertimos que no iba a ser su prometido_ Gustavo, el padre de Dafne escuchaba serio y meditabundo sin hacer comentarios.Dafne caminó rápido por el pasillo hasta la puerta del fondo y fue directo al patio de trasero donde sabía que encontraría a Juan. El hombre estaba bajando sacos de papas de una carreta y guard
Marie contó todo a la familia de Dafne y la madre de esta decidió que ya no habría más salidas para su hija; el padre estuvo de acuerdo y a partir de esa misma tarde iba a comenzar a recibir las visitas del joven Harvey. Pero Dafne no estaba dispuesta a seguir un matrimonio por conveniencia, ni estaba dispuesta a fallar en su cita en la estación de trenes con Gastón. Aquella mañana de septiembre, Dafne se levantó muy temprano y baja al salón donde estaba su padre a solas con una taza de café y un dulce de merengue._Buenos días, padre,_ ella, se acercó para darle un beso en la mejilla; su padre lo recibió sin mirarla ni emitir palabra._ Dafne, Marie nos contó que ayer en el cumpleaños de Inés le regalaste una flor a ese muchacho como declarándote ¿es así? _ ella se sentó a su lado y se sinceró con él gracias al momento a solas_ Padre, yo no me quiero casar con el joven Harvey, mi conexión emocional es con Gastón._ Ese chico no te conviene, hija, soy tu padre y yo decido quien es el
Dafne guarda la carta en un sobre y con su elegante letra escribe el remitente y a quien va dirigida; es Vicente García Huidobro en Santiago de Chile, su amigo había llegado hace algunos días, según la madre de Vicente quien días atrás se comunicó por medio de un telegrama con la familia MonttDespués de una tensa comida en la que solo algunas intervenciones de la pequeña Elisa sacaron sonrisas en la familia; Dafne pidió permiso para retirarse._Quiero que estes encerrada en tu habitación hasta nuevo aviso_ pronunció su madre antes de que Dafne se pusiera de pie_ ¿Qué hice ahora?_ preguntó ella_pasarte de la raya como siempre, beber champagne, regalarle flores a un hombre y bailar apretada con él, por si se te había olvidado. Ah y ya no hay más cumpleaños para ti, y eso incluye tu propio cumpleaños, olvídate de cualquier obsequio o fiesta; con tu actitud de casquivana, llega a dar miedo hacer una reunión en tu nombre_No me esperaba menos de usted madre, permiso_ Dafne miró a su pad
El primer encuentro con los suegros de Dafne fue cuando recién llegados a la capital ellos estaban esperándolos en la estación de trenes._bienvenido hijo_ el padre de Gastón estrechó la mano a su hijo_ ¿cómo estuvo el viaje? _ preguntó la madre mirando a ambos_maravilloso_ respondió Dafne sonriendo_Dafne, te presento a mis padres, ella es doña Sara Irarrázaval y el es don Ramón Balmaceda_buenas tardes, señorita Montt, bienvenida a la familia_ su suegro estiró su mano para estrechar la de Dafne, mientras que Sara tan solo hace un gesto inclinando la mirada para saludarla_buenas tardes, muchas gracias_ ella respondió sonriendo a ambos, pero ninguno devolvió el gesto a la recién llegada y ella se sintió incomoda, tomándose firme del brazo de Gastón_bueno papá, ¿nos acompañan a casa?_Vamos para que se instalen, yo les traje algunas cosas que podrían faltarles en su nueva casa_ la madre avanza junto a Dafne y le pregunta: _ ¿sabes cocinar, Dafne?_no mucho, pero puedo aprender_eso
Dafne estaba en un túnel, húmedo, frio y sin ningún tipo de luz a la vista que diera la esperanza de una salida, comenzó a sonar una voz reverberante masculina que la llamaba seguidamente, Dafne caminaba dirigiéndose al sonido de esa voz para encontrar la salida; hasta que la voz comenzó a reír; Dafne se quedó quieta pensando: ¿de quien es esa voz? ¿por qué ríe? Pero el miedo la paralizaba y le impedía gritar, aunque ella deseaba hacerlo imperiosamente, quería gritar: ¡papá!, Pero no era la risa de su padre, era una risa maligna que le ponía los pelos de punta; al fin se decidió a correr hacia la supuesta salida; la voz ya no la nombraba solo se reía estruendosamente, como las risas de los villanos del radio teatro que ella escuchaba cuando acompañaba a Rosita en la cocina; después de mucho correr, ella sintió la intensidad de una luz en su espalda, se giró y lloró agotada al ver que dentro del túnel la salida estaba muy lejos y era al lado contrario de hacia donde ella corría. Desp