(Jayden)El mundo de los lobos, mi mundo, estaba sumido en un pleno caos. Keira no estaba y por lo que entendía al rastrear las pistas, solo Kat pudo habérsela llevado hacia vaya a saber que sitio. Necesitaba encontrarla y lo haría solo, no necesitaba más ayuda de nadie. Estaba harto de depender de otros lobos para lograr hacer lo que se debía. No podía perder más el tiempo.Nat estaba muerto y tuve que afrontar su fallecimiento prematuro con la mayor de las frialdades para ganar esa parte de la guerra. Claro que Kat seguía allí y ella, representaba un gran problema para todos a pesar de no tener ningún ejército. Los lobos eran libres, muchos me llamaron para preguntarme, seguramente, si tenía idea del complot y de que sucedió con la guerra entre manadas. Todos estaban realmente confundidos y no los culpaba por ello. Sus manadas se habían desordenado, sus negocios habrían tambaleado y ahora, querían un culpable para perseguir, en poco tiempo encontrarían uno y rogaba porque no fuera y
(Iker)Volver a la mansión fue de lo peor para mí, revivir esos recuerdos trágicos. Recordé a Ryder y Greg en cada parte de mi antigua casa. Las paredes hacían que me sintiera más culpable que nunca. Los dos asesinados por complots y engaños.—Ser el alfa líder ha sido lo peor que he hecho por esta familia. —dije, cuando al fin las palabras se dignaron a salir de mi boca. —Renuncio a todo eso.—¿Qué? ¿Estás loco? Con todo lo que tenemos por hacer, sabes que hay más responsabilidades. —Kal comenzó a hablar de manera pausada. —Lo que ha sucedido fue una desgracia, sabes que sufro como tú, era mi hermano también.Desde allí, en la sala, se escuchaban los sollozos de la viuda. Ema lloró desde el momento en que vio que su lobo no venía con nosotros y mantenerla en calma fue imposible. Tuvieron que encerrarla en su cuarto para que no se hiciera daño ni quisiera cometer alguna locura. Su dolor era infinito, lloraba, gritaba y maldecía con la misma intensidad. Eso aumentaba más mi tristeza, t
(Jayden)Los que me rodeaban no estaban para nada felices, habían sido controlados por mucho tiempo y no lo olvidarían.—¿Sabes de cuanto hablamos, de perdida? —preguntó uno de ellos, pasando al frente, eran todas personas importantes y ahora pude reconocerlos mejor. Sus empresas nadaban siempre en la ilegalidad.Sabía que se refería al dinero.—Millones, algo que ni siquiera tú podrías devolvernos. Hemos perdido mucho dinero, joder. ¡Como demonios ha pasado esto! —gritó Maurice, con los ojos rojos, parecía próximo a atacar.Me apresuré a hablar antes de que las cosas siguieran saliéndose de control.—No es culpa mía, ella ha sido quien nos engañó a todos. Kat, el lobo de cobre… Ellos los han usado cómo soldados en la guerra. —tragué saliva antes de pronunciar el nombre de Keira, no era conveniente que la recordaran o podían intentar responsabilizarla por las perdidas.—Ahora nuestros negocios afrontan una crisis. ¿No te sabes lo que significa, Jayden? Podemos ir a la quiebra en cualq
(Keira)No podía describir con palabras el asco que sentía por este pozo. A medida que pasaban las horas, arrojaban más agua, para que el lodo fuera cubriendo mi cuerpo con más facilidad. Esto era lo peor que podían hacerme, el asco me hacía sentir que no había nada por hacer y no intentar mucho. Las alas no estaban ni cerca de salir, tenía los ánimos y la autoestima por los suelos.Kat venía y contaba historias, chistes y toda clase de cosas desagradables para que no me aburriera de su compañía. En lo que más pensaba era en Gala, mi pequeña indefensa que estaba bajo su poder.—Te preguntas por tu sobrina. ¿No es cierto? Bueno, yo no soy una cretina. Gala está bien, creo, no lo sé exactamente. Está yéndose del país en este momento, la adoptó una familia de otro sitio. Supongo que será muy feliz.Debía ser una mentira, no iba a creerme todo lo que me dijera. Pero estaba la posibilidad de que fuera real. Solté un sollozo al imaginar que no volvería a verla. Si se encontraba fuera del pa
(Zhang)Tenía que ser una broma, ahora Iker parecía haber perdido la cabeza por completo y eso, era lo peor que podía pasarnos. No esperé que pudiera caer en una depresión tan grande. Nos había encerrado y solo podríamos salir si peleábamos contra él o lo desafiábamos, lo cual no era para nada recomendable.—Tenemos que convencerlo para que peleé. —dije, Kal estaba allí, en una silla leyendo un libro como si quisiera ignorar lo que estaba sucediendo.—¿Qué dices? —preguntó Kal, con desinterés. —Ah, ya entiendo, pero no hará falta que te expliques, es una tontería. Mi hermano está sufriendo a su manera, no dejará que lo convenzamos ni tampoco, nos dejará salir.—¿Te vas a quedar aquí encerrado? —pregunté. —Yo me voy, Tyler se marchó, al igual que la manada de Robert. Ahora solo estamos nosotros y él parece estar loco.—Tu idea de manada es confusa. —respondió Kal, mirándome con desdén.—Explica tu insulto. —ordené, con ferocidad, no me gustaban en lo absoluto las indirectas.—Porque cr
(Kat)Mi humor no podía estar mejor ni, aunque me fuera de vacaciones a la playa. Tenía los ojos iluminados por el sol de la mañana. Despertar era un placer para mí, porque había salido victoriosa y faltaba tan poco para ganar del todo.Era una chica ganadora, en el espejo ahora veía solo eso. Mi fuerza recobrada por tener a esa Keira encerrada era implacable. Mis empleados me atendían constantemente y custodiaban mi lugar y el terreno, para que no hubiera ojos curiosos.Mi plan era más amplio que el del lobo de cobre y gracias a Iker, me di el lujo de contratar humanos. Ellos no sabían sobre los lobos, solo cumplían su trabajo y ya. Eso me dio una ventaja, Keira no lo habría visto venir jamás.Solo bastó con comprar la lealtad del cuidador de Gala para ganar la pelea. Ahora, el demonio se hallaba en el pozo de lodo y desechos, sin tener posibilidad de salir, alimentarse o ver siquiera la luz del sol. Eso me hacía sentir increíblemente realizada.Había pagado un precio, mi querido Nat
(Zhang)El grupo conformado no era una amenaza para nadie, eso era algo que admití apenas nos conformamos como equipo. No teníamos un alfa, eso era ya mucha desventaja, para ser que no sabíamos a lo que nos enfrentábamos.Habíamos conseguido un vehículo en el cual entrabamos todos. Era una camioneta roja con seis asientos, justo para Kal, Ema, Tyler y yo. Éramos los que estábamos dispuestos a buscar a Keira. Yo le había dado una pista a Jayden, pero no estaba muy seguro de que Kat se ocultara allí.—No sabemos a lo que nos enfrentamos. —aclaró Tyler, con su sarcasmo afilado de siempre. Parecía que no se preocupaba por nada. —No tiene por qué ser tan terrible. Es solo una chica que ni siquiera sabe transformarse en loba.—No la subestimes, Kat puede tener una estrategia, logró capturar a una demonio y eso no es poca cosa. —dijo Kal, que era el más consciente.—Tiene poderes muy extraños, todavía no sabemos cómo funcionan. Tienes que saber, que nosotros hemos experimentado mucho. —dije,
(Ema)Luego de ese viaje de cinco horas, parecimos estar por llegar al fin a nuestro objetivo. Mis sentimientos eran una mezcla tan extraña que no alcanzaba a distinguirme. Porque dentro de mi corazón latía el dolor profundo, junto con el miedo y el deseo de ayudar.Keira era importante para mí, ella no merecía estar en esa situación tan horrible. No quería ni siquiera imaginar las cosas que le estarían haciendo, porque la crueldad de Kat no tenía límites. Mi corazón me pedía ayudarla mientras atravesaba mi duelo, solo eso aliviaría mi dolor.Si cerraba los ojos, todavía podía ver a Greg junto a mí, como si su presencia no se hubiese extinguido del todo. El era un hombre maravilloso y un lobo con determinación. No habría nadie nunca como él en el mundo.No aceptaba la idea de que no volvería a verlo nunca. Si soñaba, él estaba vivo, despertándome por la mañana con sus bromas, jugando a nuestros juegos, en nuestra intimidad. Lo extrañaría para toda la vida.Por sobre todas las cosas, a