Esta noche la joven Camila ha bebido más de lo normal y se siente muy mareada, decidió ir al baño a hacer pipí y a refrescar su rostro porque se siente calurosa y no para de sudar y… y su apetito sexual ha despertado a tal grado que siente necesitar urgente de un hombre.
Su hermana mayor, que desde hace un buen rato la está espiando, decidió que era el mejor momento para actuar, se acercó a ella y la vio tambalearse, por lo cual de inmediato le ofreció su ayuda.— ¡Dios mío, hermanita! ¡Estás muy borracha! ¿A dónde vas tú sola? —Preguntó Tamara, la hermana mayor.— Voy al baño, Ja, ja, ja. —Balbuceó la chica, con voz de borracha.— ¡Ay, hermanita, yo te acompañaré porque es muy peligroso que tú andes solita por aquí, y además que te puedes perder entre tanta gente desconocida! —exclamó casi al instante la chica, fingiendo estar preocupada y ofreciéndole su ayuda.— No, tú no me acompañarás, prefiero ir sola que contigo. —respondió la chica que al final ya no podía ni mantenerse de pie por sí sola.La hermana malvada observó la hora en su reloj de muñeca y se preocupó cuando vio que ya pasan diez minutos de la hora que aquel hombre le indicó, por lo tanto, tomó de bracete a su hermana menor y la llevó hasta el baño y cuando ya estuvo lista la condujo hasta el segundo piso y buscó la puerta que está numerada con el mismo número de la tarjeta que el hombre le entregó.Sí, a quien el hombre contrató para que le sirva de dama de compañía por esta noche a su amigo, es a Tamara, pero ella no cumplirá a cabalidad con el trato, ya que el hombre le mencionó que su cliente está en una condición de salud deplorable y por eso quiere que pase sus últimas horas disfrutando de la compañía de una mujer.Pero ella no piensa tener relaciones íntimas con un moribundo, y por eso pondrá como carnada a su hermana menor. Jamás se le mencionó que ese tipo es uno de los hombres más millonarios en la ciudad, incluso a nivel nacional e internacional.Por otro lado, los amigos del hombre lograron que este se emborrachara a más no poder y también le pusieron una sustancia en la bebida para hacer que arda en deseos por tener a una mujer y luego se lo llevaron hasta la habitación que ya tienen reservada, su amigo le comentó que le ha pagado a una dama de compañía para que pase la noche con él, y aunque el hombre rechazó la propuesta, estos lo encerraron por la fuerza y se fueron, quedando solo su hermano junto con él, a la espera de la mujer.— Esta es la chica que te han contratado, mira hermano. —Dijo el chico y le entregó una fotografía de Tamara, pero como no sabe cuál es su nombre, no se lo mencionó. —Y no te preocupes por tu estatus en los negocios o en la sociedad, ella no dirá nada a nadie porque aquí tengo un acuerdo de confidencialidad listo para que ella lo firme. —le comentó el joven mostrando una hoja de papel que lleva en su mano.— Esto que me están a punto de hacer no se los voy a perdonar, y principalmente a ti hermano. Estoy seguro de que me han drogado para lograrlo, pero créeme que les irá muy mal a todos ustedes —balbuceó el hombre con mucha rabia y amenazándolo con el dedo índice.Por otro lado, antes de llegar a la habitación nombrada, Tamara dejó a Camila en uno de los pasillos y se apresuró a tocar la puerta con los nudillos de sus dedos, de inmediato el chico se apresuró a abrir, la chica pidió entrar, y con la poca claridad que hay en la habitación el hermano del hombre pudo comprobar que sí se trata de la misma chica de la fotografía, por lo cual la hizo pasar y le tendió la hoja de papel para que lo firmase.Ella de inmediato lo tomó y estampó una firma con un lápiz tinta bañado en oro que el mismo chico le proporcionó, pero no fue su firma la que colocó, fue la de su hermana Camila, ella ha usurpado esa firma sin ponerse a pensar que eso le traerá graves consecuencias.Entregó el documento y el chico salió de la habitación para ordenar que le hagan la transferencia bancaria a la chica por su servicio.A todo eso el hombre drogado ha entrado en el cuarto de baño, la desesperación por el fogaje que siente en su cuerpo lo ha hecho tomar un baño, y aunque se considera un tipo asquerosamente arisco para los lugares públicos, en esta ocasión no le quedó de otra que mojarse para que el efecto de la droga se le baje un poco.Segundos después de que Kervin, el hermano del hombre, salió, Tamara abrió un poco la puerta y se asomó, cuando vio que no había nadie por el pasillo, entonces se fue a traer a Camila y la ingresó a la habitación y cerró la puerta para luego salir corriendo del lugar y dejar a su hermana a merced de un desconocido.Cuando el hombre drogado salió del baño, se encontró con que la chica que le contrataron ya se estaba desvistiendo, también el calor la está desesperando y al ver una cama decidió recostarse sobre ella para dormir, ya que según ella, está en su casa y esta es su habitación. Sin embargo, el hombre no se dio cuenta de que no es la misma chica de la fotografía, ahora es otra, esta es Camila.Debido a la sustancia que les hicieron tomar, y con las ganas que tenían de apagar su ardiente fuego sexual, ambos se desvistieron y le dieron rienda suelta a lo que sus cuerpos desean, sin importar la condición física del hombre que en ese momento ella ni se enteró de que él usa una silla de ruedas, pero con mucha práctica subió a la cama.Los chicos aún siguen en el bar celebrando por la buena acción que han hecho, pero uno de ellos les alertó que hace unos instantes él venía del baño y vio que una chica idéntica a la de la fotografía iba bajando a paso rápido hasta el primer piso.— No creo que se haya atrevido a engañarnos esa perra, el depósito ya está hecho, por lo tanto, ya no hay tiempo para que se arrepienta.— Yo no me quedaré con la duda, voy a ir a asegurarme de que no sea ella, pero uno de ustedes vaya a buscarla abajo por las dudas, para evitar que se nos escape. —ordenó Kervin, el hermano del hombre al que han drogado.Kervin se fue a la habitación, despacio, entreabrió la puerta un poco y escuchó los deliciosos gemidos que del interior provienen, entonces la cerró nuevamente, pero esta vez utilizó la llave para ponerle seguridad y que no se escapara el uno ni el otro.También le comunicó a los que estaban abajo buscando a la chica, que no hay ningún intento de escape porque en la habitación los chicos se la están pasando a todo dar....
— No te olvides de darme el dinero que me prometiste por mi trabajo, Tamara. —Dice un mensaje de texto que alguien le envió a la malvada hermana mayor de Camila.— No te preocupes que mañana a primera hora lo tendrás listo para que lo gastes o inviertas en lo que tú desees. —escribió la chica y pulsó la tecla de enviar texto.En pocas palabras, no solo es la hermana de Camila la que le ha tendido una trampa, puede ser que una de sus compañeras de trabajo se haya burlado de ella, en fin, lo descubriremos en el transcurso.A la mañana siguiente Camila se despierta de primero y por lo frío que se siente su cuerpo trata de arroparse más, ya que es temporada de invierno y por lo cual ella siempre duerme muy abrigada y por eso se le hace muy extraño sentir lo helado de la madrugada.Con su mano busca la sábana para envolverse más, pero no la encuentra, y es entonces cuando abre del todo los ojos para buscarla y ve a un hombre que está dormido a su lado, él está boca abajo y completamente desnudo. Dirige su vista hacia su cuerpo y se lleva sus manos a la boca para ahogar el grito que sale de imprevisto de su garganta, ¡ella también está sin una prenda de ropa que le cubra su cuerpo!Sigue en busca de la dichosa sábana perdida, pero no la ve por ningún lado — ¡maldición! ¿Qué fue lo que me sucedió y quien será este hombre, y que hago en esta cama con él? —se pregunta en su mente, y es que son tantas las interrogantes que no sabe ni cómo va a obtener una respuesta para cada una de ellas.Al fin logró localizar
— Aléjate de mi vista, por favor. —le exigió Camila al hombre mientras trata de levantarse de sus piernas, pero este la acerca aún más a él, hasta que sus bocas quedaron muy cerca, casi pegados sus pechos y sintiendo sus respiraciones, bueno, quizá la de la chica era la que hasta se lograba escuchar porque estaba demasiado nerviosa y su corazón no paraba de brincar sofocado por la situación.— No putita, no creas que te volveré a follar. ¡Me das asco! —exclamó el hombre entre susurros, mientras sus labios rosan los de la chica cuando habla, casi mordiéndolos, ya que está demasiado cerca de su boca.Con un fuerte empujón la chica lo hizo hacia atrás y se levantó, él se empezó a reír a carcajadas, eso hizo que la chica se sintiera demasiado ofendida y maldijera internamente a quien sea que le haya hecho esa trampa.El hombre intentó abrir la puerta, pero tampoco pudo, a todo eso Camila estaba muy callada y ahora era él quien estaba muy desesperado por salir. Le volvió a acusar de ser la
— ¿Perdón? —¿Y usted quien se cree que es para venir a darme órdenes a mi lugar de trabajo? —preguntó ella con evidente furia al momento que levantó la vista, pero luego guardó silencio al toparse con la mirada de aquel hombre al que esta misma mañana como despedida le gritó unas cuantas palabras ofensivas, creyendo que jamás volvería a ver a ese maldito con el que se acostó aquella noche cuando alguien puso una sustancia en su bebida —¡No, no puede ser! ¿Este maldito hombre qué está haciendo aquí? —se pregunta ella en su mente al ver de quien se trata esa voz. — ¡Vaya!, la putita de la noche anterior, donde me la vine a encontrar trabajando como una santa inmaculada que no quiebra ni un tan solo plato en su casa, pero lo que nadie sabe es que te echas la vajilla completa, ¿verdad? — Mire viejo, en primer lugar me respeta porque yo no soy una puta, ya se lo dejé claro y también se lo logré comprobar aquella noche con mi… con mi tesoro rojo con el que se manchó la sabana. —En segundo
La chica se preocupó al escuchar esas palabras y de inmediato pidió aclarar el caso —¡Ay, no, señor! —por favor no me despida, yo le prometo que no soy así con los empleados y tampoco con nuestros clientes, si gusta puede preguntarles a todos los que trabajan aquí y ellos le darán una buena referencia de mí. —No es necesario que yo salga a preguntar a medio mundo como es tu comportamiento, suficiente con lo que he logrado ver y escuchar ahora. —Estás despedida, ve recogiendo tus cosas en este mismo momento. —Pues ni modo, ni que quiero trabajar en una empresa cuyo dueño es un maldito que quizá hasta me tomó en contra de mi voluntad, aprovechando que yo estaba drogada esa fatídica noche. —Ja, ja, ja, y quien te manda a que andes consumiendo sustancias si sabes que con el tiempo te pueden traer consecuencias. —¿Tú crees que te voy a creer esa mentira de que estabas drogada? —Tú estabas en todos tus cabales, allí quien estaba drogado era yo. —alegó el hombre. —Me largo de aquí, no pie
En la oficina se siente un ambiente tenso, el hombre ni siquiera le ha dirigido la mirada y mucho menos la palabra, está enfrascado en su celular, seguramente dando órdenes por doquier, de cómo desea que le hagan sus trabajos sucios los peones. La muchacha está muy nerviosa, sabe que a sus padres no les importará en lo absoluto que ella haya aceptado casarse con ese hombre, o quizá sí les importe en esta ocasión y se molesten porque ya no tendrán a la tonta quien les dé dinero para mantener la casa y sus vicios del padre que se mete a apostar en los juegos de azar el dinero que le quita a ella, sumando las compras un poco exageradas que hace su mamá y su hermana con el poco dinero que ella gana. La pobre Camila queda prácticamente en cero cuando recibe su pago el fin de cada mes, todo lo trabaja para su familia, para lo único que a ella le queda es para pagar el transporte que la traslada hasta la empresa donde trabaja. — Señor, me permite hacerle una pregunta. —solicitó temerosa de
El abogado Kervin se marchó de la oficina, Nataniel le informó a la chica que se prepare porque dentro de dos días dará una conferencia de prensa y ella deberá de estar a su lado y fingir que de verdad están comprometidos desde hace varios años. — Todo tiene que salir bien ese día, lo único que tú tendrás que hacer es verme con ojos de amor mientras yo esté hablando con los periodistas, al final de mi discurso tú tendrás que darme un beso, debemos de ser cautelosos para que todo parezca real, tienes que prepararte para fingir bien, aunque creo que no necesitas practicarte porque ya eres una experta en hacerlo. Si eres de las personas que sufren de nervios cuando están frente a una cantidad indeterminada de personas, deberás de comprar calmantes para ese momento. Recuerda que quiero que todo salga a la perfección, no quiero que cometas ni un tan solo error de tu parte. Tendrás que fingir ser una dama de la alta sociedad, no quiero que me vayas a avergonzar ese día frente a medio mund
Hoy es el día que se llevará a cabo la conferencia de prensa que ha preparado el señor Nataniel Kaffati, con el fin de aclarar los rumores y bueno, también mentir por su parte al decir que la muchacha de las fotos es su prometida y no una prostituta como ellos mismos la han catalogado. Cuando Camila se presentó ante él, notó que el hombre se puso serio y le hizo una mirada rara y retadora, ella cree que lo hace por la tensión del momento, pero no es así, el hombre se acercó hasta ella en su silla de ruedas y la cuestionó de inmediato. — ¿Por qué no te has venido con el vestido que te envié? —habló el hombre apretando los dientes por el enojo. —Eso sí que le cae mal a él, que no hagan las cosas como él las indica. — ¿Cuál vestido?, no entiendo a lo que se refiere. —Preguntó con el ceño fruncido y sus labios temblorosos. — El vestido que ayer te envié a tu casa. —Ese vestido que traes está horrible, debiste de tallarte el que yo te envié para tal fin. ¡No te ves nada agradable con lo
Nataniel subió el volumen del audio para escucharlo mejor, — ¡Qué te has creído m*****a perra! ¿Dónde te has metido? Se supone que hoy ibas a anunciar tu compromiso con el hombre al que te vendí, te hemos estado esperando casi todo el día y tú no apareces, incluso llamé a tu comprador y me dijo que él no ha quedado de reunirse contigo. — ¡Ven a casa de inmediato, eres una mentirosa! ¿Quién fue el que te envió un vestido junto a una nota? —Creímos que era el hombre al que te vendí, pero no es así. —¡Ay de ti Camila, si te estás viendo con otra persona y te estás burlando de nosotros! —Vuelve a casa de inmediato y ya verás lo que te espera. Decía aquella voz masculina que destellaba odio y enojo en contra de la pobre Camila. El señor Nataniel se quedó pálido y con la boca abierta por todo lo que ese señor le ha dicho a su prometida —¿A caso es cierto lo que ella me comentó, que en su casa no la quieren? ¿Cómo es eso de que a ella la vendieron a un hombre, si ya está comprometida conmig