Capítulo 23

De nuevo al trabajo

Me duché y fui a mi armario de ropa, estaba nerviosa, pero respiré hondo y saqué uno de mis vestidos favoritos, exactamente el que Alessandro me había dado.

Me quité la toalla para empezar a vestirme, pero la puerta de la habitación se abrió de par en par, vi el reflejo de Alessandro a través del espejo, me sentí avergonzada así que cubrí mis partes íntimas con las manos, pero parecía que Alessandro lo estaba disfrutando.

"Lo siento", dijo, pero no se movió de allí, yo estaba furiosa y le pedí que saliera, que si quería entrar en mi habitación tenía que llamar a la puerta.

Alessandro salió de la habitación mientras mi cara se sonrojaba, ningún hombre había visto mi piel desnuda, así que me vestí apresuradamente para ir a la oficina.

Bajé los escalones para irme, en el comedor ya estaba Alessandro que tenía una sonrisa malvada en su rostro, pero me sentí un poco avergonzada, así que evité el contacto visual.

- ¿Estás segura de que te sientes lista para ir a la empresa?, aún no te has recuperado del susto del secuestro. Me dijo mientras continuaba con su sonrisa pervertida en su rostro.

"Ha pasado más de una semana de eso, tengo que saber cómo va todo en la empresa, me temo que alguien está malversando fondos", le dije con una sonrisa burlona.

- ¿Dudas sobre tu marido? Dijo, cuando se acercó a mí y me tiró fuertemente en sus brazos, sentí que mi piel se erizaba. Así que lo besé y le pedí que se fuera.

Tomé mi bolso y salí con él, estaba feliz, no era suficiente para mí verlo en la casa, también quería verlo en todo momento en la compañía.

"Esta vez estoy conduciendo", dijo Alessandro y me pidió las llaves, no tuve ningún problema con eso, así que se las entregué.

Después de llegar a la empresa vi una gran cantidad de gente haciendo cola, tenía curiosidad, así que me acerqué a uno de los guardias de seguridad para preguntar qué pasaba.

-Son personas que vienen de la capital buscando trabajo, escuché que algunas personas están emigrando aquí, la capital está muy peligrosa, dos familias de los más poderosos se están enfrentando.

- ¿Qué familias? Alessandro preguntó con frialdad.

-La familia Willson contra los Hunters. El guardia de seguridad respondió.

Vi que la expresión en el rostro de Alessandro cambió mucho, así que me acerqué a él para ver si estaba bien.

- ¿Conoces a alguna de esas familias? Le pregunté confundida, pero él negó con la cabeza y dijo que siguiera caminando.

Me di la vuelta para ver al guardia de seguridad y pedirle que me pasara a esas personas para entrevistarlos, con el nuevo acuerdo necesitaríamos más personal.

"Alessandro espérame", grité y caminé tras él.

- ¿Estás seguro de que estás bien? Sabes que puedes decirme cualquier cosa, le dije al ver que estaba un poco molesto, pero solo negó con la cabeza.

Mi asistente personal

No quería insistir más, así que fui a la oficina, me senté en la silla del CEO para revisar algunos documentos, pero ansié una taza de café que le pedí a mi asistente.

-Aquí está su taza de café jefe, mi asistente Alessandro me dijo con una sonrisa mientras me abrazaba, pero sentí que con él no me concentraba en mi trabajo, así que le pedí que fuera a trabajar a otra área, pero se molestó y se fue a trabajar a una máquina de coser con los trabajadores.

Alguien llamó a mi puerta, le dije que entrara, él era una de las personas que buscaba trabajo.

Con mucho trabajo duro logré entrevistar a toda la gente, di un suspiro de alivio, pero de nuevo llamaron a mi puerta.

-Señorita, falta alguien que viene para el puesto de supervisor. Uno de mis empleados de recursos humanos me susurró.

"Qué pase ", dije mientras escribía en mi computadora, "una joven elegante y bien vestida entró y me saludó cortésmente.

-Hola señorita, vengo para el puesto de supervisor.

-¿Tiene experiencia en el área?

"Sí, también soy graduada de la universidad de mi ciudad", dijo mientras sonreía amablemente, vestida con una chaqueta de cuero y una falda ajustada por encima de la rodilla, cruzó la pierna elegantemente mientras me alcanzaba su currículum.

Eché un vistazo al currículum y ella tenía muy buenas referencias, era perfecta para el puesto.

- ¡Señorita Dania Morgan, verdad! Su currículum es impresionante, si tiene disponibilidad puede comenzar mañana, solo tiene que traer algunas pruebas médicas y sus antecedentes.

Ella me sonrió con un signo de felicidad en su rostro, mientras me agradecía. "Te prometo que no te arrepentirás, señorita", me dijo mientras se levantaba de su silla y salía de la oficina.

Estaba cansada y lo único que quería era ver la cara de Alessandro así que salí a buscarlo para invitarlo a almorzar, pero cuando llegué vi que la joven que acababa de entrevistar se le acercó.

Sabía que era una chica muy bonita, así que me puse celosa y me acerqué en silencio para escuchar su conversación.

-Alessandro, ¿eres tú? Dijo con una cara sonriente.

La reconoció al instante.

-Hola, Dania, en serio eres, has cambiado mucho. Respondió seriamente Alessandro.

-cómo no voy a cambiar, haberte dejado fue la mejor decisión, solo mira ahí, un simple trabajador mediocre, en cambio mi marido Mario tiene su propia frutería, pero qué más se podría esperar de ti si eres el hijo de una vieja panadera adicta al juego.

"Deja de hablar de mi madre y mejor dime cómo está.

-De qué otra manera va a estar una anciana, jodida, tiene muchos prestamistas detrás de ella queriendo matarla porque les debe una buena cantidad de dinero.

Alessandro puso cara de molestia, cuando di un paso para ir donde ellos, observé que aún no habían terminado de hablar.

-ahora seré tu jefe Alessandro, pero tranquilo que si te arrodillas y me llamas bebé haré que tu vida no sea tan mediocre en esta empresa. Dijo mientras dejaba escapar una risa llena de odio.

No pude soportar ver a esta bruja humillar a mi esposo, así que me acerqué para ayudarlo.

-Qué pasa mi amado esposo, porque hablas con la chica que contraté para lavar los baños. Dije mientras ella me miraba sorprendida.

- ¿marido? Espera, ¿es ella tu esposa Alessandro? Preguntó incrédula mientras las lágrimas se formaban en sus ojos.

Alessandro se rio a carcajadas, mientras la miraba con mucho desdén.

-Mi esposa, entonces contrataste a esta chica para lavar los baños, me hubieras consultado, las mujeres tan mediocres no son dignas ni para lavar las nalgas de los viejos, te exijo que la despidas inmediatamente.

Volvió su mirada hacia mí con una cara asustada mientras sus lágrimas comenzaban a rodar por sus mejillas.

-Señorita por favor perdóname, yo no sabía que Alessandro era su esposo, no me corra de su empresa por favor, tengo tres hijos que mantener ya que mi esposo se fue con otra mujer más joven que yo.

La vi y sentí su dolor, así que pensé en darle una segunda oportunidad, me acerqué a ella y le dije bruscamente: "Si te arrodillas ante mi esposo y le pides perdón por las cosas feas que dijiste sobre él y su madre, te perdonaré y te dejaré trabajando como la señora que limpia los baños.

Se secó las lágrimas y volvió la cara hacia Alessandro, poniéndose roja de vergüenza y arrodillándose ante él.

"Perdóname, no me encanta lo que dije sobre ti y tu madre, por favor no me guardes rencor.

Alessandro soltó una carcajada muy fuerte, -está bien, que trabaje limpiando los baños, lo consideraré un regalo mío por nuestra antigua relación.

Ella asintió y salió secándose las lágrimas.

Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo