Capítulo 31

Inversores

Llegó la noche y me puse mi esmoquin Kiton del diseñador Enzo D'Orsi con una corbata negra que me regaló mi esposa, me puse mi reloj Rolex y los zapatos Tommy Hilfliger, estaba listo para comprar la mayor cantidad en acciones, miré de reojo alrededor de la habitación de Mayelin y llevaba un hermoso vestido negro ajustado al cuerpo, mis ojos se maravillaban cada vez que la veía y dejaba escapar un suspiro.

-Sé que estás ahí espiando a través de la cerradura, así que entra si quieres, dijo molesta mientras me miraba a través del espejo, asentí con la cabeza como lo sentía.

- ¿Es el vestido que compraste hoy? Dije con una mirada llena de travesuras.

-Si lo compré hoy, ¿te gusta?

Me acerqué a ella y la agarré por la cintura tirando de ella hacia mí.

"Sabes que todo sobre ti es perfecto, no necesitas pedir mi opinión", le dije mientras llenaba su cuello de besos, pero María volvió a entrar en la habitación.

"Lo siento señor, pero ya era hora, todos los demás inversores están en la sala de convenciones.

Asentí y tomé a Mayelin de la mano y fuimos allí, entramos en la sala principal donde muchos hombres y mujeres prestigiosos ya estaban reunidos hablando entre sí mientras compartían champán y vino.

No tenía muchos conocidos, pero al parecer Mayelin sí, rápidamente comenzó a presentarme a personas importantes y así comencé a comprar más y más acciones, en cuestión de una hora había sido un verdadero éxito para mí, ya tenía más del 70% de acciones adquiridas, prácticamente ya era el CEO de ese gran hotel, la noche no podía ir mejor hasta que apareció alguien inesperado.

"No pensé que fueras tan descarada al venir aquí, sobrina. Una voz aguda dijo, así que ambos nos dimos la vuelta para ver quién era, y si era el tío de Mayelin, Michael, quien representaba a Smith Industries, cuando Mayelin fue desterrada de su familia, tomó el control de Smith Industries.

"Hola tío, buenas noches, no sé a qué te refieres con tus palabras", dijo Mayelin con tristeza.

-Este es un evento para comprar acciones, no sé cómo dos personas sin hogar lograron burlar la seguridad.

- ¿Cómo estás tan seguro de que somos indigentes? Dije mientras lo miraba.

-Tu m****a cállate, Mayelin ya nos dijo que te contrataron por mil dólares, que te encontraron recogiendo unos cartones para dormir en el callejón, solo mírate con ese traje que desde lejos puedes ver que es una imitación, valorarte y dejar de avergonzar a los demás es mi consejo.

Mayelin estaba molesta al escuchar a su tío y cuando iba a hablar la interrumpí, fui a su oído para susurrarle.

-Que diga y haga lo que quiera, al final somos solo nosotros dos y nadie más, le dije al oído y la tomé de la mano para sacarla de allí, pero el tío de Mayelin siguió hablando.

"No seas tan desvergonzada Mayelin, mírate, eres la vergüenza de la familia, tu madre vive escondida como una rata después de tal atrocidad que hizo, hizo que pusiera un cerdo asqueroso en la familia Smith, deja que todos en esta habitación escuchen el tipo de escoria que ustedes dos son. Michael gritó mientras se burlaba y bebía su copa de champán.

Al escuchar las palabras del tío de Mayelin, volví mi rostro ligeramente hacia ella para ver si estaba bien, pero sus ojos estaban llorosos.

"Cálmate Mayelin, ayudaré a tu madre", le dije mientras le daba un abrazo para consolarla.

-Salgamos de aquí Alessandro, no quiero estar en este lugar con este hombre, me dijo su suave voz entre lágrimas, asentí y la tomé de la mano hasta que escuché que una copa se estrelló en la espalda de Mayelin, haciendo que saliera sangre de su espalda, me quité el esmoquin por completo para usar la camisa que llevaba puesta en el centro para colocarla en la herida de Mayelin haciendo presión para que no continuara sangrando.

- ¿Estás bien Mayelin? Le pregunté mientras presionaba su herida, sentí que mis ojos se llenaban de sangre por lo enojado que estaba, mientras que no me importaba estar medio desnudo cuando todos comenzaron a murmurar.

"Estoy bien, es solo una herida superficial, vamos a nuestra habitación.

"No, vamos al hospital", le dije, pero ella negó con la cabeza.

-Fue solo un pequeño corte vamos a la habitación.

"Todos estamos bien", dije, "pero uno de los guardias vino corriendo con un botiquín de primeros auxilios, llevé a Mayelin a una esquina y comencé a curar su herida sin apartar la mirada de su tío.

Narrativa Mayelin

Estaba feliz y emocionada de volver a ver a Alessandro, extrañaba vagamente su forma única de tratarme y sus ojos intensos que me atrapaban y no me dejaban escapar, cada vez que me veía sentía como si entrara en un bosque del que no podía salir.

Esa noche me puse un hermoso vestido que vi en la tienda cuando fui con María, la asistente de mi esposo, aunque la verdad me puso celosa ver la cercanía de Alessandro con ella, era una mujer demasiado hermosa y temía que Alessandro ya no tuviera ojos para mí.

Esa noche salí con Alessandro a comprar acciones, pero tuve un encuentro inesperado con mi tío que parecía furioso conmigo, pero me hice la pregunta de ¿por qué? ¿Por mi madre? O tal vez fue porque yo fui el presidente en lugar de su hijo.

Tiró una copa y me la estrelló en la espalda, viendo la reacción de Alessandro supe que lo primero que haría sería tirarse sobre él y golpearlo hasta matarlo, así que lo tomé de la mano y le dije que todo estaba bien, aunque me dolía hice todo lo posible para apaciguarlo y tranquilizarlo, Sabía que no era conveniente montar una escena frente a todos los demás inversores.

"Estoy bien, vamos a la habitación Alessandro, dije al ver sus ojos rojos cuando vio a mi tío, pero apareció un guardia y nos entregó un botiquín de primeros auxilios, también me sorprendió que Alessandro se desnudara para curar mi herida, aunque me sentí celosa al ver las miradas de las otras mujeres en él, Sabía que había muchas mujeres hermosas y solteras que venían a esos eventos para tratar de ligar con algún riquillo, y aunque sabía que Alessandro no era un riquillo no descartaba que las mujeres se acercaran a él por qué era muy atractivo.

Después de que mi herida sanó, tomé la mano de Alessandro y lo llevé a la Suite de lujo que pagaba su empresa, yo era de una familia con dinero, pero nunca antes había estado en una suite tan lujosa, sus lámparas plateadas con esa lámpara de lava que iluminaba la habitación, esa habitación que era inmensa y una docena de empleados solo para servirnos, Me quedé asombrada.

Cuando llegué a la Suite después de lo que pasó con mi tío llevé a Alessandro a la habitación para que olvidara lo que pasó, puse mis manos alrededor de él y lo tiré sobre la cama, luego comencé a desnudarme, pero Alessandro no quitó esa mirada aterradora de su rostro, viéndolo así tuve miedo, Sabía que no era un pan de Dios después de vivir en las calles, pero aún sabía que no podía controlar su mal genio, tenía que hacer algo para ayudarlo.

"¿Ya no me quieres?" Le pregunté cuando vi que no hizo contacto visual conmigo.

"Sabes que te amo, pero en este momento no puedo concentrarme, no me gusta lo que hizo tu tío, debo enseñarle a respetar a mi esposa", soltaron sus labios mientras sus manos temblaban.

"Alessandro estoy bien, mírame, no me pasó nada, así que olvídalo ahora y hagamos algo gracioso.

"¿Quieres que haga desaparecer todo su negocio familiar?" Dijo mientras me miraba, sentí un escalofrío recorrer todo mi cuerpo mientras tragaba.

-Estás loco, mi padre y mi abuelo todavía dependen de esa compañía, mi tío solo está molesto conmigo por eso se comportó así, pero es una buena persona.

Observé cómo Alessandro se reía entre dientes después de escuchar que mi tío era una buena persona, así que la curiosidad entró en mí.

¿Por qué te ríes? No crees que mi tío sea una buena persona

"Creo que es demasiado tarde, debemos dormir", dijo Alessandro mientras miraba su Rolex en su muñeca.

Asentí con la cabeza cuando vi la cara molesta de Alessandro, me sentí decepcionada, así que fui a la habitación contigua, cerré la puerta mientras sentía algunas lágrimas saliendo de mis ojos, fui al armario a ponerme el pijama y me fui a dormir, fue entonces cuando escuché que mi puerta golpeaba, corrí a abrirla pensando que era Alessandro quien se iba a disculpar, pero solo María estaba un poco o demasiado borracha.

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