Narra Helen.

Han pasado varios días desde que nos mudamos a este apartamento. Yo he comenzado de nuevo con mi trabajo, y mi madre ha hecho amistad con el portero, está mejor y se la pasa hablando con el día y noche, eso me agrada mucho, porqué no se siente sola y es lo importante.

En cuanto a Dylan junior está mucho mejor, le quitaron la venda de su cabeza y su semblante pálido ya es historia, y eso es gracias a los millones de jugos y vitaminas que le hemos dado, como siempre Dylan comprándolo con un juguete, tiene la habitación lleno de ellos. Se la pasa mimando, llevándolo a ver películas y comprándolo todo lo que a él se le antoje. Yo le digo que lo va a malcriar, pero el sigue igual diciendo que si no lo malcría el quién lo hará, además de que quiere recuperar el tiempo perdido; en ese momento no tengo que responderle porque aún cuando lo recuerda me mira con ganas de asesinarme.

Dylan hoy nos invitó a una fiesta de gala. La noticia de que tiene un hijo y que ya camina es noticia