Después de leer los documentos que se les fueron entregados, Oleh firmó, los observó y dijo: —Tienen razón, mi sobrina es nuestro orgullo y si ustedes creen que está preparada, ¡lo está! No se hable más del tema, dijo, colocándose de pies para salir de la sala.
Sabía que podía contar contigo en esta decisión —dijo Iryna sonriendo, ya que su cuñado ha sido un gran apoyo para ellos a lo largo de su relación. Ya le comunicaron a la niña la decisión tomada —preguntó Oleh, parado en la puerta con la perilla de la misma, en su mano. —Sí, ya está al tanto de la decisión, en estos momentos están solucionando algunos problemas en la compañía de Iryna, haremos un banquete situando a periodistas para anunciar a la nueva CEO de Ucrania —respondió Boris cerrando la carpeta y entregándola al abogado. Oleh salió inconforme con la decisión de su hermano, pero no se lo iba a hacer saber. Se dirigió a la oficina de su hijo intentando calmar su inconformidad, llegó a y preguntó a la secretaria si se encontraba su hijo allí y ella le confirmó que sí dirigiéndose él adentro de la oficina. Cuando ingreso su hijo se encontraba con mil papeles en el escritorio y este bufo de lo aburrido que le parecía su hijo. —Ya estás enterado de la decisión tomada por tus tíos, preguntó sentándose en el borde del escritorio. —Si es del nombramiento de Sharon si ya lo estoy, se lo ha ganado con mucho mérito, respondió sin quitar su vista de los documentos que estaba revisando. —No pareces, hijo mío, estos papeles te enloquecerán, dijo, levantándose del lugar para salir de la oficina de su hijo. —Debo hacerlo, ya que trabajo por dos, debido a que tú no quieres trabajar y debo arreglar tus errores, dijo Iván alzando su vista para ver el cinismo de su padre. Oleh no respondió nada y salió arrojando la puerta con fuerza a su espalda. La fidelidad de su hijo hacia su tío lo irritaba. De gran manera, sacó su celular y marcó un número, sonó dos veces y fue contestado. —se adelanta la venta, tomen el producto de inmediato —dijo colgando de inmediato sin dar oportunidad a la persona del otro lado, reaccionar. Se dirigió a su oficina por su saco para salir a buscarle solución al problema presentado para él. En el presente, Sharoth acostada en el suelo con su rostro doliendo por los golpes recibidos, escucha un ruido a un lado de la cama y percibió que a lo alto había una pequeña ventana que no la logró ver anteriormente, y por la cubierta que tenía se levantó corriendo. Se encontraba bastante alta, así que agarró la mesa y la rodó hacia el lugar, se subió, pero aun así no llegaba a la ventana. ¿Por qué debo ser tan pequeña? — sé crítica enojada. Se bajó de la mesa y fue por la silla, y la colocó para hacer más alta la pirámide que quería realizar. Con la silla pudo alcanzar, dándose cuenta de que se encontraba en un barco. Pudo darse cuenta de que a la distancia varios barcos los perseguían a gran velocidad, y la llenó un poco de aliento, asomada en la pequeña ventana donde su cabeza no pasaba, empezó a gritar. ayudaaaa, aquiiii,,, auxilioooooo gritaba con fuerza, al ver que de allí nadie lograría verla bajo rápido resbalando y cayendo de la mesa se golpeó muy fuerte la rodilla, quedo en la posición caída por varios segundo, pero se levantó a buscar una toalla blanca que se encontraba en la ropa que había visto anteriormente. Volvió a subir la pirámide armada con un poco más de cuidado debido a que no se quería lastimar, cuando estuvo nuevamente arriba sacó una mano con la toalla y empezó a sacudirse y a gritar; ayudaaaaaa ayudaaaaaa aquiiiii, auxilioooo ayudaaaaaa gritó con gran voz, metió la mano y asomó su cara a ver si alguien la lograba ver. Pero cuando lo hizo, se llenó de asombro, ya los tenían cerca, eran barcos de Ucrania y ella sabía que la habían subido a uno ruso. Una ráfaga de disparos empezó a caer de ambas partes. Gritos de ataques y gritos de mujeres salían de abajo en donde ella se encontraba, gritos de ayuda, auxilios y terror salían como pudo. Volvió a hablar y se tiró al piso para ver si lograba escuchar algo desde allí. Así fue desde ahí, logró escuchar los gritos de terror de mujeres y niños, empezó a golpear desesperada el piso, holaaaa como se encuentrannnn, volvió a colocar el oído, pero solo podía escuchar gritos de desesperación y las balas no cesaban, era un caos. El barco empezó a ladearse de un lugar al otro, sin embargo, se colocó de pies y volvió a subir para volver a asomarse en la ventana. Vio que los ataques eran sin contemplación de ambas partes. Muertos se veían flotar en el agua gritos de insultos salían de los hombres que combatían no era de extrañar porque ambos países estaban cruzando por una guerra, pero como podían atacarse de tal manera ¿o es que no tienen familia?, ¿no se ponen a pensar en el dolor de sus esposas, de sus madres, el sufrimiento que le dejaran a un niño huérfano?, el mundo ha perdido la esencia, la prudencia y el amor al prójimo. Deténgase hay niños en la embarcación parennnnn hay niñooooosss parennnnn al ver que sus gritos no son escuchados, empezó a dar puños a las paredes por la inconformidad que sintió, cuando vio que un ataque de una gran arma, venía hacia ellos ocasionando un estruendoso ruido haciéndola volar por los aires, del mismo impacto, cayendo a la distancia de donde se encontraba subida. Ya a punto de perder el conocimiento sin poder mover su cuerpo, el recuerdo de cómo fue secuestrada empezó a llegar a ella mientras su rostro era testigo del sufrimiento, no únicamente físico sino en lo profundo de su corazón, por la persona causante de lo que estaba viviendo.Sharoth, salió de la empresa de su madre y se dirigió al auto, donde se encuentra el conductor con la puerta abierta esperando. —Cómo sigues, Marcos, ¿qué tal te fue en casa?—pregunta amablemente al hombre de mediana edad. —Bien, mi niña, hay que tenerle paciencia a esta juventud de ahora —responde mientras ella ingresa al auto y él cierra la puerta. Rodeó el auto para ingresar al mismo, en el asiento del conductor. —Tranquilo lo están haciendo bien —dijo dando ánimos al hombre, mientras sacaba su laptop y se puso a trabajar desde el auto. —Gracias por estar pendiente, usted es una maravillosa joven, un orgullo para sus padres —dijo el chófer con una genuina sonrisa de gratitud, la cual fue correspondida del mismo modo. Ella empieza a teclear y su celular sonó, miró quién era, sonrió y contestó. —Supongo que ya te llego la invitación —afirmó Sharoth sin saludar a su amiga. —¡Así mismo! Quiero una explicación, ¿por qué tan de repente esa reunión? —preguntó agitada del otro lado
—Señor, ya seso el ataque entre las dos flotas, procedemos con el saqueo —preguntó el joven mirando a su jefe, el cual observaba al horizonte en medio de la noche, como los disparos alumbraban como juegos artificiales en el tosco mar. —¿Son embarcaciones militares o carroñeros? —preguntó sin quitar la vista de su objetivo, mientras apretaba una bola de hule que sostenía en su mano. —El destruido, carroñero con posible, código 39, y el que va huyendo de la armada de Ucrania, explicó Nikolay quién iba llegando y se sentó al lado del hombre. —Embarquemos —ordenó Dmitri mientras lanzaba la bola a su amigo, quien la atajo en el aire. —Sí, señor —respondió el chico que hablaba anteriormente, dando la vuelta para salir de allí. —¡Preparado! —preguntó Nikolay sosteniéndolo por el hombro. —Siempre —respondió secó y sin expresión alguna por el hecho de un código 39. Salieron de allí y se dirigieron a la cabina del capitán para dirigir su destino al barco que se encontraba totalmente dest
—Ya escucharon, giren a babor —gritó Dimitri, agarrando el timón del barco, girando, dando todo de sí, cambió el curso que llevaban. El inesperado giro puso a que toda la embarcación estuvieran atentos. Nikolay llegó corriendo a darse cuenta de qué era lo que ocurría, ya que no se encontraba cerca debido a que se había quedado pendiente de la salud de la chica encontrada. —¿Qué ocurre? —preguntó al momento de llegar desesperado. —¡Militares!!! —respondió Dimitri sin quitar sus manos del timón hasta que la maniobra estabilizó el barco para seguirsu cursó. Nikolay, agarró la bocina y marcó a Celeste, al instante esta respondió la llamada —Sigan el curso que acaban de agarrar, ¡No sé qué sucede!, pero esta noche los equipos y las personas han enloquecido, hasta la madrugada, lo mejor es pasar desapercibido, sigan hasta la zona pesquera unas tres horas allí bastará, cualquier eventualidad les estaré avisando esperen mi llamado, no me llamen —terminó de decir colgando la comunicación s
—¿Qué dices, tía? — preguntó sacando su celular y marcó el número de su prima saliendo este apagado. Alzó su vista y, al ver la cara de preocupación de sus tíos, comprobó que no era broma.—¡Ya lo hemos intentado! Marcos está muerto, dijo Felip, el jefe de seguridad.Todos bajaron las escaleras ante la mirada atenta de los trabajadores que no entendían, ¿él por qué?, la repentina cancelación del evento. Iván salió en su auto como el alma que lleva el diablo al tener la dirección de los hechos.Minutos después llegaron debido a que la emboscada no fue lejos de la mansión. Pudo ingresar el anillo de seguridad impuesto por los hombres de seguridad para que los medios no alteren la escena, porque en la entrada de la calle había un guardia de la mansión.Iván llegó, bajo rápidamente del auto, a ver con sus propios ojos la escena y, así como lo había dicho Felip, el cuerpo de Marcos se encontraba sin vida en el automotor. Los padres de Sharoth llegaron atrás de él. El perito, al ver a la f
En las costas de Rusia, Dimitri está esperando indicaciones de Celeste, para poder moverse del sitio en donde se encuentran.La llamada llegó, Nikolay fue y contesto colocando el altavoz para que todos escucharan lo dicho:—¡Pueden moverse!, dirijan el curso hacia los islotes. Algo grande pasó en Ucrania, donde llegaron códigos de un antiguo hacker que se había pensado había muerto. Algo grande pasó, se quedan en aquella posición hasta nuevo aviso, comunicó, cortando la llamada como siempre, sin dejar que nadie hablara ni la interrumpiera.—Cuanto odio a esa mujer bufo Nikolay ayudando a colocar el nuevo cursó intentando no pensar en esa altanera mujer. Dimitri salió para dirigirse a la habitación de la misteriosa mujer a donde Mikhail, el doctor, unos minutos antes se había dirigido, temiendo que la chica se despertara en el lugar donde se encontraban y pudieran meterse en un problema. Llegó y abrió la puerta sigilosamente, encontró al Mikhail parado en una ventana que se podía ver
Dimitri llegó rápido a la cabina colocando su camiseta —Que nos tienes Celeste —preguntó rápidamente mientras Nikolay y Mikhail llegaron tras de él.—Hay una embarcación muy cerca de ustedes, son traficantes, asesinos, no merecen lo que llevan, así que iremos por ellos y, como dicen que ladrón que roba a ladrón tiene mil años de perdón, yo quiero ser perdonada, dijo riendo del otro lado de la línea. —Guao, guardare este momento en lo más profundo de mi memoria, para no olvidar que sucedió ¿y tú sonríes? —preguntó Nikolay a la chica atrás de la línea, acercándose a Dimitri. —Les envié las coordenadas, dijo, colgando la comunicación como siempre, ignorando la pregunta hecha, por Nikolay.Nikolay, no se extrañó de la acción realizada por ella, ya estaba acostumbrando a su ignorancia, bufa mientras espera en el monitor las coordenadas, las cuales llegaron en ese mismo instante. Nikolay colocó el curso enviado y salieron tras el cargamento, que había interceptado Celeste.—Veremos a ve
¡Ayuda!!! ¡auxilio!!! saquenme de aqui!!! ayuda!!! saquenme!!! gritó desconcertada golpeando la puerta del lugar donde se encontraba apresada, arremetió a puños y patadas esperando que algo en el lugar se moviera, o almenos alguien escuchara sus gritos.Pero nada pasaba sus gritos no eran escuchado, y no escuchaba nada afuera de las paredes que la rodeaban. ¿Donde estoy, que quieren de mi? ¡saquenme!!! volvió a gritar sin dejar de repetir el acto de golpes en la puerta, sus manos empezaron a doler por la acción y se detuvo recostó su frente en la puerta y preguntó en un sollozo, ¿por que me hacen esto?.Empezo a sentir impotencia, y lágrimas salieron mojando su delicado rostro, sintió inútil su acción de seguir golpeado y miles de preguntas y reproches empesaron a llegar a ella, ¿Por qué me pasa esto a mí? Se preguntó en medio de llanto y volvía a golpear la puerta, pero esta vez sus golpes eran suaves y delicado, estaban llenos de impotencia y casi de resignación. ¿Que alguien me
El humillado hombre, sacudió el cuerpo de la joven tirándolo al suelo y se puso de pies al lado de los recién llegados —¡Espero sea importante o se van a arrepentir! —dijo frente a los rostros de los jóvenes, volteo sin mirar atrás y emprendió camino a la salida con todos los demás detrás de él, serrando nuevamente la puerta. Dejándola tirada con lágrimas corriendo por su rostro, la tristeza invadió todo su ser. No podía entender como su vida dio tal giro, tirada allí en suelo, empezaron a llegar recuerdos de la última conversación que sostuvo con sus padres. RECUERDO... Marcus daba besos en las mejillas de su hija y decía —"Sharoth Usanova" la joven de veinticuatro años, dedicada a sus estudios, comercio mercantil y administración de empresas. "Ejemplo a seguir" a su corta edad ha dado todo de ella para llevar a cabo el legado de sus padres, los empresarios, Iryna Yvanova y Boris Usanov. Los cuales, a su avanzada edad, han decidido ceder su imperio a la joven chica, ¡que ahora!,