Capítulo I
La boda.
Neptuno Wolf
Era un día muy especial para mí, recordaba de forma muy clara que hoy era el día de mi matrimonio, me iba a casar con Melinda Milet, había planeado mi boda hace varios meses atrás, tenía ya más de 7 años de noviazgo con Melinda, nunca había querido que ella conociera a mi familia, y ella nunca quiso que yo conociera a la suya. Ese fue nuestro único error, nos habíamos enamorado desde que nos habíamos visto en el colegio, un par de veces, ella nunca se me había acercado, siempre había sido una chica tímida pero tan potente en su mirada como en su forma de ser, solo nos vimos unas pocas veces en el colegio, pero fueron suficientes para quedar marcados de por vida.
Melinda estudiaba para ser docente de niños con discapacidades mentales, mientras que yo estudiaba para convertirme en un hombre de naturaleza muy libre, siempre me gustó pero nadie me creía capaz de ser tan natural, era el más cohibido en ese aspecto entre todos mis hermanos, decidí estudiar Biología, mi padre se rio mucho el día que le dije aquello que había decidido estudiar. Él siendo uno de los hombres lobos más reconocidos del mundo estaba mirando la forma en tener un hijo que fuera aunque sea un poco parecido a él, pero no lo era, siempre fui muy extraño desde que nací.
Mi padre y mis hermanos siempre fueron distintos, todos eran capaces de hacer cosas extraordinarias, y cuando se transformaban en lobos, lo que sucedía era magnifico al menos para ellos, a los hombres lobos de la actualidad no pueden transformarse por completo en lobos, por eso se les da el nombre de Licántropos, porque no pueden ser hombres lobos completos, aunque para muchos que utilizan ese nombre es lo mismo, realmente no lo es.
Ellos como cualquier otro licántropo normal, no tenían trasformaciones completas, solo eran mitad lobos, por lo que cuando se transformaban solo una parte de su cuerpo eran convertida en lobo, les aparecían una gran cantidad de pelo en todo el cuerpo, sus uñas creían de una forma exagerada, y su boca se alargaba convirtiéndose en un hocico, además de que podían correr, pero nunca lo podían hacer a cuatro patas, ya que les era muy difícil, pero de igual manera podían correr a unas velocidades increíbles, a pesar de lo que se cree que en luna llena todos nos transformábamos sin control, esto solo sucede cuando eres pequeño.
Pero no es momento de hablar de eso, estábamos hablando de mi boda, mi padre se había enterado el día anterior, y con eso toda la familia y la manada, en nuestros casos no está bien visto de que alguien se case, y menos si no es miembro de los jefes de una manada, yo no era eso, yo no podía tener compañera, a no ser que fuera jefe como mi padre, mi padre es el alfa de una de las mandas, a pesar de que yo era el primero en la línea de sucesión no estaba interesado en luchar por territorio o salir a cazar en los bosques solo porque sí.
Cuando se enteró de que me iba a casar casi le da algo parecido a u infarto, sin embargo ese tipo de cosas no nos suceden a nosotros, al no por ahora, no he visto el primer hombre lobo al cual le haya dado un infarto, por otro lado, él decidió que iría conmigo a la boda para detener semejante desfachatez, sin embargo yo sí quería que él estuviera presente solo por el simple hecho de que él era mi padre, y a pesar de haber sido uno de los hombres más duros que he conocido, estoy seguro de que siempre me quiso, y mi madre… ella no podía faltar, siempre me había apoyado y no iba a dejar que no estuviera en mi boda, a pesar de que iba a conocer a mi prometida justo ese día.
Después de haber recibido una gran reprimenda de mi padre, ella solo me guiño el ojo, eso era una aprobación a cualquier sitio que me encontrará. Después de que mi padre se fue a su dormitorio, ellos vivían en una lujosa mansión en medio del bosque, en un poblado enteramente de hombres lobos, dónde como dije anteriormente mi padre era el alfa. Después de la firma del tratado de colmillos, la organización de las manadas no era la misma. Pero yo no estaba muy al tanto de todo eso, solo recuerdo que mi padre estaba muy molesto por algunos asuntos relacionados con los vampiros ese día.
Recuerdo que mi madre se me acercó luego y me dijo: – A pesar de todo, está muy feliz por ti. Sabes cómo es, pero sigues siendo su hijo y no ha te ha dejado de amar ni siquiera un solo segundo, ha tenido graves problemas por culpa del consejo.
– ¿Qué consejo? – Cuestioné, tenía tanto tiempo que no estaba en este lugar desde que decidí mudarme cuando tenía catorce años para la ciudad, siempre me dijeron que no había problema, mi madre incluso me dio un permiso para ello, pero siempre tuve el problema del dinero.
– Sabes que ahora las cosas no son como antes, las cosas no se pueden decidir solo por una manada, después de la firma las cosas cambiaron, y últimamente se celebraron nuevos tratos, en los cuales se prohíbe la caza de vampiros y de licántropos, eso ha tenido a tu padre muy molesto y no culpó, su principal trabajo siempre ha sido encontrar vampiros.
– Y ¿A qué viene esa decisión? – Cuestioné un poco, casi nunca me había interesado por el mundo del cual venía, pero una decisión de esta magnitud me interesaba, esto significaba el cierre decisivo de la guerra entre ambas razas, al menos por un buen tiempo.
– La verdad, es que como deberías de saber, el consejo está compuesto por todas las razas que habitan este planeta, incluso aquellas que están a punto de extinguirse como los hombres tigres de Japón. – Dijo mi madre, pero mi curiosidad no permitió que ella siguiera hablando.
– ¿Existen hombres tigre? Por el amor del creador, no sabía que existían algunas de las cosas más extrañas de este mundo.
– Sí, entonces se ha establecido que a partir del día de hoy, el Gran consejo luchará para que todas las razas estén bien, ahora que la humanidad está muy cerca de una tercera guerra mundial, además han aprobado el uso de armas nucleares, por lo que todos están en tensión, se dice que muy pronto los países dejaran los diálogos amistosos y harán cosas muy innecesarias, así que las personas tienen miedo. Todos tenemos miedo hijo, pero al menos es muy bueno que hayas decidido casarte. Cuéntame ¿Cómo es ella?
– Es una chica increíble, es una de las mejores estudiantes de la universidad, además de ser divertida y súper hermosa. – Le dije, ella me miro un rato y luego me dijo;
– Hijo te brillan los ojos cuando hablas de ella, estás enamorado, pero sabes muy bien que eres un hombre lobo, y tú, no eres como todos nosotros, los demás, eres un hombre lobo entero, por alguna razón es así, así que tienes que tener claro que tú, fuiste, eres y serás siempre un hombre lobo.
– Si mamá lo sé, no tienes que repetirme ese hecho, pero ella no lo sabe, aún. Se lo planeo decir después de que nos casemos, en la luna de miel. Es una promesa que ya me hice.
– No sé si ella sea del todo humana, pero sé que tienes que tener todo el cuidado posible, en estos tiempos todas las cosas son extrañas, pero algo te puedo decir, el gran consejo está buscando cualquier excusa para hacer que tu padre dimita y encontrar alguien que se encargue más al cargo, debido a que existen personas con mucha influencia que no quieren que tu padre siga teniendo la actitud que ellos llaman “salvajes” – Miró mi expresión en el rostro –. Sí, sé que tienen razón, pero tu padre también puede cambiar, además él ha sido quien ha llevado a los licántropos durante muchos años para liberarlos a todos. Para que cada uno de nosotros fuera feliz, tu padre se sumió en un mundo de sacrificios, no quiero que las cosas que están sucediendo obliguen a todos los licántropos a esconderse de nuevo.
– Mamá, sabes que no se mucho acerca de la historia de todos nosotros. Y prefiero que siga siendo así, no me gusta el hecho de que yo sea tan diferente, esto ha hecho que mi familia me vea extraño.
– Hijo, sabes que no es así, la verdad es que todos te queremos mucho, y a pesar de lo que digan tus hermanos nunca serás ese hombre lobo que ellos dicen, siempre has sido y serás especial.
– Gracias mamá.
El resto de la tarde fue muy amena, regresé temprano ya que tenía que volver a la ciudad, fue realmente muy bueno estar con mi familia de nuevo, todos ellos tenían un concepto de mi extraño, pero sin embargo ninguno de ellos había dejado de quererme nunca, era primer hijo de siete hermanos en total, solo era yo el único varón, el resto eran mis hermanas, todas eran licántropos increíbles con mucha destreza. Ellas siempre me habían querido, aunque cada una de ellas a su manera distinta.
Llegué a casa temprano, recuerdo que Melinda me había dicho que no podíamos vivir juntos hasta que estuviéramos casados, que eso era necesario para vivir juntos, accedí a casarme con ella sin importar esta regla, no lo hice para vivir con ella, lo hacía porque la amaba, y la amaba a más que nadie en este mundo.
Al día siguiente se supone que nos íbamos a ver un poco antes de la boda, en el salón que había reservado para el evento, me había costado mucho dinero, pero siempre había valido la pena, por lo que había trabajado duro para casarme bien y que ella fuera feliz, a pesar de que en el pueblo mi padre era un alfa, era el licántropo más rico del lugar, el dinero de los lobos, “las garras” no tenían ningún valor en el mundo de los humanos, por lo que tuve que trabajar para tener mi propio dinero, me fue bastante bien, trabaje de muchas cosas, logré rentar un buen departamento, y además logre crear una pequeña cantidad de dinero estable con activos pasivos, había aprendido todo eso en de forma autodidacta mientras trabaja.
Esa mañana estaba un poco nervioso, después de todo era mi matrimonio, se supone que era una de las cosas más especiales que te suceden en la vida, siempre me gustó mucho pensar en esa sensación, y justo ahora la estaba viviendo. Me arreglé y estuve listo más rápido de lo que yo mismo esperaba. Tomé un taxi hasta el lugar, cuando llegué ambas familias ya estaban en el lugar, pero no era lo que me esperaba, ambas familias estaban a punto de luchar en plena calle, mientras observé a Melinda con su vestido de novia tratando de interponerse entre mi padre, y alguien quien creo es su padre.
Capítulo IIEntre sorpresas.Melinda MiletMe recuerdo muy entusiasmada ya que este era el día de mi boda, las cosas me habían salido bien desde hace mucho tiempo, yo era una de las chicas más extrañas del colegio, no como mis hermanas, todas ellas habían sido populares, pero a mí nunca me fue bien, me veían como la Nerd, nadie quería si quiera acercarse a mí.Por supuesto todo esto sucedía en la escuela para vampiros, yo soy la hija del Rey de los vampiros, al menos de los vampiros del Norte, desde hace muchos años las cosas entre los “Mundos Ocultos” como lo llama mi padre han cambiado, los seres humanos han estado haciendo de las suyas a su modo por todo el mundo y ahora el planeta está en grave peligro, todas las especies que desde hace muchos años han desaparecido porque los seres humanos las consideran extrañas, han tenido
Capítulo IIILa Segunda Guerra.Neptuno Wolf– Padre ¿Qué sucede? ¿Por qué estas discutiendo? – Le dije a mi padre mientras que observaba a un hombre, delante de ese hombre estaba mi prometida, Melinda Milet, por lo que quise preguntarle pero algo me dijo que me abstuviera de ello.– ¿Padre? Por favor no me digas que eres hijo de Erick. – Me dijo Melinda.– Sí. Amor te presento a mi padre, él es el señor Erick Wolf un empresario de acá, jefe de una pequeña comunidad ubicada en las montañas no muy cerca de aquí. – Le respondí con una sonrisa, pero ella tenía una expresión sombría en su rostro –. Amor, ¿Te sucede algo? ¿Estás bien?– ¡NO! ¡NO PUEDO ESTAR BIEN! – Me respondió a gritos.– Amor
Capítulo IIILa Segunda Guerra. Parte IIMelinda Milet– Padre ¿Qué sucede? ¿Por qué estas discutiendo? – Dijo, y cuando observé bien se estaba dirigiendo a Erick, esto me helo el corazón. Me perdí en mi misma y no recuerdo, sé que le grite algo, pero luego me fui al suelo llorando mientras que mi madre y mis hermanas me ayudaban a entrar, después de haber entrado, me trataron de calmar pero yo estaba llorando de una forma muy poco común, nunca había llorado así en mi vida, pero ¿Cómo no iba a hacerlo si el hombre que amaba era un hombre lobo, la raza que mi padre tanto odiaba, además de una brecha demasiado fuerte y grande. Si al menos podía ser humano, las cosas no estarían tan mal, pero ¡Era un lobo!– Hija, por lo que veo no tenías idea de esto, es increíble que no hayas sabido que er
Capítulo IVEl Lobo.Neptuno WolfEste Verectus no sabía nada de mí, ni de mi familia, ni de lo que yo hacía, y quería interponerse en mi vida, pues no lo iba a dejar, además quería hacerle daño a Melinda, no iba a dejar que eso sucediera.– No me interesa si eres el hijo de Zeus o de Poseidón, acabaré contigo de la forma que tenga que hacerlo, y no le tengo miedo ni a ti, ni a tu pandilla. – Le dije sin ningún temblor en la voz, y seguro de mí mismo, hacía ya muchos años que no me transformaba en lobo, pero eso no quería decir que no sabía cómo hacerlo, o que no sabía cómo moverme, por lo que oía, ya no habían personas civiles en el lugar, la guardia que había venido con Verectus los habían hecho salir, creían que no sabía lo que sucedía, mi olfato era
Capítulo VEl Plan.Melinda Milet– Sí, su padre me ha dicho todo lo que pudo. – Dijo Neptuno, algo que ni siquiera yo sabía.– Mamá ¿De qué está hablando? – Preguntó Minerva, pero mi madre estaba como perdida en sus pensamientos y fue Meredith quién contestó.– El gran plan, de eso hablan.– ¿A qué se refieren con eso? – Pregunté, desde hace tiempo que no estaba muy al tanto de las cosas que estaban sucediendo en mi mundo, por lo que no tenía una certeza exacta de lo que Meredith había llamada el gran plan.– Se refiere a que el comité de vampiros ha aprobado luchar contra las demás especies para controlar al mundo, esto es algo que muy pocas personas saben, pero es algo que es una realidad. ¿Por qué crees que las tropas llegaron ta
Capítulo VIContra las Banshees.Neptuno Wolf– Neptuno, siento decirte que tu padre murió, fue asesinado por Verectus y Morgana en una batalla que se desató al irte, nadie ha asumido el liderazgo de tu manada, y creo que como están las cosas ahora, lo más justo es que eso sea así, y muchacho, lamento la muerte de tu padre, era uno de los licántropos más grandes que he conocido, a pesar de que éramos enemigos, siempre respeto cualquier trato que habíamos hecho, y en la batalla de Luxury, luché a su lado. Era uno de los lobos más ejemplares que existían. – Sus palabras fueron como miles de cuchillas que entraban en mi cuerpo, no podía sentirme peor. ¿Cómo era posible que mi padre hubiera muerto y de esa manera?, no creía que eso fuera del todo cierto, pero por otro lado, el padre de Melinda no tenía motivos para mentirme, al me
Capítulo VIIEl nuevo Alfa.Melinda MiletVer como Neptuno luchaba contra los otros lobos era increíble, superaba las expectativas, miré por un segundo el rostro de mi padre, y solo pude ver terror, nunca había visto a un lobo luchar así, no era su naturaleza, ni mucho menos, y eran pocas las especies que podían hacer transformarse de esa manera, y cuando lograban hacerlo, era casi imposible que alguien pudiera vencerles. Los vampiros que se dedicaban a acabar contra los Lobos Ancestrales habían dejado de existir hace mucho tiempo, lo más parecido que habían era los 12 gigantes, y uno de ellos con la ayuda de todo un ejército lo único que hizo fue terminar teniendo miedo, es decir, terminar con la vida de una criatura así, era casi imposible. Luego por primera vez en mucho tiempo sucedía algo muy extraño, algo que no valía la pena pensar ahora, pe
Capítulo VIIIFamilias.Neptuno WolfCorrí en dirección a mi familia, debía de ver que era lo que le habían hecho, y también lo que sucedía, por un momento me olvidé de Melinda, me olvidé de la guerra, y de cada detalle de los cuales se podían desarrollar en este mundo, por esa razón no pensé que las cosas fueran tal mal detrás de mí, no pude observar que los licántropos le obstruían el paso a Melinda, mientras que el resto de los vampiros solo se mantenían al margen de la situación, sin esperar tener muchos inconvenientes y esperando que las cosas se resolvieran de la mejor manera.Yo seguí en camino a las Mazmorras, el lugar dónde por defecto estaba mi familia, cuando llegué pude observar que mis hermanas estaban en las celdas principales, me acerqué a ellas, pude observar que a todas las h