Capítulo XCVIILa carta. Parte III.Melinda Milet. No quería más nada, solo quería seguir oyendo la historia del joven, de la chica, de todo, además había muchas cosas que no entendía, y además cada palabra que salía de los labios de Neptuno parecía ser mágica, sentía que había una fuerza atrayéndome a seguir, mientras que la carta se leía solo para seguir acerca de lo que era, y de lo que no… me llevaba a desvariar, a soñar y a vivir la historia, nadie sabía que era lo que estaba sucediendo, yo por mi parte solo quería seguir oyendo la hermosa historia que había allí, en ese lugar, la historia de un amor, la historia de un Dios, la historia de un hombre. Miré a Neptuno que seguía leyendo con calma la historia que seguía en sus palabras, su corazón seguía lento y con calma: “Me vistieron muy temprano, luego de eso me llevaron al coche, era la primera vez que salía en mucho tiempo a un lugar que no fuera la clínica para que me hicieran rehabilitaciones, por primera vez iba a ver el
Capítulo XCVIIIEl final de la primera historia. Neptuno Wolf. –Así que eres Anmi, el hombre de esta historia, vienes de otro mundo, por lo que leíamos en la carta, hay cosas de las que hablas que aún no existen en este mundo, como los televisores, entre otras cosas, pero sin embargo eres uno de los seres más increíbles que pueden existir en cualquier mundo, por lo que estoy seguro de que las personas que están en este momento, cerca de nosotros, saben acerca de todo lo que ha pasado, de todo lo que se ha vivido, pero no sabemos nada, porque la historia está incompleta, más sin embargo, estoy seguro que desde dónde estabas no les decías las cosas de una forma etérea a aquellos que te rodeaban, porque de serlo así, él dios mensajero que tengo delante de mí, no tendría su rostro lleno de tanta sorpresa. –Sí, no te he subestimado, eres el ser más poderoso que está tierra ha visto, después de mí. –Dijo mientras que sonreía. –Lo que podemos hacer ahora, es empezar nuestra fiesta, la lu
Aroma de un lobo.Prólogo.Era el día de nuestra boda, no tenía ni la más mínima idea de lo que iba a suceder, nunca pensé que la mujer que amaba tenía un secreto tan grande, pero que puedo decir yo… También guardé un gran secreto para ella, bueno… en realidad eran muchos, como podría yo, un hombre lobo, soñar con que ella una simple humana fuera algo más que solo una amiga. Pensé que pude hacerlo, pero atreverme fue tener mucha avaricia de mi parte. Ella por otro lado siempre fue mmi debilidad, desde que la conocí en la escuela ella era la única chica que podía hacerme frente, que podía mirarme a los ojos sin vacilar, a pesar de mí mirada salvaje.Yo no elegí ser un hombre lobo, yo solo nací así. Las cosas han sido muy extrañas desde que era niño, siempre las personas me han dicho qu
Capítulo ILa boda.Neptuno WolfEra un día muy especial para mí, recordaba de forma muy clara que hoy era el día de mi matrimonio, me iba a casar con Melinda Milet, había planeado mi boda hace varios meses atrás, tenía ya más de 7 años de noviazgo con Melinda, nunca había querido que ella conociera a mi familia, y ella nunca quiso que yo conociera a la suya. Ese fue nuestro único error, nos habíamos enamorado desde que nos habíamos visto en el colegio, un par de veces, ella nunca se me había acercado, siempre había sido una chica tímida pero tan potente en su mirada como en su forma de ser, solo nos vimos unas pocas veces en el colegio, pero fueron suficientes para quedar marcados de por vida.Melinda estudiaba para ser docente de niños con discapacidades mentales, mientras que yo estudiaba para convertirme en un hombre de na
Capítulo IIEntre sorpresas.Melinda MiletMe recuerdo muy entusiasmada ya que este era el día de mi boda, las cosas me habían salido bien desde hace mucho tiempo, yo era una de las chicas más extrañas del colegio, no como mis hermanas, todas ellas habían sido populares, pero a mí nunca me fue bien, me veían como la Nerd, nadie quería si quiera acercarse a mí.Por supuesto todo esto sucedía en la escuela para vampiros, yo soy la hija del Rey de los vampiros, al menos de los vampiros del Norte, desde hace muchos años las cosas entre los “Mundos Ocultos” como lo llama mi padre han cambiado, los seres humanos han estado haciendo de las suyas a su modo por todo el mundo y ahora el planeta está en grave peligro, todas las especies que desde hace muchos años han desaparecido porque los seres humanos las consideran extrañas, han tenido
Capítulo IIILa Segunda Guerra.Neptuno Wolf– Padre ¿Qué sucede? ¿Por qué estas discutiendo? – Le dije a mi padre mientras que observaba a un hombre, delante de ese hombre estaba mi prometida, Melinda Milet, por lo que quise preguntarle pero algo me dijo que me abstuviera de ello.– ¿Padre? Por favor no me digas que eres hijo de Erick. – Me dijo Melinda.– Sí. Amor te presento a mi padre, él es el señor Erick Wolf un empresario de acá, jefe de una pequeña comunidad ubicada en las montañas no muy cerca de aquí. – Le respondí con una sonrisa, pero ella tenía una expresión sombría en su rostro –. Amor, ¿Te sucede algo? ¿Estás bien?– ¡NO! ¡NO PUEDO ESTAR BIEN! – Me respondió a gritos.– Amor
Capítulo IIILa Segunda Guerra. Parte IIMelinda Milet– Padre ¿Qué sucede? ¿Por qué estas discutiendo? – Dijo, y cuando observé bien se estaba dirigiendo a Erick, esto me helo el corazón. Me perdí en mi misma y no recuerdo, sé que le grite algo, pero luego me fui al suelo llorando mientras que mi madre y mis hermanas me ayudaban a entrar, después de haber entrado, me trataron de calmar pero yo estaba llorando de una forma muy poco común, nunca había llorado así en mi vida, pero ¿Cómo no iba a hacerlo si el hombre que amaba era un hombre lobo, la raza que mi padre tanto odiaba, además de una brecha demasiado fuerte y grande. Si al menos podía ser humano, las cosas no estarían tan mal, pero ¡Era un lobo!– Hija, por lo que veo no tenías idea de esto, es increíble que no hayas sabido que er
Capítulo IVEl Lobo.Neptuno WolfEste Verectus no sabía nada de mí, ni de mi familia, ni de lo que yo hacía, y quería interponerse en mi vida, pues no lo iba a dejar, además quería hacerle daño a Melinda, no iba a dejar que eso sucediera.– No me interesa si eres el hijo de Zeus o de Poseidón, acabaré contigo de la forma que tenga que hacerlo, y no le tengo miedo ni a ti, ni a tu pandilla. – Le dije sin ningún temblor en la voz, y seguro de mí mismo, hacía ya muchos años que no me transformaba en lobo, pero eso no quería decir que no sabía cómo hacerlo, o que no sabía cómo moverme, por lo que oía, ya no habían personas civiles en el lugar, la guardia que había venido con Verectus los habían hecho salir, creían que no sabía lo que sucedía, mi olfato era