—Mamá, ¿Sería bueno que entráramos a la casa a comer así?Preguntó suavemente Juliana, sosteniendo el brazo de Antonia.Antonia la miró con los ojos entrecerrados: —No me digas. ¿Por qué me tiras con fuerza? Casi se rompe mi brazo.Juliana hizo una mueca y soltó ligeramente la fuerza de su mano.Aun
—Deberíamos divorciarnos.Tres años después de casarse, esta fue la segunda frase que Emiliano Torres le dijo.La primera fue en la noche de su boda.Vestida con un hermoso vestido de novia blanco, ella giró frente a él, levantando la amplia falda. Con una sonrisa radiante, le preguntó si se veía bo
Juliana permaneció en silencio durante un rato.Después de un largo suspiro, dijo con un tono ligero: —Al menos sobreviví a todo esto, y tuve la suerte de encontrarlos a ustedes. Después de todo, ellos me criaron. Así que, déjalo estar.Considerarlo como una forma de retribuir por todos los años que
Juliana se demoró a propósito.No fue hasta que Emiliano la llamó por segunda vez que salió de la villa.La persona dentro del auto vio la figura que se acercaba corriendo, sus cejas fruncidas se relajaron un poco y ajustó una caja de regalo en el asiento del copiloto.—Lo siento, tomé una siesta po
El coche aceleró bruscamente y la voz de Emiliano sonó, mezclándose con el ruido del viento: —¿Tienes prisa?¿Qué quería decir con que si tenía prisa?Ella no tenía a nadie con quien casarse, ni nadie que la esperara.Negó con la cabeza, muy seria: —Deberías ser tú el que tenga prisa.Emiliano sonri
Cuando Juliana estaba a punto de apartar a Camila, la chica que la sostenía de repente cambió de expresión y, frunciendo el ceño, la soltó.Camila examinó la cintura de Juliana y dijo: —Hermana, ¿no te queda un poco suelto este vestido? Parece que te queda grande.En este círculo de élite, asistir a
La cena en el césped de la mansión estaba en pleno apogeo, y el vestido mal ajustado de Juliana había sido motivo de charla y risas entre las damas presentes, proporcionándoles un tema común sobre el cual chismorrear.La fiesta de cumpleaños se tornaba cada vez más animada con el paso de las horas,
—¿Qué he hecho?Dentro de la habitación, Juliana estaba cómodamente sentada en el sofá, vistiendo una chaqueta casual pero apropiada.Sin embargo, los dos hombres frente a ella, sosteniendo cartas en sus manos, llevaban una vestimenta un poco extravagante. Pero, estaban completamente vestidos. ¿Cómo