Narra BastianUna hora después de que la diosa vuelve a dormir, la azafata sigue volviendo cada cinco minutos. Trayendo... no sé qué trae, porque los tragos nadie los está tomando, así que los vasos nunca se vacían. Y no es por qué haya querido ver sus piernas, pero quería corroborar que era verdad lo que la diosa decía y sí, cada vez que volvía su falda estaba unos centímetros más alta. Como lo noto desde la habitación, no sé. Bastian: ¿Es celosa? Massimo: Despidió a su representante por coquetear con el gruñón. Isaac: No fue solo por eso, nos llamó asquerosos. Bastian: ¿Por qué? Izan: Por qué somos primos. Iker: Legalmente. Akio: También son esposos, legalmente. WoW, no sabía. Bastian: ¿Es adoptada? Tom: Mi madre tiene 29 años, no creo que haya tenido a Aless a los 7. Bastian: ¿Los dos son adoptados? Que preguntas estúpidas que hago. Isaac bufa. Izan: Mi madre adoptó al niño que le gustaba como su hermano y después se casó con él, el gruñón enfrente tuyo también lo e
Narra BastianFei: Voy a buscar su agua señorita. Alessandra: No hace falta, hay varios tragos aquí que puedo tomar. Fei: Esos son de los señores. Alessandra: ¿Sí? Va hacia James, se sienta en sus piernas y agarra el vaso que tenía en su mano antes de tomar. Alessandra: Vuelve a bajar esa falta y deja de coquetear. Fei: Señorita, todos tenemos derecho a conocer el amor. Alessandra: Busca uno que no esté tomado. Fei: Disculpe, no sabía que el señor era suyo, hay muchos hombres aquí, no hay por qué pelear. Alessandra: Tienes razón, por favor señala al que te gusta. La muy estúpida se cavó la tumba al señalar al gemelo Izan. Alessandra: Yo no te vi coquetear con él. Fei: No prestó atención cuando le hablé. Alessandra: Cómo debe de ser, es mi esposo. Fei: Bueno él. El otro gemelo. La tumba es cada vez más honda. Alessandra: Mío. La azafata ya cansada señala a Tom. Alessandra: Tiene 15 años y está apartado. Fei: ¡Dios, señorita, no puede dejarme follar con alguien! Grit
2 días después, ya en Sicilia...Narra AlessandraMi madre está súper bien, mis nuevos hermanitos también, son tan hermosos y tiernos, me contaron que tuvieron que hacerle una cesárea de emergencia, pero que todo salió muy bien. Blake y Atenea la atendieron. Lo bueno de tener parientes doctores, y es justo por esa razón que Adaris exige que todos elijan una carrera aparte de la que en verdad aman. Nos cuidamos entre nosotros, si estás enfermo tenemos doctores, ¿Problemas legales? Tenemos abogados, ¿Misión Suicida? Tenemos militares especializados. ¿Maneras de lavar dinero? Tenemos administradores de empresas que se ocupan, ¿Un ex tóxico subió una foto desnuda tuya? Tenemos hackers para eso. Y de paso subir una de su micropene. Todo lo que necesitemos, lo tenemos en la familia. En la familia que elegimos. Porque esa es en la que confiamos, no en la que nos tocó, bueno, casi todos hay casos muy particulares. Atenea: ¿Te robaste un niño Alessandra? Ate no estuvo aquí cuando pres
4 años después...Narra AlessandraEstoy asustada, cagada hasta las patas. Dejé a mi hija que ahora tiene 11 años en el instituto, no le gusta mucho, le dije que si quiere dejarlo y hacerlo en casa no había ningún problema. Pero me dijo que primero quería intentarlo unas semanas, si no es lo suyo, lo hace en casa junto con las mellizas. Estoy sola, mis esposos tenían cosas que hacer, así que estoy yendo a la empresa que tengo con Massimo a ver cómo está. Lleva enculado unos días, seis para ser exactos, ¿Por qué? Logré mi cometido. Junte a Massimo, Tom, Junior y el chini para que juntos le dijeran a Ate de una relación, pero salió huyendo. Ya va a caer, el que se rinde pierde, y si de ella hablamos, ellos perderían mucho. Llegó hasta su oficina, entró sin golpear, si me dice algo lo tiro por la ventana, para loca estoy yo y últimamente por dos. Alessandra: Joder, pareces muerto. Tiene su frente en el escritorio, cuando la levanta, sus notables ojeras me llaman la atención. Mas
Narra AlessandraMi nombre es Alessandra D'Angelo, Ricci, Brown, Vitale y mi vida comenzó hace 7 años, cuando mi ahora madre me rescató de un prostíbulo. Hoy en día tengo 22 años y no soy ni la sombra de lo que alguna vez fui. Para el ojo público soy una militar destacada, influencer, la chef y pastelera número uno del mundo, una persona cerrada que no tiene amigos. Pero para mi familia soy, mi niña, hija, Aless, mi orgullo, sister. Y con ellos solo soy yo, una mujer que supera día a día sus demonios, graciosa, cariñosa, a la que no le gusta salir de compras, ni ver desconocidos, hombres en particular. A la que no le gusta el ruido, pero tampoco el silencio. Que ama con todo su ser a su familia, que consiente con postres a su madre, que pelea a sus celosos padres. Lejos de todo eso a las sombras de los ojos de todos, incluidos los de mi familia, solo soy Alessandra, la que lucha en peleas clandestinas, la que junta el dinero y lo dona a asociaciones contra la violencia y la trat
Narra AlessandraAtenea: Vamos, por favor, solo una, si no te gusta no insisto más. Aquí vamos de nuevo, lleva insistiendo mucho tiempo para que tenga una cita y ahora el chico con el que salió el otro día tiene un amigo... guapo, vamos a decirle. Y según Ate me va a gustar, me mostró una foto, es... lindo, alto, cuerpo promedio, pelirrojo, ojos verde esmeralda, ni muy pobre ni muy rico, eso no me interesa en lo más mínimo. No es mi tipo. En realidad no sé cuál es mi tipo, pero no es pelirrojo, no es definitivamente un chico al que necesita de un amigo para buscar una mujer que quiera una cita con él. Y absolutamente no es él. Pero no puedo negarle mi ayuda a Ate, porque no solo sería yo en la cita, QUIEREN UNA CITA DOBLE, ¿en qué maldito planeta esas cosas terminan bien? Atenea: Por favor, por favor. Junta sus manos suplicando y me hace pucheros. La m*****a siempre me convence cuando hace eso. Alessandra: Bien. Digo derrotada. Atenea: ¡Sí! Ponte un vestido bonito. Alessan
Narra AlessandraTuve tres malditos días para elegir el outfit para la cita, pero como hago normalmente en estos casos, los pospongo hasta último momento. Ya estamos a 8 de la noche, estoy bañada, secada, preparada para cambiarme, solo tengo un pequeño problema... No sé qué ponerme. Podría usar lo de siempre, jogging, camisetas y zapatillas, es lo más cómodo para desplazarse en la cocina y no es como si me importará como me veo. No puedo ponerme eso para una cita ¿O si? Mi familia diría que sí, pero cualquier persona del resto del mundo que le preguntes te dirá que no. Así que me decido por unos de esos trajes que mi madre me hace comprar para ocasiones especiales... no es que lo sea, pero entre eso y un vestido, elijo el traje. Este es de color crema, es un conjunto de tres piezas, short, blusa y chaqueta que llega hasta donde termina el short, me pongo unos tacones negros abiertos, que dejan ver mis pies. Ato mi cabello en una coleta alta, no me maquillo, me veo bien sin nada,
Narra Izan Estoy cabreado y quiero matar al bastardo que incómodo a Aless, no debió poner ese brazo ahí, menos sin preguntarle. Si ya por ponerlo me enojo, estoy furioso porque ni siquiera le pregunto y no la soltó cuando notó que la incomodaba. Esto es la m*****a culpa de mi hermana, siempre anda metiendo en problemas a Alessandra. Y ahora está aquí, en medio de un restaurante vacío, tan mojada que los pezones se le marcan en la blusa, buscándonos porque sabe que fuimos nosotros los que activamos los extintores. Claro que no se quedó por la m****a de ayudar, que le dijo a esos idiotas que la menospreciaron, ella no ayuda a nadie que no sea su familia. Porque a ella nadie la ayudó cuando lo necesitó. Alessandra: Salgan, no hace falta que se escondan, ya sé que fueron ustedes. Iker: ¿Quién dijo que nos escondemos? Alessandra: ¿Cómo le llamas a ponerte detrás de unas columnas? Izan: ¿Distracción? Abre grande sus ojos al entender y mira hacia todos lados. Alessandra: ¿Dónde es