Cuando desperté a la mañana siguiente, Kevin también estaba allí, se había quedado a dormir en su habitación, y ahora me preparaba el desayuno, pues el resto de los residentes aún estaban acostados, al mismo tiempo que me contaba sobre lo que le había dicho a su madre sobre mí, aunque sin admitir aún que su novia era yo.
Me reí a carcajadas al escucharle hablar sobre ello, admirando como él lo hacía también.
Estábamos sentados en el borde de la piscina, mientras seguíamos bebiendo una copa tras otra, mientras los chicos jugaban a las cartas, Meryem, Monic y yo nos aburríamos bastante.¿por qué no cambiamos de juego? – Propuso Kevin al echarme una mirada y percatarse de que me aburría – algo a lo que las chicas también puedan jugar.¿Jugamos a la botella conversa? – Preguntó David, con malicia, provocando que todos le mirásemos sin comprender a lo que se refería, pues nunca había escuchado aquel juego – Hacemos rodar la botella, y cuando se detenga la persona que se encuentre más próxima a la boquilla deberá hacer una pregunta comprometida a la persona que tenga delante, justo en frente de la parte de atrás de la botella.¿qué tipo de pregunta? – quiso saber PaulAlgo
Seguíamos allí, jugando a aquel estúpido juego. Meryem se acababa de quedar sin su vestido y ahora se tapaba los pechos con las manos, Kevin estaba en calzoncillos, David estaba vestido y con la ropa de casi todos en su poder, Monic también estaba vestida y tenía mucha ropa de todos nosotros, Paul tenía los zapatos puestos, la camisa y los calzoncillos. Y yo seguía con falda, aunque me había quitado la chaqueta de Key.Key turno tuyo – le aseguraba Monic, justo después de que la botella se detuviese apuntándole a él – Atrevimiento.¿qué quieres que haga, Monic? – Preguntó, cansado de aquel estúpido juego.Agarra los pechos de Meryem y no te detengas hasta darle placer – alegó, divertida, con malicia, provocando que él se quitase los pantalones y se los lanzase a la cara – que ag
Me levanté con desgana, y caminé hacia la parte de arriba de la casa, pues necesitaba ponerme la ropa y alejarme de aquellos degenerados.David es un cerdo – comenzaba Meryem junto a mí, parecía que ella también se dirigía hacia la parte de arriba – pero… Monic no se queda atrás. Jamás habría pensado que Kevin se quedaría en bolas delante de todos, la verdad es que… está muy bien dotado.Reí ante sus palabras, mientras llegábamos a la puerta de mi habitación.Te veo luego.Meryem entró en su habitación, y comenzó a desnudarse, pues necesitaba darse una ducha caliente, había pasado mucho frío ahí abajo, y necesitaba entrar en calor. Aún podía imaginar las manos de Paul acariciando sus pechos cuando David le había obliga
Caminé hacia la piscina, en albornoz, me serví una copa de wiski, pero al final terminé por coger la botella y llevármela junto a la piscina. Me senté sobre una de las hamacas y comencé a beber como si no me importase nada en el mundo, tan sólo yo y la bebida. Aún no podía quitarme de la cabeza lo que me había hecho, lo vulnerable que me había sentido a causa del alcohol y de mi deseo de ser saciada.Mis lágrimas comenzaron a salir en ese justo instante, me sentía sucia, estúpida, por haber permitido que de nuevo otro hombre que no era Kevin tocase mi cuerpo, como ya había tenido que hacer con Ivanov, cuando aquel rufián me hizo suya a traición. En aquel momento David lo había hecho también.Mi rostro se tiño de negro, al deshacerse el rímel con las l&a
El resto del trayecto fue un infierno para mí, no podía dejar de pensar en lo que había pasado, lloré hasta que mis lágrimas dejaron de salir, y entonces me quedé dormida sobre el regazo de mi amiga, mientras esta seguía acariciándome la cabeza, intentando transmitirme paz.Cuando Paul se detuvo frente a mi casa, Meryem le indicó que debía llevarme arriba él mismo, pues yo no estaba con fuerzas de hacerlo sola.No – le dije, cuando intentó tocarme, asustada de sentir el tacto de su piel con la mía.Sólo voy a subirte a casa – me comunicó, intentando calmarme, pero yo parecía fuera de mí.No – repetí, mientras Meryem me abrazaba con fuerza – él me encontrará si me dejas aquí – dije, totalmente horrorizada, mientras la abrazaba de nuevo.
Llevaba casi dos semanas acostándome con él, con Han Tae Sang, intentando llenar el vacío que Kevin había dejado. Pero por más que lo intentaba aquel vacío seguía ahí.Mi ex novio seguía intentándolo con creces, seguía regalándome flores, llevándome a cenar, haciéndome el amor apasionadamente casi a diario, pero mi corazón seguía roto. Ya nada de eso podría volver a llenarme nunca, y fue en ese justo instante cuando me di cuenta de que me había enamorado de ese cabrón.Me sentía como una idiota, ¿cómo podía haberme enamorado de un idiota como él? Él no lo merecía en lo absoluto. Han Tae Sang tenía razón, él nunca me trataría con amor, ya lo había comprobado con creces.Aquel día estaba espec
Acababa de llegar al garito, donde mis amigos, mis antiguos amigos me esperaban. Allí estaban todos: Gustaff, Steve, Philip y Nerea. El resto no estaba en la ciudad, así que tan sólo estaban ellos para celebrar conmigo.Estaban impacientes por verme, ya que hacía bastante que no nos veíamos.En cuanto al tiroteo de esa misma tarde, todo había sido un éxito. El jefe se encontraba a salvo y nosotros también. Pero Ivanov había escapado.Aún recordaba la conversación que habíamos tenido en la comisaría de policía, donde nos había llevado Jonas…Kevin estaba sentado en el sofá del despacho del jefe de policía, junto a mí, mientras Olivares hablaba deliberadamente con aquel señor.Seis coches han volado por los aires, multitud de heridos, el p&aac
Llegué a la sala VIP totalmente desanimada. Ahora sí que sentía que todo había acabado, ahora sí que sentía que no podría tenerle.Me senté en el sofá y me bebí la copa de Gustaff, haciendo que este me mirase con cara de pocos amigos.Estaba realmente enfadada con él. Sabía que aquello pasaría, que tan pronto como hubiese conseguido lo que quería volvería a apartarme, volvería a hacerme daño. Y en aquel momento sentía que yo era la culpable de todo aquello, al fin y al cabo, él me lo había advertido antes de empezar todo aquello, antes si quiera de enamorarme de él.Me levanté, caminé hacia la barra, admiré como Kevin se encontraba allí hablando con Dante y ligando con Carla de nuevo. Por más que él dijese que sólo est