-Entonces, ¿dices que Bruno quiere que participes hasta el final? -Rachel le daba vueltas al asunto mientras nos hallábamos en la entrada del arcade.
-Si. Es algo extraño -le respondí sentándome en uno de los muebles mientras pedía una malteada.
-Todo por esa Luna Vidali -dijo Frey con los ojos puestos en la máquina de matar zombies 3000.
-Que mal debe ser que tu padre te utilice como recompensa, ¿eh? -Rachel denotó petulancia.
-Como sea, nadie se merece eso. Ella es una chica muy agradable -dije lanzando el comentario a la deriva a ver como reaccionaban.
-Puede ser muy maja y todo, pero… -interrumpí a Frey antes de que terminara.
-¿Y si le pedimos ayuda a Christy? -mi tono vivaz hizo que los otros comenzaran a analizar la propuesta.
Habían llegado las malteadas y Rachel con su pinta de rebelde acomodó sus pies en la mesita mientras beb&i
Apenas estuvimos en el horario de visitas, llegamos a donde tenían a mamá Elisa recluida.Tenía una vía intravenosa conectada al dorso de su mano. En ese momento ella estaba durmiendo y el médico a cargo nos contó que sus defensas bajaron peligrosamente por unos motivos que no llegué a entender.Estuvimos ahí tres horas acompañándola.La noche anterior no había dormido bien, así que aproveché el mueble para poder dormir un tanto más. Todos en la sala estábamos preocupados por el estado de salud de mamá Elisa.El tiempo pasaba lento y en ocasiones, veíamos como mamá Elisa abría brevemente los ojos, pero los volvía a cerrar. Procuré agarrar sus delicadas manos frías para que ella sintiera que estábamos ahí con ella.Cuando llegaba la hora del ensayo, no quería ir. Sin embargo, F
Estuve la mañana siguiente en la habitación de mamá Elisa cantándole la canción que componía con los acordes que me dio Teddy.Viendo uno de los periódicos sueltos en recepción, me di cuenta que el titular era un mosaico de los favoritos dentro del festival, y uno de ellos era yo por alguna razón.Le pregunté a la recepcionista si era de alguien, pero me hizo una seña de que no sabía.Me lo llevé de vuelta a la habitación donde yendo a la pagina citada, encontré el texto completo.Mamá Elisa estaba dormida pero aun así le leí.“…Los participantes destacaron con presentaciones impresionantes dignas del festival de Green Valley, con participación de personas de todo el país, con historias felices, trágicas, pero todas con un buen ritmo… Uno de ellos fue Elian, un chico apuesto quien
Luna estaba sentada con las piernas cruzadas con la mirada clavada en mí.Su bufanda color café resaltaba el brillo de sus ojos avellana, y su piel blanca y delicada parecía que ahora estuviera más hermosa que nunca.Aunque sus ojos me expresaban peligro.Ella se levantó lenta y elegantemente dando pasos estilizados hasta llegar a mí.- Luna, yo…- Shh -hizo un gesto con las manos con mucha energía para que no dijera nada-. Tengo que darte un mensaje que me dijo papá. No vayas a confundir las cosas.Los hombres que me escoltaron seguían tras de mí, y con Luna hecha una furia a mi frente, no tenía mucho a donde moverme.- Tengo preguntas -me adelanté a decir.- Me temo que responderás las mías primero -el gen Vidali se hacía notar en Luna en ese momento. La dureza de las palabras ocasionaba eso, mas no su presencia.
El tiempo que pasé en esa pequeña oficina no fue mayor a cinco minutos. ¿Quién está preparado para ver a la persona que le ha flechado el corazón después de tanto tiempo y esperar que las cosas estén en paz con tan solo cinco minutos de charla?Eso era imposible.Sin embargo pasó y no podía hacer nada.Me encontré con los Cidarte y me llevaron a casa. Los vi sonrientes, contentos por mi, mientras yo me consumía por dentro en intriga y conflictos sin resolver.Quería volver a donde estaba Luna, abrazarla y hacerle mil preguntas, sentir que realmente ella iba a estar ahí para mí, pero no era tan fácil.Valentina me habló un par de veces, pero estuve inmerso en mis pensamientos, por lo que ella me preguntó si ocurría algo.Yo le negué el derecho de saber lo que estaba aconteciendo en ese momento, donde tras
El peor de mis temores se hizo realidad. Kaleb resultó ser una persona patética a la hora de ensayar, ya que nada de lo que pensábamos nosotros coincidía y eso ocasionó muchos conflictos.Nos habían dado seis días para preparar la siguiente presentación, y yo había propuesto escribir una canción para la presentación.Kaleb accedió curioso, pero al no saber componer en piano, esto se complicó. Naturalmente para mí la guitarra era protagonista en mis canciones, pero, a su vez, para Kaleb el piano era protagonista.Perdimos dos días en esa discusión. Entre encontrar una canción que se ajustara a mi tesitura y que pudiéramos destacar los dos, como también por el estilo de canción que permitiera el uso de mi guitarra.“Asqueroso esclavo afroamericano”, llegó a decir en un momento dado con cara de repudio
¿Hubiera querido un día más de ensayo? Si.¿Estamos perfectamente listos para destacar? No.Un poco el lío de no ponernos de acuerdo a tiempo entre Kaleb y yo.No le puedo reprochar mucho ya que él fue quien al final tomó riendas en el asunto y tuvo la iniciativa de elegir la canción a mis espaldas.Lo único que no habíamos completado era las voces, que aún me perdía en algunas partes de la canción de manera algo tonta.Lo corregí un poco cuando llegué a casa y escuché las grabaciones, donde si me di cuenta a lo que se refería Kaleb, y tenía mucha razón.Le mostré las grabaciones a Valentina la noche antes de la tercera gala. Ya me parecía algo normal estar con ella y tener mucho contacto, aunque después de ese día, no nos hemos vuelto a besar, lo cual lo considero algo prudente ya q
Estuve todo el trayecto junto a lo que quedaba de mamá Elisa.No salían lágrimas, pero si había un agujero negro en mi estomago y un frío consumidor en mi cabeza. El detrimento del suceso trágico dejaba mi pecho abierto sin barrera alguna, como esperando a que una flecha perdida acabara con mi dolor de alguna manera.Las personas me hablaban, pero no las escuchaba.Así pasó durante el velorio.Curiosamente, ese día llovió.Después del entierro, me quedé horas viendo la tumba de mamá Elisa, y Frey me acompañó con un paraguas hasta que dejó de llover. Entonces me quedé solo frente a ese montículo de tierra. Haces de sol resplandecían cayendo del cielo como velos de claridad.No había nadie a mi alrededor. Creí haber escuchado a Frey decirme algo antes de que se fuera, pero no me importaba.A&
Ir en el mismo vehículo con Evans y con Kaleb era algo estresante, ya que se notaba que había un choque de imponencias y de egocentristas que hacía que el ambiente estuviera a punto de estallar a todo momento.Por otra parte, el tal Phillip era un chico muy agradable, algo risueño.Ninguno en esa limusina tenía conocimiento de mi luto, pero era mejor así. En ese momento no necesitaba la compasión de nadie.Fueron cuarenta minutos de camino hasta que llegamos a lo que parecía ser una mansión frente al mar. Un hermoso edificio construido en color blanco con muchos detalles en madera robusta.Nos bajamos y los demás participantes estaban como niños pequeños presenciando regalo de cumpleaños. El lugar era asombroso.Y para mayor sorpresa, la persona que nos iba a hacer el tour por la casa era Luna Vidali, quien llevaba el cabello recogido en una cola de caballo y