Capítulo 61

Nathan

—Dios, no puedo creer que seas tú. ¿Qué haces en Milán? —pronuncié sorprendido. Siempre me pregunté si algún día volvería a verla y cómo me sentiría si sucedía. Pasé mucho tiempo enojado con ella por dejarme como lo hizo. Tenerla delante de mí me produjo una inesperada felicidad. Ella representaba lo mejor de la parte más oscura de mi pasado. Fue mi primer beso, mi primera ilusión, mi primera vez, y también la primera mujer que me rompió el corazón. La única, hasta ese momento.

—Mi… mi… marido es el dueño del lugar —balbuceó nerviosa—. Lo siento, Nathan, pero no puedo hacer esto, no puedo hablar contigo. —La detuve sosteniéndola de la muñeca cuando intentó alejarse—. Suéltame, por favor —pidió con un ligero temblor en su voz. Estaba a espaldas de mí, mi mano envolvía su suave y delgada muñeca, que sentía temblar bajo mi tacto.

—¿Por qué no puedes?, ¿te lastima?, ¿es peligroso? —Me atreví a preguntar, quería saber porqué huía de mí de esa manera.

—¡No! —contestó soltándose de mi
Capítulos gratis disponibles en la App >

Capítulos relacionados

Último capítulo