Todas las miradas se giraron hacia la voz. Allí, en el centro exacto del santuario, estaba Miranda, usando un vestido exquisito.Estaba deslumbrantemente hermosa y radiante, emanaba una nobleza natural, como si fuera la encarnación de la Diosa Luna en persona, era imposible apartar la mirada de ella. Pero lo que dijo superó con creces cualquier expectativa.Toriel fue el primero en reaccionar y caminó hacia ella con rapidez, visiblemente confundido. "Miranda, ¿por qué la llamaste 'mamá'?" Preguntó con voz tensa.Eloísa se adelantó enseguida, forzando una sonrisa. "Miranda, cariño, yo soy la madre de Toriel. Esa mujer solo fue una tonta con dinero, bueno... ya ni eso. Ahora solo es una tonta sin nada, seguro la confundiste con alguien más."Damián asintió con energía. "Así es, puede que no conozcas todos los detalles de nuestra familia. Ariel cuidó de Toriel cuando era niño, pero no hay ningún lazo de sangre entre ellos, así que no tienes por qué prestarle atención, no lo merece."Al oí
Leer más