Inicio / Romántica / CORAZÓN GITANO. / Capítulo 1 - Capítulo 10
Todos los capítulos de CORAZÓN GITANO.: Capítulo 1 - Capítulo 10
126 chapters
CAPÍTULO 1
Vanessa abrió los ojos lentamente, parpadeando varias veces mientras intentaba despejar la neblina de su mente. El suave resplandor de la luz del amanecer se filtraba por las blancas cortinas entreabiertas, iluminando la habitación con una luz tenue que agradece, pues evitaba que su dolor de cabeza empeorara.Un escalofrío recorrió su espalda al darse cuenta de que no reconocía el lugar en absoluto. En un principio, pensó que estaba en la casa de Silvia, su compañera de trabajo, pero al notar que no era así, no dudó en incorporarse rápidamente en la cama. ¡Al demonio con el dolor de cabeza! Mirando a su alrededor, intentaba entender dónde se encontraba.El corazón comenzó a latirle con fuerza en el pecho cuando notó que no estaba sola en la cama, y eso no era lo único. Al levantar la sábana, notó que únicamente llevaba puesta su ropa interior. Un escalofrío de temor la recorrió mientras se aferraba a las sábanas, tratando de recordar cómo había llegado hasta allí y aún más impor
Leer más
CAPÍTULO 2
— Necesitaré otra descripción de ella fuera de su color de cabello o su perfume — son las palabras de su asistente tras cerrar su libreta de anotaciones. — El cabello negro es un rasgo muy común en nuestro país.— Estoy seguro de que podrás resolverlo. — Emil observa al hombre mayor tras quitar su mirada de los papeles que se encuentra revisando. — ¿Hay algún otro asunto pendiente?— Solo uno, su abuelo llamó para recordar que la fiesta de compromiso se realizará a finales de mes, le pide llegar con tiempo para conseguir un regalo acorde a la novia.Y solo esas palabras sirvieron para que el buen humor de Emil se acabara. Él sabe que debe respetar las tradiciones de la familia, desde pequeño fue criado dentro de ellas, pero en realidad, él guardaba la esperanza de que un día podría elegir con quien casarse, pero al final del día, simplemente aquella fue una opción que realmente nunca tuvo.Plesa – Rumania.El sol se filtra entre las ramas de los árboles que bordean el camino sinuoso
Leer más
CAPÍTULO 3
Una vez solo, Emil se deja caer en el respaldo de la silla, pasándose una mano por el cabello en un gesto de frustración. No pasa mucho para que unos pasos se hagan notar en la habitación. Pensando que es su padre quien regresó, Emil se prepara para seguir la discusión, pero es la voz de su abuelo la que se hace notar en la habitación. Al girarse hacia el mayor, Emil nota cómo este le observa con una mirada comprensiva.— ¿Hay alguna razón especial por la que te estás resistiendo tanto a este compromiso? — pregunta el abuelo con suavidad, su tono sereno deja claro que el paso del tiempo le enseñó a notar lo que otros intentan esconder.Emil niega con un movimiento de cabeza. En realidad, no tiene a nadie en su vida a quien pueda llamar "especial", aunque tampoco puede negar que nunca deja pasar la oportunidad de divertirse cada vez que puede. Ante esa última idea, el recuerdo de la hermosa desconocida con la que compartió algunas noches atrás le viene a la memoria, pero rápidament
Leer más
CAPÍTULO 4
— ¡Aquí están! — interrumpe con emoción la voz de su tía al ingresar a la cocina. La expresión de Vanessa se transforma de inmediato, con sus dudas siendo sustituidas por una careta de alegría y tranquilidad que le es fácil reconocer. — ¡Vanessa, estás hermosa! Pero deberías venir a visitarnos más seguido. — Hola, tía Juliette —, acercándose a la mayor, Vanessa la abraza con fuerza mientras la escucha. — Intentaré que el trabajo me deje un poco más de tiempo. — Trabajo —, replica una nueva voz tras ellos. Al separarse del abrazo, Vanessa ve a su tío quien entra a la cocina para ir por un poco de agua. — Tu trabajo debería ser atender a tu esposo; alguien tan hermosa como tú debería estar en casa mientras su esposo le da todo. Nunca entenderé por qué Nicolae te dejó seguir esa loca idea de trabajar en la ciudad y, peor todavía, el tener de amigo a ese payo. Y esas palabras bastaron para que una fuerte incomodidad se instalara en el ambiente. Allí estaba una de las razones por las
Leer más
CAPÍTULO 5
— Lo siento —, murmura Emil, extendiendo una mano para ayudarla a estabilizarse del tropiezo. Su voz es suave y llena de sorpresa al reconocer a Vanessa.Vanessa acepta la ayuda de Emil, sintiendo la electricidad en el aire entre ellos. — No, fui yo quien no miró por dónde iba —, responde con voz temblorosa, sintiendo la intensidad de la mirada de Emil, una parte de ella deseando que el chico no la reconozca.Un silencio incómodo se cierne entre ellos, cargado de las emociones no dichas que cada uno se encuentra experimentando. Vanessa se siente atrapada, el torbellino de sentimientos que siente se vuelven aún mayores. Por su parte, la mirada de Emil no disimula el placer que siente de haber encontrado a la pelinegra en ese lugar tan poco probable.Emil rompe el silencio primero, una leve sonrisa haciéndose presente en sus labios. — Parece que nos encontramos de nuevo.Vanessa asiente automáticamente, pero el saber que el desconocido la reconoce, solo hace crecer más el nudo en su
Leer más
CAPÍTULO 6
— ¿Cómo que se quedarán aquí? — Vanessa siente que el agarre que tiene sobre la bandeja de bebidas se debilita al escuchar las palabras de su madre. — Pensé que se marcharían después de la fiesta de mañana.— Pues ya ves que no, tu padre los invitó a quedarse aquí —, sin darle mucha importancia a su hija mayor, Vaiana toma la bandeja de sus manos y le indica que ella lleve la bandeja de bocadillos. — Además, la boda será en un mes, hay mucho que preparar y será más fácil si Tatiana y él se conocen mejor antes de ese día. — Sin decir más, la mayor sale de la cocina y deja a Vanessa sola.Al encontrarse sola, Vanessa se apoya en el mesón de la cocina y deja salir un suspiro de frustración. Si Emil se queda allí, sería casi imposible evitarle; aunque, tal vez podría aprovechar esa oportunidad para saber qué fue lo que pasó durante la fiesta, pero esa idea muere tan rápidamente como llega en el momento que reacciona sobre que se trata del prometido de su hermanita.::— ¿Dónde está Vanes
Leer más
CAPÍTULO 7
Vanessa siente cómo el rubor sube a sus mejillas ante la pregunta directa de Emil. Trata de mantener la compostura, pero su corazón late con fuerza, casi ahogando el sonido de su propia voz al responder:— Yo... eso, no sé de qué estás hablando.Su respuesta suena débil incluso a sus propios oídos, y Emil levanta una ceja con una sonrisa traviesa, casi como si estuviera sintiendo placer ante la situación y la negativa de la pelirroja.— ¿No lo sabes? — murmura, acercándose aún poco más, hasta que su aliento a menta choca con Vanessa. — ¿O quizás huiste porque no querías que te detuviera? ¿No será que estabas huyendo de mí y de lo que ocurrió?El corazón de Vanessa da un vuelco ante la intensidad de la mirada de Emil, y lucha por mantener la calma mientras busca una respuesta convincente, una que salga con seguridad y que no la haga desbordar finalmente en llanto.— Emil, por favor... — dice intentando mantener la calma, pero siente cómo el nudo que se forma en su garganta la ahoga.Ca
Leer más
CAPÍTULO 8
Emil se dejó caer en la mullida cama y cerró sus ojos. Disfrutando del silencio que envuelve la habitación, se deja ir en sus pensamientos, no se sorprende cuando al igual que la noche anterior, lo primero que aparece en su pensamiento es el recuerdo de esa hermosa sonrisa y brillante mirada.*En ese punto, el bullicio de la fiesta lo hace sentirse abrumado, esto por las risas forzadas y las conversaciones superficiales que lo rodeaban. Él no es ajeno a ese mundo, pero en ocasiones le resulta demasiado agotador.Caminando entre los invitados con una copa en la mano, responde con cortesía a los saludos y los múltiples intentos de iniciar una conversación sobre negocios que se le presentan. Sin embargo, ninguna de las interacciones logra despertar su interés genuino, las insinuaciones de las mujeres que se aceran a él en esa ocasión las siente fuera de lugar. la idea de marcharse se torna en una decisión firme en su cabeza una vez que establece que nada allí llama su atención, o por lo
Leer más
CAPÍTULO 9
Vanessa se despertó sobresaltada por el bullicio que resuena desde el exterior de la casa. El sonido de motores rugientes y voces animadas la arrancó bruscamente de su sueño. Parpadeando somnolienta, se frotó los ojos y se incorporó lentamente en la cama.El sol apenas comenzaba a filtrarse a través de las cortinas, eso le dio una noción de la hora que podría ser. Levantándose acomoda su pijama luego de estirarse. Aunque no viene tan seguido como le gustaría, la casa de sus padres siempre está llena de un aire familiar y acogedor que la hace sentir segura, y aunque ya está acostumbrada a la ciudad al ritmo que esta le pide, ama toda la tranquilidad que le brinda el campo.Siguiendo el ruido, Vanessa salió de su habitación y recorrió el pasillo, guiada por el delicioso aroma que se filtraba desde la cocina. Al llegar, encontró a su madre y su tía moviéndose con gracia entre los fogones, preparando un desayuno abundante.—¿Qué está pasando afuera? —preguntó con voz aun adormilada, frotá
Leer más
CAPÍTULO 10
Vanessa se sintió horrible ante el tono usado por su abuela; lo único que deseó es que el suelo se abriera bajo sus pies. La tensión en el ambiente era palpable, y su corazón latía con fuerza en su pecho mientras enfrentaba las miradas acusatorias de su familia. Se mordió el labio inferior, luchando por encontrar las palabras adecuadas para explicar lo que acababan de presenciar. Emil, por su parte, se frotó la mejilla donde Vanessa lo había golpeado, su expresión una mezcla de sorpresa y confusión. —Papá, abuela —comenzó Vanessa, intentando mantener la compostura—. Yo… puedo explicarlo, verán… Su padre la interrumpió, con una mirada severa que la hizo estremecerse. — ¿Explicarlo, Vanessa? Trataste de forma grosera al prometido de tu hermana —dijo con firmeza—. Esto es vergonzoso y completamente inaceptable. Los abuelos de ambos permanecieron en silencio, observando la escena con gestos serios. Vanessa se sintió aún más angustiada ante su mirada penetrante. — ¡Fue mi culpa! —son
Leer más