¿Cómo se puede vivir con un dolor tan grande? Y no hablo de un dolor físico, de esos que se curan con una pastilla o manteniendo reposo, hablo de ese dolor mental, ese dolor que te hace querer tirarte de un puente, de ese que ni yendo a especialistas de quita.Un dolor que no puedes evadir por mucho que quieras, porque siempre tendrás esas voces que te digan: «naciste para esto, para sufrir, para vivir en tu oscura realidad», y, ¿cómo quitar esas voces? Cada día se hacían más grandes, más fuertes, más altas.Era imposible.Con la llegada del hijo mayor de la familia Ortega, Mesen supo que nunca podría quitarse ese dolor, que por mucho que le costara entender esa era su realidad, vivir con un
Leer más