Capítulo 34: Hijo de mi alma.
Aquellas palabras retumbaron en la mente de Nick, su pecho le dolía tuvo que volver a aspirar oxígeno, el dolor que en ese momento sentía no se podía explicar, a su mente se vinieron los recuerdos de la carita de su pequeñito, los planes que él tenía de enseñarle a jugar futbol, llevarle a los partidos, acompañarlo en su primer día de clases, verlo crecer y hacerse un hombre, ahora nada de eso sería posible, la maldad de una mujer se había enseñado con un ser inocente. —Señor Grimaldi, ¿Sigue ahí?... —Sí, agente —respondió Nicholas con la voz entrecortada. —Es necesario que vengan a retirar los restos de su hijo. Nick colgó la llamada, no tenía el valor para decirle a Ariadna, esa noticia la iba a enloquecer, en ese preciso momento ella apareció, observó los ojos de su esposo llenos de lágrimas y que no podía pronunciar palabra, entonces no fue necesario que él hablara. Ariadna lo dedujo por
Leer más