En la entrada de la villa, cuando salieron del coche, Isabella estaba a punto de abrir la puerta, cuando la puerta se abrió de golpe. La cabeza de Rubén se asomó emocionado y con una expresión de chisme en su rostro. ¡Isa, regresaste! Isabella asintió. Rubén la miró antes de ver a Sebastián qué está de pie detrás de Isabella, mientras una sonrisa cómplice se dibujaba en su rostro. Lo sé. El aire está lleno de burbujas rosas ahora. Isabella ladeó la cabeza confundida y le lanzó una mirada. Sin embargo, Rubén dejó escapar una tos y se entró a la villa, en un momento de despiste Rubén le lanzó una mirada a Sebastián y dijo: sigue así y le levantó un dedo de aceptación a lo que hacía. Luego de entrar a la villa, Isabella se volvió confundida solo para ver a Sebastián, que tenía las manos en los bolsillos con la cabeza un poco ladeada y dijo con calma: ¿Te quedas a cenar? ¿No se te olvida algo? Isabella retrocedió en silencio, y se dirigió a la sala donde estaba sentado Rubén.
En la sala de la villa se sentía una gran tensión por parte de Isabella, en ese momento se acercó el mayordomo y dijo Señorita señores la cena está servida, Rubén se levantó y dijo: ¿piénsalo Isa con Sebastián y conmigo aquí se les hará más difícil atacarte, es mejor anunciar el compromiso lo antes posible? Isabella bajo su rostro y dijo: ¡dame tiempo para pensarlo! Luego Rubén miró a Sebastián y dijo: ¿y tú? Sebastián dijo, ¡lo más pronto mejor! Y caminaron al comedor, en la mesa del comedor estaba servida con ricos manjares, Rubén se sentó en el asiento principal mientras Sebastián se sentaba a su derecha e Isabela a la izquierda, al ver Sebastián qué estaban demasiado separados de ella se levantó y se sentó a la par. Eso no paso desapercibido para Rubén y curvó sus labios en una sonrisa, luego puso un trozo de filete en el plato de Isabella y dijo, come está delicioso. Sebastián arrugó su frente y tomó unos camarones, los peló y se los puso a un lado en el plato. En e
Tres días después, Zoe entro furiosa a una cafetería, dijo: estos días he estado de muy mal humor. Más vale que esto sea bueno. Luna bebió un sorbo de café y dijo con Calma: Lo sé. Por eso te invité a salir. Para que te calmes. Zoe tomó asiento frente a Luna y permaneció en silencio. Sus antiguas amigas se reía de ellas o no querían salir con ella, Luna fue la primera en invitarla a salir después que le paso algo humillante. Luna se sirvió un vaso de bebida. ¿Escúpelo? No tengo tiempo para hablar con rodeos. Zoe dejó la taza, toda Enfadada y echando humo. Esa Z*rra está intentando quitarle el puesto a mi padre, y tomarlo ella. ¿Cómo esperas que me calme y beba? Zoe, era una chica inteligente. Deberías mantenerte racional y ver las cosas de manera objetiva. ¿Qué quieres decir? Una sonrisa había aparecido en los labios de Luna. Es fácil, no debes enfrentarte a Isabella. Tu padre ha llevado el control del Grupo Fernández, y solo él sabe la estabilidad de la empresa, seg
Cuando llegaron al restaurante, unas damas bien elegantes y vestidas de marca, charlaban del hombre más guapo de la ciudad ellas eran las esposas de los cabezas de las primeras cuatro familias Judith Suares esposa de Eleazar Suares presidente del grupo Suares, junto con Erika Méndez también esposa de Aldo del grupo Méndez. Estas Señoras habían querido presentarles a sus hijas a Sebastián, pero el siempre declinada. ¿Desde cuándo me conocen tan bien? De repente, una voz las sorprendió. Las mujeres se paralizaron y palidecieron y lentamente se dieron la vuelta. Viendo a Sebastián, que había aparecido sin que ellas se dieran cuenta. ¿Cuándo había llegado? Los labios de Sebastián se curvaron mientras esperaba la respuesta de las damas. Disculpe presidente Gallardo, no era nuestra intención hablar mal de usted, Anny mansera y pregunto: ¿cuánto escucho presidente Gallardo? Casi todo, respondió Sebastián con sinceridad cuando llegó, vio a las dos mujeres confrontándose
Después que Sebastián e Isabella terminaron de cenar. Planeó en enviar a Isabella a casa. Sebastián pensó: “Isa ha pasado por mucho en estos días. Necesita descansar bien” Déjame enviarte a casa con el chófer, debes descansar primero. Tus ojeras están a la vista. Se nota como que no has descansado últimamente. En los ojos de Sebastián había amor y gentileza, era evidente que a Sebastián le gustaba mucho Isabella. Isabella estaba sorprendida y a la vez confundida. De hecho, se me está haciendo difícil conciliar el sueño últimamente. Me quedo despierta hasta tarde. Isabella no pensó mucho en lo que le dijo Sebastián, y siguió su camino. Ella había pensado en confesarle qué había aceptado la propuesta del compromiso, pero se tragó sus palabras. Sebastián estaba un poco angustiado, pero no lo demostró en su rostro. “Entonces te mandaré a descansar, ve con cuidado” Cuándo Isabella Regreso a la villa, encontró que Tatiana Ortega estaba esperándola en la puerta. Inclu
Después que Tatiana dejó la residencia Fernández, se subió a su coche, frunció la frente y pego con los puños en el volante y grito frustrada y juró vengarse de Isabela, tomó su móvil e hizo una llamada. Al contestar la llamada, la otra persona contesto: Tatiana, cariño te acordaste de mí, pensé que nunca me llamarías. Lo que Ella contestó: ¿tenías que haberte mantenido alejado de la ciudad y mírate donde estás, dime cómo diablos se dio cuenta Isabela que fue una trampa para sus padres? El sujeto contestó, no tengo ni una p*ta ideas de lo que me estás hablando, salí de la ciudad hace cinco y nunca he regresado, no sé de qué carajos estás hablando. Tatiana guardó silencio y dijo necesitó otro trabajo, pero esta vez quiero que sea perfecto. La otra persona se mantuvo en silencio y dijo cuál es el trabajo que necesitas, ella dijo: quiero que hagas desaparecer a Isabella para siempre, la quiero bien muerta, será posible que puedas cumplir con esta orden a la perfección o me busco
Isabella se quedó sin palabras al escuchar esas palabras. Solo se escuchó el sonido del viento silbando en sus oídos. El conductor hizo un giro repentino, haciendo que Isabella fuera arrojada hacia su asiento. “Señorita, por favor abróchese el cinturón de seguridad. La llevaré a un área menos concurrida”, Instruyó el conductor. Finalmente, reaccionando, Isabella asintió mientras cerraba la ventana del auto y se ha abrochado rápidamente el cinturón de seguridad. El Rolls-Royce negro corría, maniobrando hábilmente entre los vehículos en la carretera. Isabella sentía el corazón latir en su pecho. Cada vez que evitaban por poco chocar con un auto en frente, en lo único que pensaba era en quien abia dañada su auto. Ella agarró fuertemente su teléfono, y justo en ese momento, llego la llamada de Isaac Mendoza, asistente de Sebastián. Temblando, Isabella contestó la llamada, Isaac pregunto, dice el presidente Gallardo que no le envió su ubicación. Isabella miró hacia dela
Zoe intentó por todos los medio entrar al cuarto de Isabella, en ese momento vio salir a Sebastián de la habitación, se dirigió a la oficina del director dejando a Isabella dormida y con la aguja insertada en su brazo por el suero.Zoo aprovechó la oportunidad y se coló a la habitación, pero al intentar ingresar dijo: “Mald*cion” un doctor entro a revisar a Isabella, quitándole la oportunidad de interferir en la recuperación de Isabella.Zoe, afligida y a la vez enfurecida hasta la médula, quería ver si Isabella estaba despierta o dormida para hacer su fechoría, al cabo de unos cinco minutos, un hombre elegante y con traje negro miraba para todos los lados revisando que nadie lo viera, y entrar a la habitación. Zoe no conocía a ese hombre, pero no le quito la vista de encima, estuvo pendiente de todos los movimientos de recién llegado.Zoe vigilando desde lejos pudo ver cómo el hombre vestido de negro entraba a la habitación se paraba a la par de la cama de Isabella, le rec