Pasaron más de dos semanas, Fernanda seguia con su trabajo como siempre no habia visto a Max, pero él la habia llamado un par de veces. Se habia sentido cansada los ultimos dias, seguia en casa de su amiga, pero creyó que ya era tiempo de buscar su propio espacio.

Buscó algo pequeño, sólo para ella, encontró un lugar muy cerca del hospital. Podría caminar todos los dias al trabajo, así que se instalaría al dia siguente.

- ¿Estás segura Fer? -dijo Lucy- no me molesta tu compañía.

- Yo se que no, pero ya es tiempo.

-¿Y que pasa con Max?¿ lo has visto? .

- No, solo me llamó. Mañana me mudaré, quiero que vengas para que sepas dónde viviré.

- Bien, mañana lo haremos, mientras tanto, ve a dormir, te ves fatigada.

****

Dia siguente, por la noche.

Max recibió una llamada de Lucy, preocupada, Fernanda se habia desmayado durante su turno.

-Ahora voy- fue hasta su auto y salio apresurado.

Cuando llegó al hospital, la encontró en una camilla dormida, se sentó a su lado y tomó su mano.

-¿Qué haces aquí ?- dijo ella cuándo despertó.

- Te desmayaste, Lucy me llamó, ¿estás bien?

- ¿Y porqué te llamó a ti?

-¡ Pues debe ser porque soy tu esposo Fernanda! - dijo irritado- así que ahora mismo vas a ir a casa conmigo.

- Yo no quiero ir a tu casa, tengo la mía.

- Pues te llevaré a la tuya y me quedaré contigo.

Ella abrió la boca, para replicar.

-No aceptaré una negativa.- se levantó y desapareció un momento.

Casualmente Leo pasó por ahí, la vio aún acostada y la abordó.

-¿ Ya estás mejor? todos se enteraron de lo que ocurrió- se acercó a ella, lo suficiente para resultarle incómodo.

- Si, ya estoy bien - respondió y se sentó.

- Y como siempre, estas aquí sola.

- Ella no está sola - dijo Max detrás de él - haz el favor de retirarte, estas invadiendo su espacio.

- Yo solo pasaba por aqui- respondió Leo sonriendo - espero que mejores.

- Ya podemos irnos, llamé a tu jefa, dijo que descansaras- Fernanda no se movía- vamos, Fer, no seas infantil.

Ella rodó los ojos, y bajó con cuidado, él tomó su maleta y salieron de ahi. Ella se dirigió a su departamento caminando.

- Creí que aún estabas con Lucy.

- Me mudé ayer, ya no quería molestarla.

Ella abrió la puerta, dudando si lo dejarlo pasar o no.

- Te dije que me quedaría contigo, solo te cuidaré, lo prometo. Dormiré en el sillón.

Ella asintió, y permitió que se quedara. Tenia que admitir que dormía mejor sabiendo que él estaba ahí.

Al dia siguente se habia ido, asi que se duchó pero aún no se sentia bien, estaba mareada y con náuseas. De repente tocaron a su puerta, Max habia regresado, con comida y su café favorito.

- Creí que tendrias hambre, traje café y té, porque no sabia que querias y la ensalada que te gusta.

- Te lo agradezco, no tengo mucha hambre, ahora necesito descansar.

- Bien, me iré, - suspiró resignado-por favor llámame si necesitas algo.