-¡Qué niño tan guapo!, ¿quieres comer helado mientras hablo con tu mami?-¡Si tia Lucy! - le ofreció una taza se fue corriendo y se sentó a comerlo.- Tengo que decirlo, es idéntico a Max.- Lo sé... lo vi esta mañana, Maxi chocó contra él, no se puede negar que es su hijo.- Estuvo preguntando mucho tiempo por tu paradero, ¿sabias que va a casarse? con esa tal Isabela . Apenas anunciaron su compromiso hace unos dias.- No crei que esperaría tanto tiempo. - Fer, amiga, yo creo que él aún está enamorado de ti.Ella rió sin humor -Si hubieras visto como me habló hace un rato, no dirias lo mismo.-¿ Tu lo amas también, verdad?Ella no respondió de inmediato, sintió cierta tristeza.- Es que lo veo a diario, no puedo evitarlo. - miró a su hijo.-¿Qué pasó realmente contigo? tomaste la decisión de una forma tan apresurada, tu nunca hiciste eso antes.- solo voy a decirte que si no dejaba a Max, le harian daño, y tambien a mi bebé ... no sé como supieron de mi embarazo, solo Max y tú lo sa
Max estuvo muy pensativo esa mañana, tenía que saber los motivos de Fernanda para ocultarse junto con su hijo. Había algo muy extraño en todo eso.Ya estaba decidido, iba a terminar con Isabela, porque supo en el instante que la vió, que no habia dejado de amar a Fernanda. Solo que ahora le resultó más doloroso, por el hecho de conocer a su hijo y no poder estar junto a él. -Amigo, tengo que salir, me surgió una emergencia- dijo Diego sacándolo de sus pensamientos- no creo que pueda volver.- Adelante, no hay problema. ****Max habia ido a buscar a Fernanda en casa de Lucy, se encontró con la sorpresa de que ya se habia marchado.-¿ Para qué quieres saber dónde esta?, tu vas a casarte, debes dejarla vivir en paz.- Lucy, por favor, aún la amo y sé que ella siente lo mismo , acabo de conocer a mi hijo, y no quiero perder más tiempo, además voy a terminar el compromiso. - Lo prometí, dije que no te diría nada, lo siento.Él se dirigia a su auto desanimado, cuando lo llamó. - Espera
Max esperó a Isabela afuera de su casa, probablemente Diego ya le habia alertado de la situación. Cuando ella llegó, lo miró, tratando de fingir una calma que no sentía. -Creo que ya sabes por qué estoy aquí. - dijo él con seriedad. - Lo que te hayan dicho, no es verdad.El rio sin humor - Nadie me contó nada, yo lo vi todo. ¿Desde hace cuanto tiempo de acuestas con Diego? - dijo cruzándose de brazos.Ella lo miró sorprendida. - Yo... no...no estoy...- Por favor, no tiene caso negarlo - dijo tranquilamente, se acercó un poco a ella, quería dejar muy claras sus palabras - A partir de este momento, tú y yo terminamos.- ¡No puedes hacerme esto! tenemos un compromiso, ¿Que van a decir de mi?- No me sorprende que eso sea lo único que te importe, además del dinero.-¿Esto es por la estúpida de Fernanda verdad?, viene aquí y tú te pones a sus pies.- ¡Claro que es por ella, porque la amo! y porque tú te enredaste con mi mejor amigo.El no dijo más, solo se dio la vuelta y se ma
Fernanda regresaba del preescolar de la mano con su hijo, siempre caminaban, ya que no estaba lejos de su hogar, y eso le daba la oportunidad de charlar con él, le gustaba dibujar y ya habia aprendido a trazar sus primeras letras. Casi a punto de llegar, se soltó de su mano, corrió hacia un hombre y lo saludo.- ¡ Amigo!- dijo emocionado, y se lanzó a sus brazos, como si lo hubiera hecho toda su vida, Max lo levantó y lo abrazó fuertemente. - ¿ Cómo estas amigo? ¿ Fuiste a la escuela? -dijo sin soltarlo, siguieron conversando hasta que su madre lo alcanzó. - Maxi,¿ cuantas veces te he dicho que no debes correr?-¡Pero es mi amigo, mami! - Max lo bajó lentamente. -Entra a la casa- le dijo - ¿ Cómo nos encontraste?.- Tengo muchos contactos, ya deberias de saberlo. Vine por ti, por los dos, y quiero que Max sepa que soy su padre.- ¡No puedes simplemente venir a cambiar mi vida y la de Max sólo porque tú quieres! Estamos muy bien aquí, mi hijo tiene amigos y personas que lo quieren.
Pasaron algunos dias, Max solo había hablado con Fernanda por teléfono, su hijo queria volver a verlo, pero estaba muy ocupado.Tenia muchas cosas que resolver, logró cerrar con éxito algunos de sus casos, y no aceptó nuevos.El fin de semana decidió ir a ver a su hijo. Al llegar no los encontró, asi que la llamó. -*¿ Están bien?.- Si- dijo confundida por la pregunta. - ¿Hay algún problema?.- Ninguno, solo queria ver a Max.- no dijiste que venias, estabamos por regresar.- Entonces esperaré *Max vió a su hijo, a lo lejos, fue a su encuentro y lo abrazó. - ¡Hola amigo!.-¡Papi!.- ¿ Cuantó te quedarás? - preguntó al ver su maleta. - Todo el fin de semana, si me aceptas.- Claro, puedes dormir en el sillón. Él le lanzó una mirada interrogante.- No debo meter hombres extraños a mi cama.Maxi corrió adentro de la casa.- Mami, ya quiero dormir.- dijo frotando sus ojos.- Ya voy cariño.Cuando se duchó y se vistió, lo arroparon, y estuvieron junto a él hasta que se quedó dormido.
Fernanda llevaba a Maxi a la escuela, como siempre, caminaban, notó que su guardaespaldas no los habia seguido, apresuró el paso, mirando hacia todas partes, respiraba agitada, tenía el presentimiento de que algo estaba por ocurrir, y no era nada bueno.De repente sintió que alguien cubría su boca, y después todo fue oscuridad.****Eran las diez de la mañana, en su oficina, Max cerraba una difícil negociación de bienes, pero por otro motivo, se encontraba intranquilo, sus pensamientos volaban hacia Fernanda y su hijo. Al terminar decidió llamarla, pero el teléfono sonó una y otra vez, y no obtuvo respuesta.En ese momento, recibió una llamada desesperada de Lucy.- No encuentran a Fer ni a max, ella lo llevó a la escuela pero nunca llegaron.-¿ Cuando pasó?- preguntó levantándose abruptamente de su silla. - Hace como una hora.- Tranquila, yo me encargo - dijo.Pero Max estaba menos que tranquilo.****Fernanda despertó, estaba en una pequeña habitación, se sentía mareada y desorie
La cabeza le dolía, y estaba mareada, abrió los ojos y extrañamente reconoció el lugar donde se encontraba, el mismo que había dejado hace cuatro años, cuando fue forzada a dejar su vida con Max.Una emocionada Lucy llegó hasta ella.- ¡Estas bien amiga! Estaba muy preocupada - dijo abrazándola.-¿Dónde esta max?- dijo nerviosa.-Tranquila, tu hijo está bien, ahora está con su padre.-¿Su padre?, - preguntó confundida- ¿Porqué estoy aquí?.- ¿No recuerdas nada?, ¿Porqué lo preguntas?- Estaba en el norte, con maxi, ¿cómo es que llegue aquí?- Te trajeron hasta aquí, en auto, drogada, la policía y Max intervinieron, y te rescataron.-¿Quién? nunca logré ver a nadie, cuando entraron por mi se cubrieron el rostro, auque sabía de la amenaza a Max.-Creo que es mejor que hables con él, ya te dirá todo.Lucy la dejó sola un momento, para que descansara. Entonces escuchó una voz conocida.- Miren lo que trajo el gato, hacía mucho tiempo que no te veía por aquí, desde aquella vez que te
Fernanda despertó, aspirando un aroma muy familiar, por un momento olvidó dónde estaba, hasta que max entró corriendo y aterrizó sobre ella, y solo sonrió. -¡ mami !, - le dió un beso en la mejilla y la abrazó. - Hola cariño, ¿estás bien?- Si, papi me dió de comer.- ¿ Porqué no me despertaste? - preguntó a Max - no podemos quedarnos, dijiste que irías con nosotros, ¿ya cambiaste de opinión?.- Claro que no, te lo dije y lo cumpliré. Escucha ... - le dijo acunando su rostro - debes darme tiempo, ya casi termino mis asuntos, ... me gustaría que te quedaras más, pero, es tu decisión. -Solo nos quedaremos otro día. Tengo que hablar con Lucy.-Está Bien. - dijo resignado.****- ¿Asi que fue Leo? - dijo Lucy- pero como es posible que se conocieran. -Supongo que Max le hablo de él, a Diego y después solo lo ubicó, te lo dije, solo tú, Max y la doctora salas supieron de mi embarazo ese dia.- Pero ¿ Qué ganaba él con eso?.- Nunca toleró a Max y menos por haberlo golpeado, tal vez