Habia tantas opciones, restaurantes para elegir donde desayunar, lugares de diversión para bajar la tensión entre ambos, o simplemente caminar por la orilla del mar. Hacer cualquier cosa pero Malcolm solo quería estar con Arianne.Algo brotaba en su interior, un apego, una necesidad de proteger a esa mujer tan pequeña y delicada. Sonreía como un puberto y cuando ella lo atrapaba mirándolo como un idiota agachaba la cabeza, de pronto no sabia que decir, solo quería alabar su belleza. El hotel ofrecía paseo en bicicleta, Malcolm pidió dos y una cangurera para llevar a Luci, el vestido de Arianne era engorroso, se enreda en las ruedas de la bicicleta.Ella tomo a Luci, y Malcolm decidido pedalear, mientras que su esposa llevando a su pequeña hija ajustada a su pecho iban sentadas en el banquito de la bicicleta. Ella se sujetó tomándolo de su camiseta.Pasearon por alrededor del hotel, este contaba con un especie de laberinto lo único que dividía un corredor y otro eran pequeñas jardine
—Malcolm… —murmuro Arianne, sin control a punto de gemirlo, de gritarlo. Cada movimiento era más rápido, rudo y más cercano a la agonía. Su mente perturbada mantenía sus ojos cerrados y envuelta en estrellas y mareos.Malcolm era duro y caliente.Ryan no podía dormir, solo pensando en el beso que le robo a la pecosa, cada beso era mejor que el anterior, estaba obsesionado con ella, con hacerla sentir lo que un hombre verdadero le podía hacer sentir, era tan fácil seducirla.Se estaba volviendo loco, si seguían juntos tarde o temprano la orillaría a consumar su matrimonio, obligarla era una palabra extrema. Era demasiada tentación el saber que era hermosa sensual pero además era inteligente. Maldijo jamás se había enamorado de una niña lista.Agio la cabeza, enamorado. El no puede enamorarse. El amor es un sentimiento desafortunado que embrutece a los hombres y los llevaba a cometer tonterías… se golpeo la frente.—Malcolm, Mmm… —gimió mas fuerte. —Mal…Recostado en el sofá, alzo la ca
Caminaron de vuelta a la cama, Ryan se quito la delgada playera que lo cubría, tomo a Arianne de la cintura y la pego a su cuerpo nuevamente, devorando sus labios.Ella respiraba agitadamente, un poco de cordura se mantenía alerta tratando de impedir que esto sucediera, pensando en detenerlo, pero era tan agradable la sensación, sus manos acariciando su cuerpo con una delicadeza y destreza, sus labios robándole el aliento, su aroma era fresco y adictivo.Deslizo sus manos por su torso desnudo, siempre se preguntó cómo se sentiría esta sensación, y ahora se daba cuenta que no existía comparación, era agradable, muy placentero.Ella alcanzo el botón de los pantalones de Ryan, los abrió y bajo el zíper. El abrió sus ojos un segundo asombrado de la iniciativa, tomo la punta de su blusa y la saco de su cuerpo.Arianne tenia los pechos más bonitos que había visto en su vida.—Sucede algo…—ella pensó que tal vez él la veía como una niña,—No, no te cubras cariño, déjame admirare un segundo,
Despertar viendo su techo enmohecido la hacía enfadar, se giró la mitad de su cuerpo en la cama, hundiendo la cara en la almohada y lanzo un grito, pataleo. Fue tan cobarde, y era tan cruel al mantenerse alejada de Malcolm siendo que ahora la necesitaba para cuidad de Luci.Estaba segura de que era lo mejor. Su corazón palpitaba sus labios fantaseaban con el recuerdo de aquel beso en el ascensor.—¿Por qué fue tan cruel?Sus vacaciones habían concluido muy rápido y lo peor es que todo fueron un desastre que no pudo disfrutar plenamente. Al menos Luci habia salido ilesa de su alergia, su pronta atención solo la hizo durar una noche en observación, por la mañana volvieron al hotel para tomar sus cosas y regresar a casa.Salió de la cama y entro en la ducha, no todo fue tan malo, ese día se divirtieron de principio a fin, Ryan era muy jovial. Fue el mejor día de su vida.Escucho la puerta de su apartamento abrirse, Rous entro con una bolsa de fruta, algunos productos de limpieza y un paq
Ella cerro los ojos, esperaba que la besara, se lamio los labios, Malcolm observó el color rojo en sus mejillas, el tono de su piel era hermoso, sus pecas eran mágicas, sus labios tentadores, suspiro, los deseaba como un delicioso majar.Levanto su rostro y lo haría, no resistiría otro instante de agoniza, antes de que sus labios se unieran Arianne lo rechazo. A esto llegarían si su convivencia se hace más constante, ella no podrá detenerlo para siempre.—Esto solo durara seis meses no tiene caso mudar mis cosas —sentencio.Malcolm se puso pálido—¿Seis meses? en eso no quedamos—No quedamos en muchas cosas y aun así han cambiado, ya lo decidí y no cambiare de opinión, seis meses señor Ryan le daré seis meses de mi vida, después usted me dará el divorcio.**Al subir Arianne se encontró con un enorme ramo de flores, lo colocaron sobre su escritorio, flores moradas amarillas, rosas, blancas, rojas, de tantos colores que no era tan agradable a la vista, era grande que ocupaba todo el es
—Tan mal te fue con Arianne en tu luna de miel —habia llamado a su único amigo, el que podria entenderlo —No hubo…—levanto las cejas con una mirada libidinosa.—No hablare contigo de eso, —cometido un error. No debió llamarlo.Daniel era su confidente, conocía más detalles que ninguna otra persona sobre su vida amorosa, pero con Arianne las cosas eran diferentes, ella no era la típica chica con la que estaba costumbrado a pasar una noche o incluso un viaje de vacaciones. Y aunque hubiera querido contarle algo, era imposible, Arianne estaba fuera de su colección. Ella era única. Bebió de un trago la copa—¡Oye!, es demasiado temprano para beber no te parece. —Daniel le quito el vaso pero era tarde. El líquido ámbar ya estaba en su cuerpo. —Tuvimos un día maravilloso, parecíamos una familia pero no entiendo por que Nicoll insiste en atormentarme ya tiene lo que quería, es famosa internacionalmente, por que no deja de fastidiar.—Esa mujer sigue amándote,—asumió Daniel encogiendo los
Se tomo el resto del día, después de comprobar que Malcolm solo quería burlarse de ella, sus ojos estaban rojos de llorar por un par de horas, decidió ir a la cena para justo hacerle creer a su esposos que deseaba volver con él, pero ahora sentia una carga en el pecho.Se alisto ella sola, Mandy no podía ni quería estar junto a Arianne, estaba cometiendo una tontería, no esta de acuerdo con lo que iba a hacer. Erick le mando en un mensaje de texto del lugar en que la estaría esperado. Se puso un poco de maquillaje para cubrir sus pecas, algo de color y u brillo en los labios, apenas se notaba una pincelada de maquillaje.Se recogió el cabello varias veces, pero al no poder peinare sola decidió dejar de pelear con su enmarañada y rojiza melena .—¿Estas segura Arianne? —le pregunto al reflejo en el espejo.Habia una música muy sueve tanto que provocaba una sueve pesadez en los ojos. Se paró delante de Erick sin saber que decir. Cuando él la vio dejo de agitar el pie derecho. —Arian
Sus ojos se abrieron, el techo azul rey, las sábanas de seda, bordadas con hilos finos, la suavidad era de dioses. Un aroma a suavizante de telas.Se incorporo de golpe, todo a su alrededor era nuevo, una habitación elegante, amplia de color azul como el techo, piso negro pulido, se dio cuenta que su ropa era diferente. Vestida con una pijama delgada, una blusa de tirantes rosa, y unos shorts cortos con encaje sobre las costuras. La ropa era finaDio un salto de aquella cama, donde estaba, como habia llegado ahí, con quien haba pasado la noche.—Arianne al fin despertaste,—ella brinco nuevamente escondiéndose bajo las sábanas, por un instante no reconoció la voz —¿Estas bien? —se descubrió para convencerse de que estaba en buenas manos. Malcolm salió de una puerta blanca cubierto solo de la cintura para abajo con una toalla, y una pequeña entre sus manos secando su torso, y su fascinante cabello castaño rubio. Era tan atractivo.Ella se volteó cubriéndose los ojos, pero con una terc