—¿Aún Rocky te sigue limpiando la mierda?—No será que yo se la limpio a él.—Oh claro, su desastre, pero hablo de que siempre te apoyo, ¿o por qué no dejaba salir a Star con vestido? —insinúa Amanda.—Ah si, pues solo quiere que Star se vista así solo para mí —me reí.—Ese Rocky, tal vez no sea el mejor amante, pero si el mejor amigo —dijo Amanda.—Sí. —Le sonreí.Mire los vestidos y vi unos con unos diseños simples, pero elegantes, y escogí los colores que más le podrían beneficiar a la piel de Star. Tomé como cinco vestidos y se los di a una empleada de Star.—Sígame a los vestidores señoritas —le hace una reverencia a Star y luego se va para que mi estrellita la siga.—Tienes gustos caros —comenta Amanda viendo en la sección que escogí.—No me fijé en el precio, solo en lo lindo que verían los vestidos si Star los usará.—Lo dices como si los vestidos fueran feos si no los usa.—Es que a ella todo le queda bien.—¿No será que comí estás enamorado, ves de todo en ella
—Te quiero Ross —susurra contra mis labios.—Aew, que lindos se ven… pero lamento arruinarles el momento, no tenemos toda la noche —aplaude Amanda para apurarnos.—¿Ya vas a cerrar? —le pregunté.—Cerraré para dejarte más linda de lo que ya es, pero los estoy apurando porque parece que estoy más ansiosa a que tenga su cita que ustedes mismos.—De acuerdo —me reí y me separé de Star.—¿Qué te vas a poner? —me pregunta Amanda.—Me conoces, así que sorpréndeme —le guiño el ojo y luego beso su mejilla—. Nos vemos dentro de un rato, te dejo en buenas manos princesa —le sonrío a Star—. Por favor cuídala —le pido a Amanda.—Con mi vida. —me responde con una sonrisa.POV’StarVeo como Ross se va y en lo que pierdo su silueta, me encuentro con Amanda, quién me sonreía de una manera extraña.—¿Estás bien? —la veo confundida.—Lo siento… es que estoy nerviosa, de verdad quiero agradarte porque eres muy importante para Ross y él es muy importante para mí, es como mi hermano menor.—¿M
—Sé que te dije que iríamos a un restaurante, pero por ahora debemos mantener lo nuestro en secreto, por lo que comeremos aquí, aunque prometo que mantenernos así no será para siempre.Dijo cuando nos detuvimos como una especie de almacén y nos quitamos los cascos con delicadeza, el almacén se veía antiguo, pero en buen estado.—¿Es tuyo? —pregunte mientras me acercaba con curiosidad.—Si, mi madre lo compro hace tiempo para mí cuando se enteró que me encanta esculpir, cuando terminó una obra, la traigo aquí, poco a poco lo he ido acomodando para que sea una galería, pero no me he atrevido a mostrárselo al mundo.—¿Cómo se enteró? —Entro a mi taller sin mi consentimiento, era una madre preocupada por la vida social de su hijo, así que cuando vio mi talento, todo sus dinero lo invirtió aquí, yo le dije que no era necesario, pero ella insistió porque creía en mí.—¿Y tú padre lo sabe?—Supongo que sí, pero no hace ningún comentario sobre el tema, solo lo ignora, creo… Mack se en
—Porque es el anillo con que te pido ser mi novia, representará nuestro pasado, habrá otro anillo dónde serás mi prometida, ese será nuestro presente y cuando nos casemos, ese tercer anillo será nuestro, o la simbolización de él.Lo abracé, no me esperaba nada esto.—Te quiero Ross… gracias. —Lo besé con ternura.—Yo también te quiero Star —dijo contra mis labios antes de separarse—. ¿comemos? Yo asentí y nos acercamos a la manta, para luego sentarnos en las almohadas. Destapó los platos de comida y olía bastante bien.—Es filete de salmón con vino blanco y queso parmesano y jugo de maracuyá porque eres menor de edad y no puedes beber, igual a mi no me gusta beber.—Dentro de unas horas seré mayor de edad —le sonreí en complicidad y se ríe.—Aun así, no beberas.—¿Es una orden? —me burlo y se pone serio.—Por supuesto.Me reí y él también lo hizo, empezamos a comer y la música de fondo ambiento el lugar, no teníamos necesidad de hablar, solo disfrutamos de la cena y de la m
Comienzo a sentir cortos besos en mi rostro, por lo que me hizo abrir mis ojos poco a poco, no sé en qué me momento me dormí, pero supongo que me siento tan bien con Ross que puedo relajarme al punto de dormir tranquila.—Feliz cumpleaños estrellita, ya son las doce —escucho la voz de Ross y me enfoco en su respiración.—Ross, ¿por qué me despiertas a esta hora? Sigamos durmiendo —me queje.A nosotros nos encanta dormir, debe entenderlo, él es el único hombre lobo que además de ser vegetariano, puede estar sin dormir.—Quiero mostrarte algo preciosa. —Me besa mi frente y ya no siento su calor.Se levanta y se coloca los pantalones y me da su camisa blanca de botones para ponérmela, al estar listos, me sujeta la mano y me acerca a una de sus esculturas cubiertas.—Desde que te vi llorar, me prometí a mi mismo que eso jamás iba a pasar hasta que me enteré de que te enviaron lejos a causa de la muerte de tu madre, sé que esto no podría traerla de vuelta, pero si la mantendría viva
—No joven —rectifica la chica— no está diseñado para el cuerpo de un hombre, pero si quiere uno especial, se lo podemos mandar a hacer a la medida.—¿Me está discriminando por tener los webos grandes?—Yo no dije eso —se pone nerviosa.—Yo creo que sí, ya que si fuera por otra cosa, si me entraría la tanga —dijo coqueteando con ella y de pronto sentí los celos nuevamente en mí— hagamos algo, si me lo pongo y si te gusta lo que ves, sales conmigo.—¿Y si no que?—¿Y por qué tendría que haber un si no? Yo sé que voy a encantarte, además de que compraré la tanga —le sonríe muy seductor que hasta yo me derretiría.Aunque sonó tan creído y seguro de sí mismo, en el momento que estrecho la mano con la chica, él ya había perdido. Pues cuando se probó la tanga, la chica solo se burlo de él y bueno, nosotros también, es que se le estaba saliendo un poco los webos.Pero las risas no le traen inseguridad, fue el rechazo de la chica, por un momento se sintió rechazado, que su ego había caí
—Cierra la puerta al salir Star —me ordena saliendo de la oficina.Esto me enfureció más, ni siquiera el feliz cumpleaños, está claro que nunca tuvo hija y que solo le importa ser alfa.Salgo de la oficina y cierro su puerta como me lo había pedido, la verdad no sé qué quiere probar, pero al menos un abrazo como recibimiento de tanto tiempo sin vernos.—Hey, Star… —escucho la voz de Meg—. ¿Todo bien? Se acerca a mi antes de que me dirija a la salida, no quería esta fiesta y menos en cada de mi padre.—Si —mentí.—¿Puedo contarte algo? —se veía tensa.—Claro.Salimos al patio con un jardín grande y una piscina, había música e invitados que ni siquiera conocía o recordaba.—¿Qué sucede? —le pregunto cuando ya estamos alejados de todos.No creo que nos escuchen, solo activan sus sentidos cuando desean concentrarse y estar alerta, ahora sólo están pendientes de disfrutar.—Me acosté con Rocky —cierra sus ojos con fuerza.Por más que me doliera escuchar eso, yo no sabía por qu
—¿A dónde vas? Creí que te gustaban las fiestas.—Solo será un momento —dice muy nervioso y la vez sospechoso.—¿Quieres que te acompañe?—¿Desde cuando te volviste beta? —se burla.—Solo que hay días en los que quiero agradecerte por ser el mejor amigo de todos.Eso lo pone aún más nervioso y para lo que antes ignoraba, ahora era más notorio.—Lo siento Ross, pero debo de encargarme de esto solo.Este imbécil, tuvo bastante oportunidad para decirme le verdad.—¿Y que te encargó Mack para que lo puedas hacer solo? —Me puse serio y arquee una ceja—. Algunas veces lo que pide, necesitamos manos extra.Se sorprende y se queda un rato callado.—No puedo decirte Ross, y por más que necesitemos manos extra, a Mack le gusta que podamos hacerlo solos.—¿Por qué no puedes? Eres mi mejor amigo y mi beta, Mack no tiene derecho a encargarte nada, Mack me encarga cosas a mi y luego yo te las encargo a ti, él nunca le encarga a los beta directamente.—No puedo decirte… —lo lamenta.Per