Estimadas lectoras y lectores Al parecer Ana y Héctor llevan una extraña relación de "amistad". El hombre siempre ha estado ahí para apoyarla y no dejarla sola, ambos luchan con el recuerdo de todo lo que sea que sucedió.
--- Dominik Müller ---Luego de más de 6 horas, por fin vamos camino a la ciudad. Una vez que Bruno llegó por mí, el hospital accedió a darme de alta. Debido a la crisis que presentaba, el hospital se negaba a dejarme ir solo, Bruno tuvo que conducir por 6 horas, me dijo que había un accidente y demoro más tiempo de lo habitual. Si las miradas mataran, ya estaría enterrado en este preciso momento.- Dominik… Dom…- Dime…- Ya debes de dejar de hacer este tipo de cosas… ¡No puedes seguir así…! Si ella no quiere que la encuentres, es por algo, ¿No lo crees?- Necesito hablar con Ana... No puedo dejar que las cosas terminen así y menos cuando sé que tuvo un hijo o hija mío… - Digo recordando cómo fue que me enteré.- Dominik, solo te voy a poner en perspectiva las cosas tal como las veo, no quiero que creas que te estoy atacando, pero solo contesta lo siguiente:¿Qué le vas a decir? ¿Qué vas a hacer con Elena? ¿Para qué quieres encontrar a Ana?- Únicamente quiero hablar con ella, quiero
--- Ana Teyssier ---Sentir el calor del abrazo de Héctor calma un poco mis pensamientos, esos que llevó 5 años luchando para apaciguar y que no salgan.En ocasiones, miro al hombre que está a mi lado y me pregunto, ¿Por qué? ¿Por qué demonios no me quedé? Al final, ahora estamos juntos, pero separados.Él tiene a Ella y, en definitiva, es una buena mujer y se ha adaptado perfectamente al ritmo de vida de Héctor. Aunque no puedo evitar sentirme culpable, ya que, en ocasiones, imagino cómo hubiera sido mi vida si no hubiera tomado ese vuelo hace 8 años.Tal vez mi vida hubiera sido diferente, tal vez mi familia seguiría viva, tal vez Paz realmente sería hija de Héctor, tal vez se llamaría diferente, tal vez no lucharía cada día con lo que siento, tal vez no me sentiría culpable por seguir viva.Admito que el enterarme de que estaba embarazada, cambió varias cosas en mí, pero el embarazo llegó en el momento en que había decidido que ya había tenido suficiente, que ya no podía más, que m
--- Héctor Plourde ---Miro a la mujer que tengo a mi lado, Ana se ha quedado dormida, con sumo cuidado, me levanto, la cargo y me la llevo a su habitación.En noches como esta, me duele verla así, me duele recordar todo lo que sucedió, me duele pensar en cómo fue que su familia se nos fue. Si para mí fue doloroso, para Ana fue peor, yo fui a quien le tocó esa darle esa dolorosa noticia.Sé que de haber ido tanto Jude como yo estaríamos muertos, pero ese día tuve una reunión de emergencia y tuve que cancelar mi salida, había prometido que llegaríamos al día siguiente.Recuerdo que Marlene me dijo que le habían avisado a Ana, pero que ella les había dicho que confirmaría con Dominik. De acuerdo con lo que me dijo, Ana nunca había confirmado eso, me sonó raro, aunque supuse que estaba ocupada con otros temas y no puse más atención.Después, Marlene me dijo que se había comunicado con Dominik y este, le había prometido que nos alcanzarían en dos días.Fue obvio que ellos tampoco los alcan
--- Héctor Plourde ---Tan pronto como cuelgo, llamo a la única persona que sé que es capaz de mover las cosas y no tener que rendir cuentas por ello, además de que, ya había pensado en él para el tema de la familia de Ana. Entro a mi móvil y busco su contacto, finalmente lo encuentro y le marco.- ¿A qué debo tu llamada? – Responde la voz al otro lado de la línea.- Necesito dos favores… - Digo sin rodeos.- ¿Cuáles? Si me hablas tan temprano, debe ser urgente…- Necesito que traigas a Ana de Nueva York y el otro, necesito averiguar dónde está la familia de Ana. Todos iban en una camioneta rumbo a Acapulco, hubo un derrumbe y varios autos quedaron atrapados… - Digo sin darle tiempo a decir que no.- ¡Maldita sea! – Dice cómo primera respuesta y sé que podría ser que se niegue.Una vez, él y yo hablamos sobre Ana y ambos llegamos al punto de que él prefería no saber de ella. Era un capítulo en su vida que deseaba cerrar, y para mí era más que obvio que, era incómodo.- ¿Qué? ¿Puedes o
--- Alexis Betancourt ---Mis manos están temblando, siento mi estómago revuelto, no me puedo imaginar el dolor tan grande que se le viene a Ana.Sé muy bien que, para ella, su familia es lo más importante. Lo que acaba de suceder no lo esperaba nadie. El derrumbe ha afectado a varios automóviles, llevan toda la noche tratando de sacar o encontrar sobrevivientes, pero está por demás que busquen.Al ver las imágenes en las noticias, es claro que no las hay. Una vez que logro calmar un poco mis pensamientos con un trago, inmediatamente busco a alguien que me ayudara con el tema de Héctor en México.Solo fue cuestión de hablar con algunos amigos en el gobierno para que le den acceso a donde están llevando los cuerpos recuperados.Mando el nombre y los datos de quién será la persona que le dará acceso a Héctor; luego de ello, busco en mi agenda uno de mis contactos en EE. UU para traer a Ana de vuelta.Aún no me explicó cómo Ana, sí, mi Ana, fue a caer en las malditas garras de ese idiota,
--- Alexander Müller --- - Señor… ¿Va a necesitar algo más? - ¡Oh, no! No puedes retirarte, nos vemos mañana… - ¡Gracias, señor! ¡Descanse! ¿Descansar? Desde que regresé a Nueva York no he podido hacerlo, jamás imaginé que mis acciones hubieran cambiado tanto el curso de las cosas, jamás pensé que mi madre pudiera hacer tanto daño a su propio hijo. Luego de que Bruno Wilson y la tía Lorelei, vinieron a mí y me contaron el desastre de vida que estaba llevando Dominik, decidí regresar. Llevaba 3 años divorciado de Chloe, prácticamente era un secreto a voces, pero regresar lo hizo más evidente. Mi madre erróneamente había hecho de la vida de mi hermano una m****a, no fue hasta que regresé y les conté a mis padres toda la verdad con puntos y comas, ahí, ella entendió que Dominik solo había sido víctima de mis malas decisiones. En ese momento fue donde ella, se percató de que todas sus acciones fueron incorrectas, fue ahí donde mi querida madre se dio cuenta de toda la m****a que h
--- Ana Teyssier --- Luego de que Héctor colgó, me quedé con un hueco en la panza, sé que ellas están bien, sé que todo esto debe ser un malentendido. Lo sé porque ayer me escribieron, abro mi móvil y miro el último mensaje de Romina. - “¡Bicha fea, ojalá nos puedan alcanzar…! Mamá, quiere que nos volvamos a reunir como en Año Nuevo, te esperamos..." Este mensaje estaba al pie de una foto donde todos estaban sentados en la camioneta, una “selfi”. Todas lucían muy felices, sonreían, Luc en medio de todas las mujeres Müller como años atrás, cuando solo era él, nuestro único hombre en la familia. Miro la foto, intento hablar con Romi, pero por más que llamo, el teléfono no enlaza la llamada. Le marco a mi mamá y nada, decido llamar a Luc o Celeste, pero inmediatamente me manda al buzón. No puedo evitar sentir un hueco en el pecho, es aquí cuando las ideas con las que intento engañar a mi cabeza no pueden más y comienzo a sentir que es verdad, es verdad lo que me acaba de decir Héct
Ahora sé que Dominik es capaz de hacer muchas cosas. Voy a su estudio y busco entre todos sus papeles, pero no encuentro nada. Ahora que lo recuerdo, su visa y pasaporte tampoco están. - ¡Piensa Ana! ¡Piensa! ¿Dónde pudo haberlos puesto? – Me digo en voz baja. Quedo viendo hacia dónde sé que está la caja fuerte, esto se me hace una exageración; sin embargo, con Dominik, nunca se sabe, he visto que él coloca muchas cosas ahí. Él no lo sabe; sin embargo, me sé su combinación, nunca la he abierto, pero creo que esta será la primera vez. Con manos temblorosas, introduzco la contraseña y ruego porque se abra la maldita puerta. Puedo sentir cómo el sudor escurre por mi frente y sien, la veo que sí, sí se abre y eso me calma, pero no puedo cantar victoria hasta que revise ahí. Veo todo lo que hay dentro, no me sorprendo, ya no, Dominik guarda varias cosas, monedas de oro, papeles y sí, mis papeles, ¿Qué demonios? Él tiene todos mis papeles aquí, ¿Por qué los guarda aquí? Ya mejor ni pr