Querida María:Doce años pasaron y todavía deseo poder regresar el tiempo hasta aquel día en que te abandoné. Fui tan estúpido al elegir el éxito profesional antes que mi amor por ti, arrogante al no decirte que te amaba y que quería que fueras mi esposa e ingenuo al creer que me estarías esperando. Recuerdo cada momento desde que te vi por primera vez y me robaste el aliento con tu frescura y tu belleza; nos recuerdo compartiendo nuestro café matutino, nos recuerdo caminando juntos en el parque en un hermoso día y ver tu mano tomada de la mía que me aseguraba que no debía preocuparme de nada porque nuestra vida era buena, recuerdo el día que, de pie a través de un cristal, vi un anillo tan deslumbrante como tú y supe en ese instante que quería pasar el resto de mis días contigo. Sí, te iba a pedir que te casaras conmigo, estaba a punto de hacerlo cuando surgió la oferta de trabajo. El destino me puso una cruel prueba y yo fallé rotundamente movido por un impulso egoísta que me sacó
Observo a Julián. El amor de mi vida, el hombre que más amé y por el que estaba dispuesta a todo. En algún momento pensé que nuestro destino era estar juntos para siempre. Sin embargo, a veces la vida te acomoda en un lugar diferente y así tienes que seguir. Me quedo perdida en mis pensamientos mientras los niños chapotean en la orilla del mar con Julián. Julián, que dice amarme, que ha demostrado amarme a pesar de todo. Verlo junto a mis hijos llena mi corazón de alegría. Pero no es lo que quiero. No en este momento. Lo amé con todo mi corazón y durante muchos años añoré su regreso. Pero justo ahora, mi corazón no está para albergar sentimientos de amor romántico hacia otra persona, ni siquiera hacia Julián. Son muchas cosas las que me ocupan y ese tipo de amor no está entre mis prioridades. Definitivamente, su regreso fue algo bueno. Si no lo hubiera hecho, mi hijo seguiría atrapado en una relación abusiva con el hombre que decía amarlo como hijo. Cómo no lo vi? Realmente no lo v
No puedo parar de reír. Me sujeto el estómago con ambas manos pues ya comienza a dolerme. Julián también ríe. - De dónde sacaste eso? - digo tratando de contener la risa que amenaza con salir nuevamente. - Solo quería aligerar un poco el ambiente - él también se sujeta el estómago. Coloco el dedo índice sobre los labios para indicarle que debemos guardar silencio. - Los niños, podemos despertarlos - le digo en un susurro. Julian se tapa la boca y poco a poco vamos recobrando la compostura. - Ojalá todo fuera así de sencillo - digo ya sin atisbos de risa. - No tiene por qué ser complicado, María. -- Un nuevo recuerdo, una nueva vida y para adelante. Se dice tan fácil, pero no lo es, al menos no para mí. - - Hace doce años, Javier me sacó del letargo en el que estaba y ahora, nuevamente, fueron mis hijos quienes lograron hacerlo. Sí es complicado Julián, Sabes por qué? -- Por qué? - - Por que a mi me toma más tiempo sanar. Porque no puedo simplemente almacenar lo vivido como
Nos separamos con lágrimas en los ojos. Nuestras miradas se encuentran y un escalofrío recorre toda mi espina dorsal. Julián levanta la mano y me limpia las lágrimas con el pulgar. Es un movimiento lento y suave pero siento una descarga de emociones que me hacen vibrar. Giro la cabeza y beso la palma de su mano antes de separarme de él. Le muestro el anillo para devolvérselo y niega con la cabeza. - Quédatelo. Si un día logro que me vuelvas a amar, si consigo que vuelvas a sentir amor por mi y estás dispuesta a intentarlo nuevamente, solo póntelo. Es tuyo y siempre lo será. - me acaricia suavemente la mejilla y con su mirada profunda me dice - Entenderé si no lo usas nunca, de verdad. Pero seré el hombre más feliz del mundo si lo colocas en tu dedo y, si eso sucede, te prometo que dedicaré mi vida entera para hacerte feliz a ti y a los niños. -No digo nada y, como para liberar un poco la tensión del momento, remata- Y quizá, cuando seamos viejos te diga, viste que si estábamos de
Mil gracias por leerme. Es la primera vez que me aventuro a escribir algo así y espero lo hayan disfrutado tanto como yo. Debo admitir que me costó algo de trabajo pero me esforcé en hacer algo leíble. Les dejo y espero me sigan leyendo en próximas publicaciones. Por lo pronto, comenzaré con una historia diferente de la que aún no tengo claro el nombre de mis personajes pero sí de lo que irán sus destinos. “La creencia de que el destino es el fuerza superior que nos lleva por donde debemos ir, sugiere que todo lo que ocurre en nuestra vida no es producto de la casualidad, por el contrario, todo sucede porque la historia ya está marcada y así debía suceder. “Espero me sigan. Até logo. Hasta luego. Travis 🧶
Trato de colocarme el collar cuando mi marido abre la puerta de la habitación. - ¿Me ayudas cariño? - le digo extendiendo el collar y haciéndome a un lado el largo cabello rizado, de un negro tan profundo que tiene destellos azules. Jorge me besa cariñosamente la nuca y la recorre con sus labios hasta llegar al lóbulo de mi oreja. Deja el collar en la mesita de a lado y toca mi pecho introduciendo su mano por el escote del vestido. - No tenemos tiempo, amor - le digo girándome para quedar frente a él. Como aún no me pongo el labial, lo beso mientras cruzo las manos detrás de su cabeza tomándolo del cabello. Nos besamos con mucha intensidad. Siempre disfruto plenamente de las caricias de mi esposo que cada vez se van haciendo más intensas. Me recargo en su cuerpo y siento su dureza atrapada en el pantalón. Bajo la mano e intento bajarle el cierre cuando la puerta se abre repentinamente. Una pequeña de ojos dormilones y cabello igual de negro que su madre entra a la habitación. No
Acostado con las manos bajo la cabeza, Julián observa el techo, no puede dejar de pensar en la mirada de María. La mirada tan llena de desprecio y las palabras tan hirientes que le dijo. - Pero bien merecidas. Tu te lo buscaste idiot. Acaso pensaste que te iba a esperar toda la vida? Serás animal- se levanta de mal humor y marca un número telefónico de memoria. - Regresé - es todo lo que dice. Aleja el aparato de su oreja pues al parecer la persona del otro lado ha gritado. Responde con un monosílabo y cuelga. Cubre su pecho desnudo con una playera. Se cambia el pantalón formal que usa por unos jeans desgastados, toma su chaqueta y sale de la habitación de hotel en la que se aloja. Mientras espera a Andy, Julián piensa en María. Aunque se fue del país por una excelente oportunidad laboral y con ello tuvo que abandonar al amor de su vida, nunca dejó de amarla. Durante todos estos años siempre pensó en ella y aunque nunca pensó que regresaría, cuando se le presentó la oportunidad si
Jorge escucha el llanto de una niña y enseguida sabe que es de su pequeña Luz. Corre hacia el área de juegos y lo ve.Agachado con su nena y María, está el hombre que puede destruir todo lo que tiene. Sabe que María lo ama pero también está consciente de que nunca lo amó como a él. Le costó tanto trabajo y tiempo que ella aceptara casarse con él . Y aunque en un principio, lo hizo por la conveniencia de su situación, ella llegó a amarlo. Toma a la niña en sus brazos sin dar muestras de que lo ha visto y se aleja de ahí consolando a su hija. Aunque no puede dejar de pensar en Javier, no dice nada y actúa normal. Mira a María y sabe que está nerviosa. Sabe que ella aún lo ama pero, serán estos doce años capaces de vencer al amor de su vida?Se conocieron en la universidad. María era una chica algo rara que estudiaba diseño industrial porque esa era la carrera que quería estudiar. A diferencia de él, que quería estudiar arquitectura pero se tuvo que conformar con su segunda opción.