Habían pasado 2 horas desde que Ian había llegado a la casa, yo ya me había ido a mi habitación a bañarme y vestirme decentemente, él había pasado al cuarto de mi hermano para instalarse. La simple idea de que se quedara aquí era perturbadora, cuando me decía algunas palabras en doble sentido me hacía ponerme nerviosa, nunca había tenido que lidiar con una persona de su tipo a excepción de mi hermano.
No llevaba aquí ni dos horas y ya se paseaba como Pedro por su casa, sin camisa mostrando su jodido abdomen muy bien trabajado, que digo muy bien, perfectamente bien trabajado, ¡Dios! Hyemi ¿Qué vez?, tú tienes novio, me dije a mi misma. Borré su imagen de mi cabeza y me dispuse a hacer algo de comer.
—Hey tú— Di la vuelta y lo vi parado a lado de la barra para comer.
—Me llamo Hyemi— contesté fingiendo una sonrisa.
—Ándale si, tú Juanita, debo decirte que los macarrones con queso no me gustan— Señaló a lo que yo estaba preparando.
—¿Y qué pretendes que haga? ¿Te aplaudo o que chingados?
—Hey hey tranquila fiera, solo lo digo para que me prepares otra cosa— eso ultimo lo dijo con una sonrisa burlona.
—Mira Ian, no sé por qué mierda estarás viviendo en mi casa y no me interesa, pero vamos a quedarnos claros ¿ok? Aquí no es un restaurante, ni mucho menos soy tu sirvienta, así que abstente a tratarme y hablarme como tal. Y una última cosa no me hables no quiero tener ningún tipo de trato con alguien como tú, y por cierto tu hazte de comer.
Después de mi comentario el abrió la boca para contestarme, pero la puerta de la entrada se abrió dejando ver a un Jason con la boca toda marcada de labial barato, uhhhg.
—Hey hermano ya estás aquí— comentó mi hermano al momento en el que se limpiaba con la manga de su suéter la boca. Ambos se dieron un abrazo y se fueron a la sala a platicar de cosas que no me interesan.
Tomé mi celular y vi que tenía varios mensajes de mis amigas y uno de mi novio, pero mejor me concentre en como quedaba mi deliciosa comida.
Cuando al fin termine me senté en la barra y me dispuse a comer de mi manjar, en eso el timbre sonó y cuando justo iba a pararme Ian fue a abrir dejando ver que era Jack, pude notar la mirada de Jack en Ian quien seguía semi desnudo, yo me adelante a acercarme a la puerta.
—Gracias es para mí— dije con una sonrisa fingida, Ian solo puso los ojos en blanco y se fue.
—Ok, eso ha sido raro— comentó Jack al tiempo en el que nos dábamos un cálido beso.
—Lo sé, estará quedándose aquí un tiempo.
—¿Qué? ¿Y tú estás así como si nada? ¿Hyemi lo has visto como está vestido? Es más, ni ropa trae puesta
—No seas exagerado, hace rato le dejé muy en claro que no quiero hacer ningún tipo de amistad con él así que no tienes por qué desconfiar, ahora que si tomas en cuenta que aquí también vive Jason.— Le comenté con una cara de "es lo más obvio". Sin darme cuenta seguíamos en la puerta hasta que reaccioné y lo hice pasar, después de eso le pregunte que si ya había comido.
—Pensé que ya habías visto mi mensaje, justo venia para ir a comer juntos.
—Oh... sí vi el mensaje, pero no lo abrí, mejor comamos aquí ya tengo mis macarrones hechos
—Excelente, adoro tus macarrones— Comentó mientras se frotaba las manos y tomaba asiento. No sé por cuanto tiempo lo estuve viendo, pero noté que se reía cada vez que volteaba a verme y notaba que lo miraba fijamente.
Jack iba en el último grado del colegio al igual que mi hermano, pero eran tan diferentes, mientras mi hermano y su amigo se preocupaban por su físico y las chicas, en como lucir "hermosos" así decía Jason. Jack era más sencillo, tenía buen cuerpo y también era alto, su cabello oscuro, casi negro le hacían resaltar sus ojos grises , pero él era el tipo de chico que prefería quedarse conmigo a ver películas, platicar o leer un poco a salir a algún tipo de fiesta, si por él fuera estaría día y noche conmigo y eso es una de las tantas cosas que me encantan de él.
—Amor ¿has pedido permiso para el viaje? — comentó Jack, sacándome de mis pensamientos.
—No— hice una mueca —realmente no creo obtener el permiso sabes cómo son mis padres no me dejarán y menos si es contigo.
—¡Oh vamos! también irán Henna y Emma, no te secuestrare ni nada por el estilo.
—Eso yo lo sé, pero haz entrar en razón a mis padres que no solo quieres robarme mi virginidad en ese viaje— Comenté divertida, si hay algo que mis padres me dicen antes de irse a algún viaje, es que me cuide y no cometa errores. Y todos sabemos a lo que se refieren con "errores". Mi mamá teme que algún día ellos lleguen y yo este cargando una panza de unos cuantos meses.
Jack no pudo evitar soltar una risa —Sabes que te respeto y eso no sucederá hasta que estés lista, ya lo hemos hablado.
—Eso háblalo con ellos— Dije levantando las manos en signo de rendición. Después de unos minutos me levante a recoger los platos
Jack se dispuso a lavarlos mientras yo me arreglaba ya que iríamos a comprar un regalo para su mamá, en una semana era su cumpleaños y yo también le quería regalar algo, es una señora encantadora y me llevo muy bien con ella.
Al subir las escaleras la primera recamara es la de Jason, al pasar noté como hablaban los dos idiotas, escuche la voz de Jason un poco exasperado.
—Te vi Ian, sabes la regla, no la tocas, mucho menos intentas algo.
Pasé al otro lado de la puerta y por algo, en vez de seguir hacia mi habitación, me puse a escuchar.
—Vamos Jason sabes que ese tipo de niñitas no son lo mío, y tengo muy en claro cuál es la regla no entiendo por qué te pones así.
—Bueno eso espero, te lo advierto, tú le pones una mano o intentas algo y te juro que te mato. Ella no es como todas las zorras con las que acostumbramos a involucrarnos.
Después de escuchar las palabras de Jason no entendía bien de que hablaban, pero lo deje de lado, fui a mi habitación y me maquille un poco cuando estuve lista baje a la sala viendo a Jason y Jack platicando.—Estoy lista.—No lleguen demasiado tarde— dijo Jason con cara picara, yo solo puse los ojos en blanco al salir de la casa solo se escuchó un —Usen condón— Jack soltó una risita al igual que yo, pero al ir a la cochera nos topamos con Ian el que no tenía ni un poco de felicidad en su cara, lo ignoramos y subimos al auto de Jack y nos fuimos al centro comercial.—¿Cu&aa
Bajé por las escaleras hasta la cocina, la mesa estaba puesta tan perfectamente que parecía que le hubiera tomado mucho tiempo hacer la cena. Me indicó que me sentara y lo hice. —Provecho —Dijo indicando para que comenzara a cenar. Él dio un bocado y yo me le quedé viendo fijamente, así fue por uno o dos minutos, si bien Ian no era un asesino (o no al menos que yo supiera) no me daba confianza comer algo hecho por él, no sabía si le había puesto algo a la comida, ya bastante me había amenazado con los enfrentamientos que habíamos llegado a tener. Tal vez fui muy obvia o sabía leer la mente.—No tiene veneno.—¿Y yo cómo se?—Yo también estoy comiendo —Abrió la boca y me mostro la masa de comida den
Decidí no perder mi dignidad rogándole, eso era lo que él quería así que mejor decidí marcarle a una de mis amigas y decirle si podía quedarme en su casa. Henna aceptó y pronto pedí un taxi a su casa. Al llegar me preguntó que porqué decidí quedarme con ella, omití los detalles ya que sabía que si le contaba no me iba a dejar en paz.Platicamos un poco de otras cosas, pronto nos quedamos dormidas. Al despertar temprano me aseguré de que Jason ya estuviera en la casa, al confirmarlo volví y al entrar lo primero que vi fue a Ian desayunando en bóxer.—Buenos días ¿cómo amaneciste? ¿dormiste bien?Sentía como la tripa se me retorcía y la bilis se me derramaba, pero sabía que si le
El celular de él comenzó a sonar, miró la pantalla y luego lo bloqueó.—¿No piensas contestar?—No es importante —Dijo mientras no quitaba la vista del camino.—¿Una chica?—No exactamenteEl celular comenzó a sonar de nuevo y él hizo lo mismo de bloquear la pantalla. Logré ver el nombre de Theo. Creo que no mentía cuando le pregunté si se trataba de una chica. Así siguió sonando 4 o 5 veces más. Cuando por fin llegamos yo entré a la casa. Me llegó un mensaje de Jason confirmándome de nuevo que no pasaría la noche aquí. Le dije que estaba bien y que no se preocupar por mí.Vi
—¿Qué estás haciendo aquí? — Dije en un susurro, alterada, histérica.—Vine a terminar lo que comenzamos— Dijo con toda la seguridad del mundo mientas estiraba las sabanas de mi cama y descubría mi cuerpo.—Aléjate Ian— advertí.—¿O si no qué?—O si no grito y a Jason no le gustara que estés aquí ¿verdad? — Dije triunfante.—Eres como las típicas zorras calienta braguetas— pude notar molestia en su voz.—Primera y última vez que me hablas así estúpido— Levanté mi mano para darle una cachetada, pero él reaccionó más r&aacu
Vi caminar a Ian hacia la entrada, que para ser sincera se veía muy bien, es decir a pesar de ser una fiesta muy sencilla, fueron demasiadas personas importantes del trabajo de la señora por lo cual todos íbamos de vestido largo o de vestir, y esa ropa le sienta muy bien.—¿Quién es el chico? — preguntó Thony sacándome de mi pensamiento al ver que todas mirábamos como Ian caminaba con su cara de "sé que todos me miran".—Nadie— contesté restando importancia.—Es el chico que se quiere dar a mi amiga.
—¿Que putas te pasa? — Le grité mientras lo empujaba. Sus labios apenas rosaron los míos, pero no planeaba cometer otro error y mucho menos ser su plato de segunda mesa de nuevo. Lo que más me sorprendió es que no opuso resistencia y se hizo para atrás.Lo miré por unos segundos y vi como sus ojos se clavaban en mí.—¿Estas drogado o algo por el estilo? — Fue lo único que pudo salir de mi boca.El suspiró, y dejó caer la cabeza hacia atrás. —Esto es una mierda, no tiene caso, larguémonos de aquí.—¿Es una mierda? claro que es una mierda, ¿cómo te atreves a besarme después de haber follado con Lara? sabrá dios donde estuvo tu boca, quiero que te quede claro, conmigo no vas a hacer lo que te de la puta gana, conmigo no.Él simplemente miró al suelo, me quedé
Al despertar poco a poco noté la luz del sol entrando por mi ventana, tomé una almohada y la puse en mi cara. Recuerdos de la noche anterior pasaron por mi mente, la fiesta de la mamá de Jack, Hanna llorando, Ian con Lara, ¿Ian y Jack?... oh dios, caigo en cuenta de que en realidad no recuerdo casi nada después de los tragos de ayer. Por más que intento mis recuerdos son sumamente borrosos, lo último que recuerdo es que Ian me dio un electrolito y más de eso no hay nada en mi mente... Quité la almohada de mi cara y abrí los ojos poco a poco adecuando mi retina a la luz, me doy cuenta de que estoy en mi habitación, rápido me siento en la cama, cosa de la que me arrepentí en el instante, siento mil latidas en mi cabeza, parece que me va a explotar o algo así, me recosté de nuevo despacio, algo que fue en vano ya que fue peor para mí, siento como si el techo diera vueltas, si