Después de verlos partir, Anand caminó hasta el lugar donde se encontraba Aaron, intentaría hablar con él y calmarlo, luego se aseguraría de que estuviera a salvo y acudiría al llamado de Kiran cuando fuera necesario.
— ¿Tienes hambre?— preguntó el gemelo que quedaba, sin saber muy bien como hablar con ese hombre — te ofrecería un café, pero es importante que duermas esta noche.Aaron volteó a ver a ese hombre, a diferencia del otro, y pese a su enorme parecido al ser gemelos, el tal Anand no le causaba ningún tipo de sentimiento negativo.Todo lo contrario. Estar a su lado lo hacía sentir tranquilo y en calma, din embargo, seguía sin entender por qué tenía que dormir como si fuera un crío del que querían deshacerse para descansar. —¿Por qué debo de hacerlo? ¿Qué es eso tan importante que Kiran y su nieta han ido a hacer?Anand observó al humano, en ese momento casi agradecía que su hermano no estuviera allí.Él no soportaba a los humanos, era de esos que creían que solo envenenaban el planeta y se dedicaban a cazar a criaturas como ellos, por eso no lo quería cerca de su sobrina y por eso no tenía demasiada estima por Kiran, por haberse mezclado con ellos y haberles regalado algo tan preciado para ellos.Pero Kiran era el guardián, el descendiente del gran lobo y nadie se atrevería a discutir porque decidió compartir su bebida ancestral con los humanos.— Kiran fue a darle el secreto de su linaje a mi sobrina, es algo que deben hacer ellos solos.Explicó mientras se movía hasta la cocina para preparar algo de café.Aaron realmente no entendía el misticismo que parecía existir. Sin embargo, tampoco es que pudiera hacer otra cosa que no fuera la de esperar como le había dicho Kiran— Después de eso, yo, junto a otros miembros de nuestra comunidad, me reuniré con ellos y es muy importante que hagas lo que te dije, que no salgas, no todos son agradables con los extranjeros por aquí.Aseguró girándose a observar a ese hombre que debía casarse con su sobrina, a él tampoco le gustaba demasiado la idea, pero Alisha parecía encantada con ello y si era el deseo de los ancestros, él no era nadie para oponerse.—No tienes que convencerme de eso— el joven citadino no podía olvidar o mejor dicho sacarse la inquina que le había causado conocer al otro tío de la joven.La forma que observaba a la joven, era algo que lo tenía molesto. ¿Acaso no eran familia? Tal vez por eso Kiran deseaba alejar a su nieta de ahí. Si también fuera familia de la joven, eso era lo que haría.— ¿Cómo es el lugar en el que vives?— preguntó Anand curioso, pero sobre todo preocupado por su sobrina, a la que quería como a una hija— me gustaría saberlo, sobre todo si ella va a ir allí contigo.—Bueno, la ciudad es muy diferente. Demasiado aquí puedes disfrutar del sonido de los animales, del aire fresco, allí lo único que se puede disfrutar es el sonido de los automóviles y el esmog que estos producen. Si quieres ver vegetación, debes ir a un parque… La verdad no creo que ella logre encontrarse.Por supuesto que Aaron trató de omitir que la gente no sería amable con ella al ver su rostro. Ni él podía evitar estremecerse ante el recuerdo de la cicatriz de la joven, aunque claro, si ella cubría su rostro, la otra mitad era hermosa.Realmente no entendía qué pretendía Kiran haciendo que ellos dos se casaran. El sonido de la cafetera hizo que Aaron saliera de sus divagaciones.—Me gustaría una taza de café si no es mucha molestia, prometo dormirme después de tomarlaPor supuesto que se dormiría, Anand se aseguraría de que así fuera, realmente la única intención de hacer el café había sido echarle un poco de preparado de hierbas especiales que usaba para relajar a su hermano cuando se ponía muy nervioso, aunque obviamente usaría una cantidad mucho más reducida con él.— Está bien, ahora te lo traigo.Anand caminó hasta la estufa y vertió un poco de café en dos tazas, en la de su invitado echó una pizca de un polvo verde sin que pudiera verlo y luego caminó de nuevo hasta el sofá en el que permanecía sentado el nieto político de Kiran.Aaron cerró sus ojos. ¿Casarse? En algún momento era obvio que lo haría, su madre le pediría que se casará y tuviera un heredero.Pero sería más adelante, no en ese momento.— Te vendrá bien, seguro que te ayudará a conciliar el sueño — después de decir aquello, aquel hombre dejó también el azúcar cerca para que se echara un poco en caso de necesitarlo.Las palabras del tal Anand causaron una especie de desconfianza que terminó por esfumarse rápidamente, sobre todo al tomar el primer sorbo de café colocado en una taza frente a él.Fue tomar un sorbo y sentir sus ojos pesados, pero eso no fue lo curioso o extraño, sino la figurita de la persona que apareció entre brumas en sus pensamientos, esa mujer de cuerpo escultural y rostro desfigurado.La joven Alisha, la nieta de Kiran fue lo que Aaron vio antes de quedar profundamente dormido.—Alisha…— murmuró el nombre de la joven sin ser capaz de impedirlo, antes de caer profundamente dormido.Anand comprobaría que ese chico se hubiera dormido, eso era lo que le prometió a Kiran que haría y él siempre cumplía sus promesas. Abrió levemente la puerta y sonrió asintiendo mientras la cerraba sin hacer ruido.El viejo lobo, abuelo de su sobrina, había puesto protecciones alrededor de la casa para asegurarse que nadie podía entrar en el lugar sin su permiso, así que era imposible que nada le sucediera, el café que le había dado sería suficiente para que ese chico durmiera el resto de la noche hasta bien tarde en la mañana.La luna resplandecía a través de la ventana haciendo que la sensación de negrura de la noche se volviera menos lúgubre, era una noche especial, una que no todos tenían el placer de ver, la ascensión de un nuevo representante de los ancestros, nueva en ese caso, su sobrina Alisha.Ahora solo faltaba la señal para ir a reunirse con el resto de lobos de las montañas, cada una de las manadas que vivía en ese lugar se reunirían ante el aullido de la última descendiente del gran lobo y su antecesor.Cuando se dieron cuenta, abuelo y nieta ya estaban pisando suelo sagrado. Alisha era capaz de notar la fuerza y presencia de sus antepasados en aquel lugar, siempre había tenido aquella sensación de estar acompañada al estar allí, pero en ese momento era más que eso, era como si pudiera sentir la presencia de todos, junto a ella y su abuelo.Pero no solo eso, Kiran se veía mucho más poderoso y concentrado, no sabía del todo lo que hacía, ni qué consejos recibía de sus ancestros, pero estaba claro que se comunicaba con ellos. Ella podía notar aquel poder natural que desprendía su presencia y se estremecía con solo sentirlo cerca de ella y de su loba.Sabía que era el día de su ascensión como nueva portavoz de los ancestros. La nueva guardiana del secreto y su bebida ancestral, que su alma se uniría a todas aquellas que estaban vinculadas a esa tierra, a todos los representantes del gran espíritu del lobo antes que ella.Kiran ya podía ver a sus antecesores rodeándolos, era consciente d
Debería estar feliz y sentirse honrada, Alisha lo sabía, pero aquella mañana la losa sobre su espalda era demasiado pesada. Siempre supo que un día se convertiría en líder de todas las manadas, en la elegida por los ancestros para comunicarse con los suyos, para guiarlos hasta que, como su abuelo, decidiera abandonar su lugar.Aunque parecía que su responsabilidad no sería tan longeva como la de su abuelo, quien había conocido a su luna después de un siglo como hombre soltero, y al ser humana había decidido envejecer con ella.Alisha viviría menos, ella ya conocía a su luna, a su soul mate y, como todos en su especie, sabía que vivir sin él sería extremadamente doloroso después de conocerlo, por eso muchos renunciaban a sus lunas cuando eran humanas, por eso y por los prejuicios, pero ella no los tenía y se moría de ganas por experimentar el amor.Aun así era incapaz de quitarse la pena que todavía sentía al recordar la forma en que su abuelo se había desvanecido ante sus ojos, uniénd
Alisha no esperaba lo que sucedió, estaba completamente desprevenida cuando alguien se acercó a ella por la espalda y llevó una mano hasta su boca y así evitar que gritara, mientras el cuerpo mojado de su agresor se pegaba a su espalda.Intentó removerse, pero ese hombre era más grande y fuerte que ella, sin duda un lobo, pero no había ningún olor que le resultara conocido, tal vez, a causa del agua que había eliminado su aroma o quizá era un simple lobo errante. ¿Quién más se atrevería a hacerle algo así a la portavoz de los ancestros que alguien de fuera?Alisha se removió, tenía mucho miedo de lo que podría sucederle, sobre todo al notar cierta dureza bajo el agua rozando contra sus nalgas.La bilis se acumulaba en su garganta y las lágrimas resbalaban por su rostro, le era imposible liberarse, pero lo que realmente la asustó no fue la posibilidad de que ese hombre la obligara a hacer algo por la fuerza que no quería hacer, si no, esos dientes que podía sentir acariciándole el cue
De inmediato unos celos enormes se apoderaron de él, llevándolo a empezar a quitarse la camisa, aunque estuviera mojada tendría que bastar para esconder la desnudez del cuerpo de Alisha, a quien fuera que se atreviera a posar sus ojos en ella, más valía que nadie lo hiciera o esa persona tendría serios problemas.—Toma, ponte mi camisa, por favor, necesitamos salir de aquí, llevarte a un lugar seguro.Aaron se volteó para evitar ver como ella se vestía; sin embargo, al voltear y verla cubierta con su camisa, hizo que no solo sintiera como perdía la capacidad para respirar por la imagen sensual y erótica que en ese momento tenía la joven, también un ligero problema al sentir el despertar inmediato de su hombría.Había visto un par de mujeres vestidas con su camisa y le parecieron en su momento hermosas, pero no tanto como la joven, pese a la enorme cicatriz que atravesaba su rostro.“¡Por todos los diablos! ¿Por qué se ve tan hermosa con mi maldita camisa puesta?”Ella no podía explica
Anand vio el desastre que estaba a punto de ocurrir de dejar que esos dos se enfrentaran, no solo por la diferencia de poder. Si no porque eso lo hacía desconfiar aún más del actuar de su hermano.—Por supuesto que ella se irá con su prometido, pero en algo estoy de acuerdo contigo, hermano, no puede irse sola a los Estados Unidos, nunca ha salido de este lugar, nosotros iremos con ella.Las palabras del otro hombre hicieron que Aaron se tranquilizara, aun así no bajo ni un poco la guardia, ni su postura ante el otro.A pesar de la negativa de Aaron de que fueran con ellos, Alisha había expresado su deseo de que sus tíos la acompañaran, no estaría sola en un país extranjero y mucho menos después de lo que le acababa de ocurrir, además, no quería alejarse de la única familia que le quedaba, así que tras amenazar con que si ellos no iban ella tampoco no le quedó más remedio que aceptar.El helicóptero de Aaron aterrizaba en ese mismo instante, en el mismo claro que lo había hecho días a
Alisha se quedó estática, ella jamás había besado a nadie y, por supuesto, que nadie la había besado, estaba completamente en shock, no sabía qué hacer y justo cuando iba a reaccionar y corresponder el beso notó como este terminaba.—Lo siento…— se disculpó Aaron alejándose de ella una vez que volvió en sí.¿Qué diablos le había pasado? ¿Por qué la había besado?Llevó su mano derecha hasta su cabeza peinando sus cabellos. Tremendamente avergonzado ante sus propias acciones.Ella no era la clase de chica que le atrajera, por supuesto que no le gustaba.“¿Cómo puede gustarme?”Se preguntó volteando a verla de nuevo.—Sinceramente, no sé que es lo que me pasó, perdóname si te incomode con mi actuar…Ella negó y le dedicó una tímida sonrisa, jamás había sido una chica tímida, solía pasar delante de todo el mundo con la cabeza en alto a pesar de que podía escuchar los murmullos sobre su cicatriz. Las cosas que decía la gente, a veces eran desagradables, otras veces la compadecían, una de
Explicó Alisha mientras se apartaba el cabello que tapaba permanentemente ese lado de su cara y volvío a taparse de manera inmediata.Alisha soñaba con que la madre de su esposo se convirtiera en algo así como una segunda madre para ella también. Así era como debía ser cuando dos lunas se unían, todos a su alrededor debían encajar de un modo u otro.Aunque Aaron era humano, sus almas habían nacido unidas y tal vez no estaba tan conectado a ese lado espiritual del que la humanidad vive permanentemente desconectada, pero ellos estaban hechos para estar juntos.—No puedo creer que Aaron no me conteste— exclamaba furiosa su madre, era la cuarta vez que le llamaba en el día y que su llamada era desviada al buzón del celular de su hijo.Estaba nerviosa y ansiosa de saber si en ese viaje había conseguido que el viejo Kiran le diera el jodido secreto de su exitoso café.Meredith odiaba haberse pasado gran parte de su vida deseando que ese hombre se muriera y ahora que parecía que su final est
Meredith no podía creerse que su hijo apareciera caminando de la mano de una joven pueblerina de la india y junto a dos hombres bastante grandes que parecían sus guardaespaldas, lo bueno era que Kiran no iba con ellos, sería una suerte para ella que el hombre se hubiera decidido a quedarse en ese pueblo, pero por nada del mundo aceptaría ver a su hijo con esa pueblerina.— Vaya hijo, veo que llegaste con visita, supongo que esta chica tan guapa es la nieta que Kiran quería ir a ver — la mujer extendió su mano para estrechársela a la joven, fingiendo amabilidad.— Encantada señora, sí, soy Alisha, la nieta de Kiran — la chica le estrechó la mano emocionada por la amabilidad de su futura suegra.Pero Meredith se asqueó en el instante en el que la chica movió la cabeza y el pelo se le echó hacía un lado descubriendo la parte del rostro que llevaba tapado, era horrible, tenía un deslumbrante cuerpo que había podido ver mientras bajaba, incluso la parte del rostro que había visto antes, le