Me siento extremadamente nerviosa, mientras estoy sentada en mi coche, tomo el libro de contabilidad de mi jefe y lo abro con cuidado. Es un libro que tiene mas de 50 años, y contiene toda la trayectoria de estafa y negocios turbios de Chuck, de verdad no va a estar nada contento cuando se de cuenta que desapareció.

—¿Lo tienes?

Saltando ligeramente por la sorpresa, veo como ese idiota de peli blanco se asoma por la ventana del conductor de mi coche, mirándome fijamente.

—Como… ¿Cómo demonios llegaste aquí? —Pregunto confundida.

Pero él no me responde, haciéndome suspirar y preferir simplemente seguir con lo mío.

Ha pasado casi una semana desde que tuvimos nuestro primer encuentro, y durante todos estos días, me di cuenta de que me estuvo siguiendo. A veces cuando me asomo dese la ventana de mi departamento lo veo “casualmente” caminando en la calle, también viene al restaurante varias veces al día, y hasta me sigue en un coche cuando estoy por la ciudad.

Siempre me pone de los nervio