*—Alice:
Cinco Años Después…
Se sentía como si todo fuera un sueño.
Hace algunos años nunca pensó que estaría allí en ese momento tan especial para ella. El camino a recorrer fue difícil, estuvo lleno de obstáculos, se presentaron tantas situaciones en las que deseo tirar la toalla varias veces. Tuvo miedo, hubo pérdidas, tantos llantos inaguantables, pero lo que prevaleció siempre fue la perseverancia de que algún día, su esfuerzo tendría frutos.
Bajó la mirada hacia su diploma en sus manos en donde era ya reconocida como Doctora en Medicina mientras escuchaba las palabras de agradecimiento del decano. Su primer año en la universidad comenzó bien, su primer semestre fue excelente, como siempre, sus notas elevadas y recibiendo ovaciones de los maestros por lo mismo. H
*—Alice:Estaba nerviosa. Muy nerviosa.Alice se mordió el labio mientras miraba por la ventanilla de aquel vehículo en el que iba. Era la primera fiesta a la que asistía en su primer año de la universidad. Había escuchado muchos rumores sobre las fiestas universitarias, en estas se hacían muchos desastres, pero eran épicas y definitivamente, esta, a la que asistiría esta noche, seria épica.Esta fiesta la celebraban unos chicos de una hermandad muy popular cada cuatrimestre, la fiesta era igual de popular que la hermandad, toda la universidad la conocía y deseaba asistir, el único problema era que el cupo era limitado pero su amiga Kelly Lynch, una exótica rubia de ojos celestes, había conseguido una invitación a esta para ella, Alice Saunders y otra de sus amigas, Melody Hart.Para estas últimas dos, sería la primera fie
*—Darren:Había llegado a la fiesta. Él era el anfitrión de esta, pero él siempre llegaba tarde pues porque le encantaba que cuando entraba al lugar donde se celebraba, la gente lo mirase con sorpresa y se quedase murmurando. Él vivía de esto. Darren Black hinchó el pecho y comenzó a caminar dentro del lugar.Algunos de los invitados de la fiesta, unos conocidos y otros completamente desconocidos para él, se acercaron, rodeándolo. Saludándolo con muchos ánimos, especialmente las chicas, quienes se tiraron hacia él. Darren sintió asco ya que algunas chicas se atrevieron a besar su boca.Se pasó una mano por la boca, limpiándose los restos de labial y quien sabe que más. Fue halado por una mano en su brazo hacia atrás. Darren murmuró una maldición. Él era una eminencia en aquella fiesta, pero, aun
*—Alice:El imbécil de Darren Black la había tomado como si fuera un saco de papas, colocándola sobre su hombro y sin importarle que la gente viese su trasero, la sacó de la fiesta de la misma forma. Alice pataleó, gritó y llamó por ayuda, pero esta última nadie le ofreció. Claro, todos los que estaban aquí eran unos traidores que se dejaban gobernar por Darren y su sequito de imbéciles.Darren continúo caminando con ella entre sus brazos sin importarle los insultos que Alice le decía ni los golpes que recibía de esta. Alice se movía constantemente para que por lo menos él la dejase caer y ella poder escapar de él. No quería que él la tomase, no quería que nadie la tomase en ese momento. Lo único que deseaba era irse a la comodidad seguridad de su cuarto en el dormitorio de chicas.Alice lloriqu
*—Darren: Soltó una risita. La chica se había desmayado. ¿Tan bueno era que la había hecho tocar el cielo con las manos? Volvió a reírse mientras salía de ella una vez más, esta vez Darren no había conseguido llegar al clímax. Miró su miembro aun endurecido. Maldición. Había estado loco por venirse dentro de ella, pero para su desgracia Darren no había utilizado un maldito preservativo, simplemente se le había olvidado, pero… Le dio una mirada a la rubia desmayada sobre la cama. Su cabello rubio estaba derrapado sobre la almohada, sus ojos estaban enrojecidos de tanto llorar y sus labios… Darren se relamió los suyos mientras miraba los labios de la chica. Estaban tan hinchados, Darren deseaba tomar sus labios una vez más en los suyos y no tan solo sus labios. Paso rápidamente la mirada por todo su cuerpo, desde sus pechos igual de hinchados que sus labios, su vientre plano hasta sus regordetes pliegues. Darren movió una mano hacia estos y con
*—Alice:Una semana después…Su vida estaba hecha un caos.Desde que pasó la fiesta hace una semana y fue reclamada por Darren para después ser dejada abandonada, en un hotel sin dinero y con su ropa destrozada, su vida se había sumido en una vorágine de caos y chismes. No entendía cómo era que las chicas que eran seleccionadas como «Afroditas» seguían con su vida luego de que dejaban el título o peor aún, no entendía cómo es que una chica podía desear ser una Afrodita. Una semana después y Alice aún no se había acostumbrado a los estudiantes de la universidad llamándola Afrodita y tampoco no se había acostumbrado al acoso que recibía por parte de los chicos y las burlas de algunas chicas envidiosas. Si ellas supieran que Alice darí
*—Alice:Habían pasado varios días desde que Alice se encontró con Darren. Se había alejado de él corriendo como loca por el campus hasta el dormitorio que compartía con Melody, sabía que Darren podía encontrarla allí, pero estaba más segura dentro de aquellas paredes que fuera donde el demonio podía raptarla.Lo había visto varias veces en su línea de visión y Alice había escapado de esta cada vez. Es que no podía ponerse en peligro. Alice andaba como si estuviese teniendo algún acosador detrás, aunque Darren era un acosador, con miedo y andando rápidamente. Alice incluso no quería ir a sus clases por miedo de que Darren apareciese allí. No podía confiar en nadie más que sus amigas.Ahora Alice se dirigía a la seguridad de su cuarto en el dormitorio de la universidad. Camin
*—Alice:Los días habían pasado un poco rápido, pero al menos Alice estaba más tranquila, Darren no había aparecido desde la última vez. Esto ponía un poco feliz a Alice, ya que quizás eso significaba que se había hartado de ella o… Hizo una mueca. Quizás quería hacerle lo mismo de la otra vez, dejarla que ella se pusiera feliz para después arruinar su diversión apareciendo después para tomarla una vez más.Bueno, la única noticia buena es que ya sabía dónde estaba Natalie, la chica que se había librado del título de Afrodita. Su nombre era Natalie Taylor. Cabello lacio de color negro y corto, ojos de color del ámbar, tez blanca y muy alta. Además de su físico, tenía la información de donde trabajaba. En una galería de arte. Alice tenía ya la direcci&oac
*—Alice:Una semana después…Siempre se dijo que no tenía las agallas suficientes para hacer algo. Era una chica tranquila y seria. Sacaba buenas notas, no salía a festejar y se quedaba en casa siempre estudiando. Era la niña buena y seria de sus padres y entonces fue a esa estúpida fiesta y todo se volvió un lio. Pero hoy tenía que ser valiente. Alice Saunders de 19 años miró al chico de cabellos azabaches sentado frente a ella. Estaban en su dormitorio. La primera había citado a Darren Black, «El Príncipe Negro» en su dormitorio luego que se decidió en iniciar aquel «Plan de Seducción/Obsesión» Si, así era que sus amigas y Alice le llamaban a aquella loca idea que Natalie le había dado.Fijo su verdosa mirada en Darren quien arqu