La chica se siente extremadamente afectada por lo que ha sucedido en los últimos días y ya no tiene la capacidad para continuar discutiendo por algo que al final no tiene pie ni cabeza. Sin embargo, Imanol no está dispuesto a abandonarla en ese estado, sabiendo que en realidad él no hizo nada malo para que le afecte como ella piensa.— Tú no eres consciente de lo que dices, ese maldito quería hacerte daño y sí, yo me ofrecí a llevar a cabo su juego, pero fue para protegerte, pequeña. Créeme, que si ese imbécil hubiese contratado a otra persona, seguro se hubiese aprovechado de ti, pero yo no lo hice.Jamás te haría daño, Jandé.— Entonces, ¿no pasó nada entre nosotros? —consulta con una pizca de esperanza en sus ojos vidriosos.— No, absolutamente nada. Solo me presté para que ese imbécil no te hiciera daño. En aquel momento quise mantener el secreto porque sabía que tú no reaccionarías nada bien, ahora que todo está aclarado quiero pedirte que volvamos a casa.— No lo haré, no es el
Durante los días siguientes los esposos se han desaparecido de la empresa, no han ido a trabajar porque han viajado de emergencia a un lugar sorpresa que Imanol preparó en una sola mañana.Ahora mismo están en el Puerto de Trujillo, en Honduras. Imanol ya conocía ese sector, pero la chica no. Por consiguiente, la llevó a ese maravilloso lugar histórico en donde se encuentra la Fortaleza de Santa Bárbara, además el puerto tiene una de las mejores playas de Centroamérica.Jandé se la está pasando genial, hace mucho tiempo que no se divertía de esa manera. Algo curioso que sucede es que al ver el mar siempre sonríen y recuerdan con nostalgia aquella ocasión cuando se quedaron varados sin el yate. Por cierto, ese Yate lo encontraron en un terreno de contrabandistas, por ende no lo ha podido recuperar, ya que ellos se niegan a hablar y negociar sobre algo que supuestamente les pertenece.— Jamás pensé que volvería a sonreír después de que Darío se burlara de mí. —comenta Jandé.— De ahora
La empleada estaba tan avergonzada por presenciar aquella escena que no tuvo más remedio que voltearse para quedar de espaldas y fingir no haber visto nada.— ¿Qué ocurre? ¿Acaso no fui claro al pedir que no me interrumpan por unos minutos? —Cuestiona con molestia sin siquiera dirigirle la mirada. —¿Acaso no puedo disfrutar a solas con mi mujer en mi propio hotel? —Continúa quejándose ante la mirada de sorpresa que Jandé le está dedicando, puesto que hasta ahora se entera de que ese hotel es de su propiedad y por eso se tomó el atrevimiento de ordenar un desalojo.— Lo lamento, señor. Ha llegado una joven que dice ser su prima e insiste en verle porque trae noticias sobre su madre. —informa ella muy avergonzada. —Nuestra intención no ha sido de molestarle, señor Volkover, pero la señorita nos está amenazando con llamar a la policía si no la dejamos entrar y créame que lo que menos nos conviene como hotel es un escándalo.— Dile que se vaya, ahora mismo arreglo el asunto por mi cuenta.
Por primera vez, Natalia se portó de maravilla con Jandé, esta se ha quedado sin poder creer lo que sucede en la cabeza de esa niña que anteriormente demostraba lo mucho que la odiaba y ahora de la noche a la mañana pareciese que la adora.Anduvieron por varias tiendas de ropa y también fueron a comer una deliciosa sopa de mariscos, típica de ese lugar turístico. Entre broma y broma, la hermosa Jandé se divirtió sin pensarlo, aunque siempre extraña a su esposo y hubiese preferido que él también les estuviese acompañando para sentirse protegida.— Chicas, ya deberíamos regresar al hotel, es tarde y temo que Imanol se moleste por estar fuera mucho tiempo. —pide.— Querida, quédate un poco más y acompáñanos a tomar un cóctel, prometo que luego de eso nos iremos. —dice Natalia, siendo ella la anfitriona del grupo.— Está bien, pero si ustedes no cumplen con su palabra, me iré sola. —les aseguró.De inmediato se dirigieron a un bar. Jandé les pidió a las chicas que la esperasen un momento
Por otra parte, Natalia se negó a acompañarle porque temía que la chica esté despierta y de inmediato la acuse frente a Imanol de haber sido ella la que pretendió con buenas intenciones que fueran a tomar y finalmente caer profundamente en un sueño.— Mi primo no es cualquier estúpido, él va a querer investigar lo que ocurrió y seré la primera sospechosa. —repite en su mente mientras que no deja en paz los dedos de sus manos por los nervios que se han apoderado de ella.El corazón de Imanol dio un vuelco y casi se paralizó cuando el joven de recepción le confirmó que hace unas horas se ha registrado un huésped con ese nombre que él menciona. Le pidió el número de habitación y luego de sobornarlo con un par de billetes fue directo a la puerta con la llave que se le entregó.Al ver que Jandé estaba casi desnuda sobre la cama, sus venas se inflaron de odio. Ha vuelto a revivir el episodio de hace unos años cuando estaba muy enamorado de su prometida, pero esta le fue infiel con uno de su
Al sentirse acorralada por su situación lamentable y sin saber que más hacer, ella le llamó a Leo para que le enviara dinero y poder regresar a casa en poco tiempo y así hablar lo más rápido que se pueda con su esposo.—¿Qué sucede, Bambi? ¿Acaso el imbécil de tu esposo se ha quedado sin dinero? —Quiso saber.—Te ruego que no lo tomes a burla. Es algo muy serio y no, él tiene mucho dinero como siempre. El problema es que… es que… creo que él se ha marchado y me ha dejado en este lugar.—¡Cómo! —Exclamó con un grito ensordecedor el hombre al otro lado de la línea.Jandé le comentó detalle a detalle lo sucedido, ella lloró mientras lo hacía. El corazón de Leo se hizo pequeño al escuchar el relato de la chica, esa niña a la que le tiene mucho aprecio y cariño desde que la conoció por primera vez y que, aunque haya sido de una manera peculiar ese encuentro, él guardaba la esperanza de que Imanol por fin se enamorara nuevamente de alguien y dejase en el pasado a su ex prometida.Finalmente
Fue así como pasaron los días y el orgullo de Imanol seguía intacto. Cuando su madre le preguntó por su nuera, este le comentó que se había ido de visita donde un familiar y que no regresaría hasta dentro de unos días porque aquella persona estaba en delicado estado de salud y ella es su única pariente.Cuando la curiosidad le ganó, bueno, más que todo, las ganas de saber de su mujer, llamó a uno de sus amigos y este le informó que no saben nada de la chica, pero que le urge hablar cara a cara con él y que en ese momento se dirigía a la empresa.—Nos hemos distanciado por tu culpa, hermano, estás molesto y pretendes que todo a tu alrededor pague por ello. —reclamó el joven.—Tienes razón, lo siento mucho. La culpable de esto es Jandé, seguro ella se ha marchado con su amante y yo me la estoy desquitando con ustedes —expresa—. Ella cree que si huye de mí, me olvidaré del divorcio y del dinero que le pagué para que alquilara su vientre. —finaliza.—Deja en paz a la chica. Leo te pidió q
Cargada de ansiedad y al mismo tiempo curiosidad por saber quién es la persona que está próxima a llegar. Jandé se vistió con ropa sencilla, pero que la hacía ver hermosa. Ella guarda la esperanza de que sea Imanol quien haya decidido ir a verla y, por ende, pedirle que se vaya junto a él a casa.Cuando el timbre sonó, se llenó de nervios y no sabía qué hacer, ¿mostrarse enfadada ante él o demostrarle que está muy feliz de encontrarse? Finalmente, y después de un largo debate en su mente, ella corrió a abrir la puerta, va con una sonrisa enorme y vaya sorpresa la que se llevó al no encontrarse con el hombre que tanto había esperado y alucinado que llegaría.—¿Señora Melisa? —dice un poco decepcionada a medida que su sonrisa se desvanece.—¿Acaso esperabas a otra persona? —preguntó con gracia la señora y alzando una ceja, pues se imagina el motivo de su reacción.—Eh, no. Leo no me dijo que era usted la que vendría. Oh, por Dios, aún la tengo de pie en la puerta, sea usted bienvenida.